DOPPEL ❀ Minchan/banghyunho [✓]

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Cuando Minho entró con Felix a una habitación ya estaban esperando cinco chicos, específicamente cinco rostros conocidos pero al mismo tiempo tan diferentes, debía admitir que estaba sorprendido por la imagen fuerte que todos tenían pero al mismo tiempo se sentía un ambiente relajado, algunos bromeaban mientras otros tenían una cara de desear estar en otro momento, cediendo ocasionalmente a una sonrisa cuando una broma se les hacía muy graciosa. Felix le había pedido esperar en el marco de la puerta mientras explicaba brevemente la situación, así que se dedicó a observar en silencio.

El chico partió recordándoles la misión de la noche anterior, donde todos empezaron a quejarse alegando que "si Minho no se hubiese separado del grupo habrían llegado temprano a casa". El mencionado tragó saliva, se sentía nervioso, un extraño cosquilleo recorría su estómago, su nuca y espalda se sentían frías pero reconocía como empezaba a sudar, era tan raro escuchar como hablaban de él haciendo acciones que no recordaba, claro, entendía que había otro Minho pero al mismo tiempo era difícil de asimilar. Chan tomó la palabra cuando Felix no supo como continuar en cuanto llegó a la parte donde él despertó, en cuanto empezó a relatar sus sospechas de que no era Minho, todos empezaron a reírse diciendo que no debería quitarles el tiempo para ese tipo de bromas pero en cuanto Bang le habló y Minho ingresó finalmente al aula, todos lo notaron al instante.

El lugar se quedó en silencio y confusión, eran los segundos más incómodos el tener todas las miradas sobre él, inspeccionando, intentando averiguar qué pasaba pero nadie se atrevía a decir nada hasta que un chico de cabello rojo se acercó poco, atreviéndose a posar una mano en la mejilla de Minho para acariciar con su pulgar.

— No es Minho... —susurró el chico alejando poco a poco su mano hasta llevarla hacia su pecho—, se ve tan limpio... Tan puro.

— Desde que pusiste tu mano en él se demostró —comentó al que ya reconocía como Hyunjin—, Minho ya te habría mordido. Eso explica por qué no me ha insultado en todo el día.

— Lo que no explica es... ¿Quién es exactamente? ¿De dónde vienes? ¿Por qué estás tan sano? ¿Dónde está nuestro Min? —preguntó otro chico de cabello plateado con una cicatriz en la mejilla.

Minho aclaró su garganta mientras Felix lo invitaba a tomar asiento en una de las sillas, todos se acomodaron para escuchar, se notaban genuinamente interesados pues nunca habían visto una persona como Minho, irónicamente aunque tuviese la cara de uno de sus compañeros.

— Vengo de Delling, distrito tres. Los países de todo el mundo decidieron dejar de lado sus diferencias y unirse para crear una tierra ideal, hace cien años que las personas residen entre ocho distritos... En realidad no hay diferencia entre ellos, ninguno es menos privilegiado, pero es una forma de ubicarse pues dejaron de existir los nombres de países, pero todos tienen una capital. Cuando dejaron de pelear se consiguió salir adelante y tras diez años de trabajo duro, la tierra se volvió un lugar donde no existe la pobreza ni la violencia. De hecho... Para estas generaciones pensar en un pasado así es casi inimaginable... —llevó su diestra hacia su nuca para rascarse un poco incómodo, todos estaban atentos y sus expresiones eran de sorpresa, pero decidió continuar—. Estaba haciendo las compras de navidad cuando me encontré con... Con Minho en el túnel del tren, quise ayudarlo y de pronto estaba solo con esos tipos raros.

— Entonces es cierto... —murmuró un chico de cabello azul.

— ¿Qué? —preguntó Minho con confusión mientras veía a Felix acariciar la espalda de ese chico mientras éste se mostraba repentinamente afligido.

— La gente se compraba cosas en navidad... Podían costearse algo así...

Minho se sorprendió ante ese comentario, Chan cambió su expresión igual afligida por una más firme arrugando un poco su entrecejo.