Auribus Teneo Lupum

Espectro del corazón

 A Harry se le ocurrió que quizás él era más extraordinario entre la manada de lo que había pensado al principio. Sabía que llevar el gen recesivo del licántropo lo hacía especial para ellos, una criatura talentosa similar a la realeza y que todos sentían la necesidad de protegerlo. Pero además de eso, como compañero del alfa y su líder conjunto, claramente se esperaba que él hiciera ... nada .

Frunciendo el ceño ante sus pensamientos, arrastró la tela en sus manos hacia arriba y hacia abajo por la arandela de metal, triturando la suciedad y el sudor antes de sumergirla en la piscina junto a la que estaba arrodillado. La necesidad de evitar a Fenrir ( Greyback, corrigió su mente) y el aburrimiento lo habían expulsado rápidamente de la guarida todas las mañanas solo unas pocas horas después de que el alfa se había despertado. Esto se había convertido en la rutina durante las últimas semanas; él curaría las heridas del lobo y luego se alejaría lo más rápido posible, generalmente hacia la acogedora luz del sol.

Era glorioso estar al aire libre bajo el sol todo el día, incluso ahora en primavera, con el clima no del todo en movimiento hacia el verano, pero la luz y el calor eran suficientes para hacer que su piel cantara suavemente con cada momento que pasaba. Ahora era más consciente del clima. Prácticamente podía oír las hojas de los árboles susurrando conspiradoramente sobre el verano. Incluso el agua fría que le salpicaba las manos se sintió gloriosa mientras lavaba la ropa con la que se había ofrecido a ayudar a Amoux, y las gotas bailaban alegremente sobre el dorso de los dedos.

"Realmente no tienes que hacer eso", dijo Amoux en voz baja cuando Harry se volvió y la sorprendió mirándolo mientras trabajaba en su propia pila. La había visto con la carga que se compartía entre los submarinos hace unas semanas y exigió que se le diera la misma carga que todos los demás cuando ella lo dejó ayudar. Habían pasado casi dos semanas y todavía se resistían al verlo haciendo 'tareas'. ¿Se suponía que el número alfa debía sentarse en su trasero y hacer una encuesta? Incluso Fenrir - Greyback rara vez estaba desocupado, a menudo cazando o lidiando con la diplomacia entre la manada y cualquier persona (o cualquier cosa) que se acercara demasiado a su territorio. Los hombres lobo eran demasiado territoriales que Harry se había dado cuenta.

"Está bien, casi termino", declaró Harry, dándole una cálida sonrisa mientras escurría la prenda en sus manos, examinándola cuidadosamente antes de considerarla limpia y colocándola sobre una de las gruesas losas de pura, limpia pizarra que rodea la piscina de lavado lista para secar. Fue un trabajo honesto que no requirió pensar. Quería hacer algo. Cualquier cosa. Cualquier trabajo era un trabajo honesto. No era un gato gordo para ser alimentado y dejado holgazanear todo el día. El pensamiento hizo que su piel se erizara de irritación.

"¿Te ayudo con el tuyo?" preguntó. Estaba acostumbrado a las tareas del hogar gracias a su tiempo en los Dursley, pero a diferencia de entonces, estas eran tareas que estaba feliz de hacer para aquellos mucho más agradecidos que los ocupantes de Privet Drive. Incluso podría atreverse a decir que les agradaba.

"No, por supuesto que no", dijo Amoux, casi horrorizado, "honestamente, haces demasiado. No se espera de usted que participe en tareas domésticas ".

Harry frunció el ceño. "Con el debido respeto, creo que sentarme boca arriba todo el día sería más servil y mucho menos útil que jugar con todos los demás". Miró a los ocho submarinos (incluido Amoux) que estaban reunidos junto a la piscina. Algunos tenían a sus hijos jugando cerca de ellos. Vilkas (el hijo de Amoux) estaba jugando con dos muñecos de hierba entre él y Amoux, haciendo que la pareja bailara alegremente y dándoles voces infantiles mientras él jugaba. Fantasma estaba tendido en el césped junto a Harry, observando el proceso con pereza. Se había tomado muy en serio su trabajo de proteger a Harry desde el incidente con los grifos. Afortunadamente, su cola se había curado sin ni siquiera un rasguño.