#1 When everything falls apart, I will still be yours • (G)I-DLE •

Chapter 12: These bones are mine

Miyeon

Miyeon no había planeado quedarse a pasar la noche.  La razón era algo que había decidido esconder en lo más profundo de sí misma.  Eres lo que te retratas, ¿verdad?  La coreana sabía exactamente cómo no quería que la gente la viera, así que decidió mantenerlo oculto.

Por lo tanto, se encontró despertando envuelta en las sábanas de Minnie, abrazada por los brazos de la tailandesa.  Se acurrucó un poco más, se consoló con la piel cálida del suave cuello de su novia.  Olía a vainilla, siempre lo hacía.  Miyeon sabía a ciencia cierta que era obra de su champú.  La coreana respiró un buen rato, dejando que sus fosas nasales parpadearan contra la piel.  Ella sabía que la chica amaba que hiciera eso.

Minnie se rió y se alejó un poco de Miyeon.

"Hace cosquillas."  Dijo la voz ronca de Minnie.

La mayor decidió darle un beso ligero, manteniendo los ojos cerrados ya que todavía era temprano.

Minnie se inclinó y le dio un beso en la mejilla a Miyeon, suavemente acercó la cara más cerca de ella y comenzó a plantar picotazos por todas partes.  Conociendo a Miyeon, probablemente estaba demasiado cansada para responder.  Pero Minnie, que había estado antes en esta situación exacta, sabía que la mayor estaría lloriqueando si no recibía una buena cantidad de besos matutinos.  Y Minnie también lo haría, si no pudiera regalarlos.

"Dime que me quieres."  Minnie dijo entre dos besos en el puente de la nariz de Miyeon.

"Te amo."  Murmuró la niña mayor, casi pareciendo distante, pero acaba de despertar, Minnie no podía culparla.

Una sonrisa de satisfacción coloreó el rostro de Minnie.  Se acurrucó más cerca del rostro de Miyeon y apretó sus mejillas.

"¿Cuanto me amas?"  Minnie preguntó, frotándose la mejilla de arriba abajo.

"Más de lo que tú me amas".  Miyeon respondió, como si hubiera respondido la pregunta varias veces antes, lo que también había hecho.

"Eso es imposible."  Minnie dijo feliz.  "¿Por qué me amas?"

"Minnie ..." la mayor decidió empezar a quejarse porque las preguntas de Minnie parecían no acabarse.

"Miyeon ..." Minnie gimió de la misma manera.

Miyeon gruñó, suspiró una o dos veces, antes de sentarse en la cama y girar la cabeza hacia su novia.  Los ojos de Minnie eran grandes como los de un lobo, expectantes como los de un cachorro.  Puso sus manos sobre el brazo de Miyeon, mientras anticipaba lo que diría.

"Te amo, porque-" Miyeon dijo, casi susurrando. Su voz era tan ligera, tan tranquila. Justo cuando Miyeon abrió la boca, salió disparada de la cama y huyó por la puerta en segundos.

"¡Miyeon!"  Minnie gritó tras ella.  "Bebé..."  Su pregunta quedó sin respuesta.

Miyeon se preparó y Minnie se preparó.
Miyeon vio a Minnie agarrando el cepillo de su mesita de noche, mientras entraba a la habitación de nuevo.  La más joven bajó las cejas, incluso se burló un par de veces, y miró a Miyeon que estaba distraída buscando algo en su bolso.

"¿Has visto mi lápiz labial?"  Miyeon preguntó, sin levantar la mirada.

Aunque Minnie estaba enojada con ella, también estaba locamente enamorada de ella.  Y para Minnie, esa parte significaba ayudarla y cuidarla.  Si eso significaba consolarla o simplemente buscarle algo de maquillaje, nunca podría evitar hacerlo.  Quizás Miyeon usó eso en su contra varias veces, pero nunca lo admitiría.