You [LS]

Capítulo 10 [final]

«Tú»

Louis estaba nervioso. Sentía sus manos temblar y trataba de tranquilizarse como podía.

El aire se iba de su cuerpo y sus piernas no podían ni moverse. Demasiado exagerado ya era, pero en serio esto iba a matarlo.

Había citado a Harry a las ocho de la noche en su restaurante favorito. Había reservado todo el maldito lugar para ellos dos, y ahora no quería salir de su casa.

El ojiverde seguía en el trabajo, y el castaño debía estar en el restaurante antes de que Harry llegara al departamento.

«Vamos Louis no eres un niño deja de tener miedo, tienes que irte».

Era lo que se decía con temor.

Suspiró tratando de enfocarse en otra cosa y salió de su casa. Caminó hasta el auto y lo encendió. Prendió la radio para ver si la música lo tranquilizaba. Emprendió camino hasta el restaurante, y cuando llegó saludó a Liam, el mesero del lugar, el cual ya se había convertido como en su amigo.

Fue a la mesa que tenía para los dos y se sentó en la silla del frente. Se sentó en silencio por unos cuarenta minutos agradeciendo que el chico que atendía no se hubiese acercado aún.

—Tranquilizate amigo, todo va a estar bien.

Bueno ya había pasado mucho.

—¿Y si dice que no?

—No lo hará. Creo que los conozco ya muy bien como para saber lo mucho que él te ama. Verás que todo irá genial.

—Creo que me voy a desmayar.

Liam rió y le palmeo el hombro.

—Tenemos la comida que pediste lista, la música también, está todo preparado y perfecto. ¿Tú estás listo?

—No.

—Pues... Creo que no hay tiempo para dudas.

—¿Por qué? En estos momentos puedo salir corriendo y mudarme a otro país, o planeta si fuera posible.

—Porque tu chico ya llegó.

Y ahí el mundo se detuvo, Louis olvidó realmente cómo respirar y pensó que en ese preciso momento iba a morir. Liam se alejó sonriendo.

En serio el ojiazul se creyó muerto, porque eso de que la vida pasa frente a tus ojos fue lo que le sucedió.

Cada momento con Harry, su sonrisa, su voz, sus ojos, su cabello, su hoyuelo, sus tatuajes; los recuerdos. Todo había pasado por su mente como si volviese a suceder.

Y él llegó al frente de él. Deslumbrante cómo una estrella, con un traje muy bonito, y su sonrisa de película.

—Hola amor—no supo en qué momento sucedió, pero Louis se había levantado y miraba fijamente a Harry.