Copo de nieve (noray)

Capitulo 4

Ray ya había bajo la montaña, era temprano aún, y el no quería ir aún a su casa con su madre, él quería ir a ver a sus amigos.

Le mando mensaje a Emma, ella dijo que no podía, le mando mensaje a Anna, no podía, por último le mando mensaje a Oliver, el dijo que si.

Ray se encontraba caminando para llegar a la casa de Oliver, su querido amigo.

No tardo en llegar, lo primero que hizo fue tocar el timbre de la casa donde vivía.

Le abrió la puerta un señor.

—hola señor Lucas—saludo el menor—

—Ray, hola, pasa por favor—se hizo a un lado para dejar pasar al chico—Oliver me dijo que vendrías, él está en su cuarto, puedes ir.

—gracias, en bueno voy a ir a arriba.

—claro, ve.

Dicho eso el pelinegro subió a las escaleras de la casa para así poder ir al segundo piso donde se encontraba la habitación del albino con el mechón rojo.

Llego y entro como si nada, encontrándose con una escena muy peculiar.

Oliver en bóxers.

—ahh R-ray!—gritó Oliver tapándose—

—O-ooliver!—cerró la puerta de inmediato—

Bajo las escaleras corriendo y se dirigió hacia la sala de la casa.

Se sentó y espero a que Oliver tuviera las agallas y que bajara por el.

Ray mientras esperaba a que viniera por el, se le vino la imagen de lo que había visto hace unos momentos.

De tanto pensar en eso un sonrojo en su cara apareció.

De la nada se le vino la imagen del chico de las montañas, pero diferente, se le vino la imagen de él cortando leña. Lindo.

—ahh deja de pensar, no pienses—decía el chico para sí mismo—

Ray escuchaba como las escaleras sonaban, significaba que alguien venía.

Oliver.

—h-hola Ray, ¿quieres ir a mi habitación?—el chico pregunto con pena y desviando la mirada—

—amm claro—respondió el menor—

Los dos chicos subieron hasta la habitación.

Habían llegado, Ray lo primero que hizo fue sentarse en la orilla de la cama de Oliver. Y Oliver imitó la acción del pelinegro.

—¿por qué querías verme?—pregunto Oliver—

—acaso no puedo venir a ver a mi amigo?—respondió con otra pregunta—

—claro que si, solo que dijiste ayer qué tal vez no nos veríamos.

—te dije que no estaba seguro, pero ya estoy aquí.

No dijeron nada, el silencio invadido la habitación.

—Oliver, lo de hace al rato, yo quería de—Oliver lo interrumpió—

—pequeño Ray, no era mi intención que me vieras en ropa interior, lo siento, olvidemos eso y para la próxima toca antes de entrar.

Lo último provocó un sonrojo en el menor de la habitación.

—y qué quisieras hacer en estos momentos?—pregunto Oliver—

—mmm déjame pensar—respondió el menor—