Los días pasaron rapidamente y ya quedaba solo una semana y media para el gran dia - que emoción- pienso sarcasticamente.
Luego de esa gran discusion no hablamos mas del tema, Fernanda seguia de muy mal humor. Supongo que era porque Laura nos tenia en la mirada y nos mandaba a hacer cosas a cada rato sin piedad y muy fria.
Por un momento yo pense que a Laura no le afectaria tanto, que no se enojaria, que iba a comprendernos... pero me equivoque. Nos esta haciendo la vida imposible desde que nos vio muy cerca en la habitacion.
Suena mi telefono y era Alicia
-¿alo?- dije con una voz seca acomodandome en la silla de mi balcón
-¿amor? - dice extrañada-¿no estas feliz de mi llamada?
No le estaba tomando mucha atención, miraba la luna como si ella me fuera a dar alguna respuesta de porque era tan estupido
-si,si- digo ahora mirando las estrellas
-¿francisco?- alza la voz
-¿q..q..que..que pasa?- salgo del pequeño trance acomodandome y mirando el piso
-¿estas bien amor?- ya estaba molesta
-si, estoy bien amor- la trato de tranquilizar pero no resulta
-¿que estas haciendo? ¿me estas tomando atencion?- habla rapidamente- veo que no estas feliz por haberte llamado
-¿que dices mi ojitos? Tú sabes que me pongo feliz cada ves que escucho tu voz-
-lo siento -dice triste - te extraño
-Igual yo, quiero que sea el dia para verte -sonrio
Después de todo, alegraba mis días con tan sólo escuchar su voz.
Estuvimos hablando alrededor de dos horas, y luego nos despedimos ya que era tarde y nos teníamos que ir a dormir.
Pero ¿como iba a dormir mientras mi querida hermana tenía su música demasiado fuerte?
Me puse de pie y camine hacia su habitación
-¡Hey!- dije golpeando la puerta
Sin respuesta
-¡Fernanda! Por favor - intente abrir su puerta, pero estaba con seguro.
¡Ay! Esta niña por Dios, ya me volvió loco.
Camino de vuelta a mi habitación, cierro la puerta con seguro, me tiró en la cama, me pongo una almohada en la cabeza e intento dormir.
¡No! Nada, sigo aquí despierto escuchando como canta, debería ir a un concurso de canto... No, para que mentir, canta pésimo.
Me levanto y me pasó a su balcón, ya estaba bastante acostumbrado así que en tres segundos estaba en su habitación.
La vi.
La vi sentada en el piso, al lado de su cama, la luz estaba apagada y ella tomaba un largo trago de vodka.
Me acerqué para bajarle el volumen a la radio, pero ella inmediatamente reaccionó
-Vete - Dice secamente
-No
- Te odio- toma otro largo trago
Me acerqué a ella y me senté al frente mirándola a la cara, su rimel estaba corrido, había llorado y había comenzado a tomar hace bastante rato.
-anda, sigue hablando con tus ojitos- dice burlandose
¿esta celosa? No, no lo creo.
- ey! ¿Estabas escuchando conversaciones ajenas?
