Capítulo 25. El rencuentro.

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Akaashi estaba leyendo su libro favorito, aún así parecía estar más cerca de llegar el sueño, el día había sido demasiado largo para el, bueno para ser exactos ir de compras no era lo suyo y tener algunas tareas pendientes lo estaban agotando últimamente, lo único que lo mantenía despierto era recibir alguna noticia de Bokuto.

Akaashi por fin pudo cerrar los ojos, no habían pasado ni un minuto cuando la vibración de su teléfono en el buro lo hizo despertar, aún se encontraba soñoliento, ni si quiera vio quien era el que llamaba, pues a veces solía hablar con su abuelo o su mamá al final del día aunque conversaran de la cosa más trivial.

Si diga..

Akaashi..

Bokuto san.

Akaashi despertó de lleno al escuchar la voz del otro en la línea.

Si, soy yo.. bueno verás, te marcaba para decirte que ya estoy en Tokyo.

Enserio? Y a que hora llegaste? Debiste haberme dicho, pude ir a recibirte al aeropuerto.

Sii, lo siento la batería de mi celular se agotó ...

Ya veo, aún así me alegro de que ya estés en casa.

Si lo mismo pienso

El silencio comenzó a pesar en la llamada, cuando Bokuto comenzó a hablar.

Yo, bueno la verdad es que, se que es mucho pedir pero... puedo verte?

Puedo verte?

Ambos dijeron al mismo tiempo tal frase, y Akaashi comenzó a reír por ese hecho.

En donde te estas quedando?

Dijo mientras se ponía los tenis y buscaba un abrigo en su guardarropa.

Estoy en el hotel xxxxxx.

Para suerte de Akaashi el hotel quedaba a algunas cuadras de su hogar.

Estaré ahí en 15 minutos aproximadamente.

Akaashi cortó la llamada, en cuanto a Bokuto, comenzó a dar vueltas de un lado a otro de la habitación obteniendo una mirada confundida de su compañero de cuarto, durante el tiempo que Bokuto había estado en Roma, había sido bienvenido en su equipo pero, para algunos aun les resultaba algo difícil comprender a personas como el o Mikeel.

Bokuto dirigió la mirada al otro chico haciendo que este desviara la mirada, pero el chico reaccionó antes de que el peligris pudiera decir algo.

-Hey ni siquiera lo pienses....

-Oye solo saldré por un momento, si? Cubreme.

-Que? estas loco, si nos descubren a mi también me matarán.

Bokuto se acercó al chico en la cama, de forma que quedaron sus rostros frente a frente, podía verse un Bokuto hincado.

Besado Por El SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora