Even if I die, It's you

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"¡Ya te dije que entres!" Lalisa grito al ser empujada al suelo de su querida enfermería. Logro poner sus manos a tiempo, solo quejándose por el dolor en sus palmas y rodillas.

Heechul chasqueo la lengua, mirando con desprecio a la omega.

"Vaya que eres un fastidio"

"Lo siento..." Murmuro la chica.

"Apenas me case contigo, voy a mantenerte encerrada todo el día en casa. Que vergüenza es que me vean contigo"

El alfa se dio media vuelta, saliendo de allí; no sin antes cerrar de manera casi violenta la puerta corrediza del lugar.

Lalisa se quedó en el suelo, antes de abrazar sus rodillas y comenzar a sollozar en suelo.

Tomo un poco de aire, tratando de tranquilizarse, pero no pudo. Tapo su boca, ahogando los gritos de agonia que su garganta dejaba escapar.

Estaba cansada, harta, no podía más. Odiaba a todos, odiaba su vida y parecía que nadie en el mundo la apreciaba o le importaba que pasara con ella.

Sollozos eran lo único que se escuchaba en la enfermería, hasta que la puerta de esta se abrió de nuevo. Ella levanto la cabeza, asustada de que fuera su prometido otra vez; pero ahora solo vio a Jung Hoseok, quien parecía tan preocupado.

"Lisa..." el alfa corrió hacia ella, arrodillándose a su lado "Te escuche llorar ¿Qué pasa? ¿Estás herida?"

Hoseok la reviso de pies a cabeza, antes de notar el raspón en una de sus manos.

"Ah, deja te ayudo con eso" Hoseok estiro su mano a las espaldas de la chica, sacando del pequeño cajón el algodón y el desinfectante natural que guardaba en un frasco.

Hoseok tomo con delicadeza su muñeca.

"No soy tan bueno como tú, pero hare mi esfuerzo ¿Si?"

Lisa asintió, sorbiendo su nariz y limpiando las lágrimas de sus ojos.

Hoseok giro su muñeca, dejando ver la pequeña herida.

Lisa la miro algo sorprendida, en su desdicha no había notado aquel raspón causado por su caída.

Hoseok empapo el algodón con el desinfectante, antes de posarlo sobre la mano de la chica.

Lisa siseo ante el ardor.

"Lo siento..." Murmuro Hoseok, limpiando la herida con más lentitud y delicadeza que antes. Lisa lo miro de cerca, su ceño fruncido, usando una concentración innecesaria para tan pequeña herida sin importancia.

Hoseok miro satisfecho su trabajo, antes de sonreír un poco y besar la mano de la omega, antes de soltarla.

Lalisa sintio su corazón latir con fuerza mientras montones de mariposas revoloteaban por todo su vientre.

Hoseok acaricio su mejilla, sus ojos dibujados en preocupación y cariño total.

"¿Qué paso? Dime Lisa"

La chica sintió más lagrimas abandonar sus ojos al sentirse tan cuidada, tan querida, tan apreciada por ese alfa frente a ella.

Soltó otro sollozo antes de lanzarse a los brazos de este, rompiéndose en llanto sobre su pecho.

Hoseok no dudo dos veces en sostenerla, tomando su cintura y pegándola a él, buscando protegerla y reconfortarla de todo lo que le causara ese gran mal.

"No puedo más Hoseok" Dijo con voz quebrada la chica "Yo... no se que hice mal, o porque todos me tratan así. Yo no pedí nada de esto, no quiero seguir viviendo así"