Estuve dando vueltas por la ciudad alrededor de media hora.
No podía creer que Fernanda haya cambiado tanto, pero ¿como no? Si han pasado ya dos años. ¿Como soy tan estúpido? Y lo peor es que me he quedado a almorzar, conversar y tomar once pensando que todo iba a ser tal cual como era hace unos años atrás
Doble el volante hacia la derecha sin saber hacia donde iba.
Suena mi teléfono, lo agarró y me estaba llamando Taylor
- Hola - dije con no muchas ganas de hablar con ella - ¿como está mi bebé?
Taylor me había llamado después de tres meses de volver a casa para decir que el niño que tenía adentro no era mío, ósea que antes se había metido con otro chico y había quedado embarazada.
Por un momento me puse feliz, pero después me puse triste, ya que igual me había ilusionado con tener un hijo, es por eso que igual le digo "mi hijo", por cariño.
- Hola- hace una pausa - esta perfecto - se escucha una pequeña risita
- ¿Estás bien?
Esta chica es realmente rara, no entiendo por que me tuve que acostar con ella.
- Sólo te quería contar que ¡me casare Francisco! - Grita emocionada
¡Oh! Eso es genial
- Me alegro Taylor - sonrio
- ¡Gracias! -
- ¿Es buen padre? - Eso era lo que más me preocupaba, no quería que le pasará nada.
- Si Francisco, no te preocupes -
- Bueno Taylor, te dejo - doblo hacia la izquierda - y cuida a mi bebé
Corte la llamada y pare el auto en un costado.
No sabía hacía donde ir, ya era de noche.
Suena nuevamente mi teléfono y está vez era Alicia
- Amor- sonreí
Extrañamente me hacía falta su voz, ella era la única que podía alegrarme los días que estaba devastado como hoy. En los que extrañaba mucho a Fernanda.
- Mi vida ¿donde estás? - Se le escuchaba feliz
- Voy camino a la casa, prepárate que hoy saldremos a cenar - comenze a andar lentamente - nos vemos en diez minutos.
-
-
-
-Alicia te ves - la mire de pies a cabeza - hermosa
- Gracias - gira sobre sus pies
Llevaba un vestido azul, le llegaba más o menos cinco dedos arriba de sus rodillas, tenía un escote corazón y unos zapatos blancos al igual que sus accesorios.
- ¿Vamos? - Dice acercándose sexymente
- Vamos - sonreí
Caminamos hacia el auto y nos subimos, yo me fui manejando y ella de copiloto.
- ¿Como te fue hoy con tu traje? - toma mi mano la cual yo la tenía en su muslo
¡Oh no!
- Bien, ya está listo - la miro y sonrio- ¿y a ti?
- Creo que he bajado de peso, lo tienen que ajustar un poco - Dice un poco triste
- Ya te quiero ver con ese vestido - me muerdo el labio
