Justo donde me dejaste

Baile

James y yo llegamos al baile cogidos de la mano. Normalmente mis manos están bastante frías, sin embargo la calidez de la mano de James me mantiene cálida, lo que se agradece. Me alegra sentir su calor tanto emocional como físico, sabe que su apoyo es justo lo que necesito ahora.

La sala está llena de acarameladas parejas bailando al son de una lenta canción de amor que despierta recuerdos no muy deseados. Recuerdo escuchar esta canción de forma aleatoria hasta que un día Marco me la dedicó, recuerdo el cosquilleo que sentí en ese momento en mi cuello, mi sonrisa tonta, la alegría que me invadió, el inmediatamente sentir que esa noche era mágica... Alejo esos recuerdos de mi cabeza.

─Vaya mierda de canción.─ Dice James notando todo lo que está pasando en mi cabeza. Sé que no es su canción favorita, pero sé que tampoco la odia, solo quiere ayudarme en este momento.─ ¿Qué tal un poco de Babylon? Esta sala necesita más acción.

─Definitivamente.─ Dije sonriendo para no preocuparle.

Cruzamos la sala camino al Dj. Adoro la ambientación, los corazones y las luces rojas, un poco cliché pero siempre funciona y por algo es. Ver el comienzo del amor de estas parejas es bonito y doloroso. Me alegro mucho, ver el amor crecer es bonito, pero no puedo dejar de pensar en Marco, nuestro amor en un momento también fue así, joven y despreocupado.

─Por favor, por favor, por favor, telepatía de Kali Uchis.─ Escucho una voz conocida, y para mi alivio, no era Marco, era Carlos.─ Te lo digo, this is gonna be legen... Wait for it... DARY!

─Carlos, llevas 1 semana con esa canción en repetición, por favor no.─ Dice Dorothea un poco molesta y cansada, pero también divertida.─ Y porque llevemos trajes no significa que tengas que estar hablando como Barney.

─Yo creo que estaría bien poner telepatía.─ Digo metiéndome en la conversación deseando no parecer entrometida.

Tras mi interrupción Dorothea me miró e inmediatamente sonrió y se sonrojó. Conozco muy bien esa cara. Es la cara de James cada vez que ve a Carlos. Era mi cara cada vez que veía a Marco. No me había dado cuenta de que Dorothea tenía una permanente cara de enamorada, debe de ser difícil que todo el mundo piense que estás enamorada de ellos.

─Supongo que al final no es tan mala canción.─Dijo Doro sonrojada y con una risa avergonzada. Carlos le lanzó una mirada cómplice y burlona.

─Sí, y después de esa Babylon de Gaga, por favor.─ Intervino James avergonzado, con la cara totalmente roja y la mirada baja.

─Oh, y estaría bien cowboy like me después de esa.─ Dijo Carlos emocionado.

─Ya que estamos pon cardigan después de cowboy like me, ¿sí?─ Pidió Dorothea.

─¡Sería genial!─ Le apoyé.─ Lo sentimos por pedir tanto.

El DJ nos dijo que estaba bien y que de todas formas nadie más estaba pidiendo canciones, así que todos satisfechos volvimos a bailar, charlar, comer y beber. Y además descubrí algo que Carlos y yo tenemos en común, How I met your mother. Estoy totalmente lista para ayudar a mi amigo.

Telepatía empieza a sonar cuando James y yo estamos listos para darlo todo. Llevo con esta canción sonando en mi cabeza sin descanso una semana entera, al igual que Carlos por lo que me enteré.

─Oye, ¿sabías que a Carlos le gusta How I met your mother?─ Le mencioné a James mientras bailábamos.

─Sí, algo escuché. ¿Vas a restregarme lo amigos que os habéis hecho mientras yo no le podía ni mirar?─ Me respondió James con una mirada y sonrisa burlona.

─En absoluto.─ Respondí con una sonrisa inocente.─ Lo digo para ayudarte, creo que ya es hora de que te termines la serie.

─Algo me dice que esto no es solo acerca de Carlos.