Park Jimin y Kim TaeHyung son hermanastros que se llevan tan solo dos meses de diferencia; sus padres se casaron cuando ellos apenas tenían cinco años y desde entonces son inseparables.
La sociedad los discriminaba como los "niños de prueba" como si...
ADVERTENCIA ⛔🔞 capítulo con escenas para mayores de 18 y posibles fetiches no aptos para cualquiera. Si estas escenas no son de tu agrado te invito a saltarte el capítulo. Capítulo largo (1600 palabras aprox.)
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-Di algo. -Pidió TaeHyung. Se estaba volviendo loco, ver a Gguk como veía el vídeo porno de esos dos chicos haciéndolo de forma ruda lo estaba matando. Las manos de Nochu estaban cerradas en puños haciendo que las venas de sus brazos se marcaran y sus nudillos de volvieran blancos. -Gguki. -Le llamó, asustándose al instante en que recibió la mirada ardiente y de pupilas dilatadas del mayor.
-¿Quieres eso? -Preguntó sin más, TaeHyung no supo que debía responder así que mordió su labio inferior manteniendo la mirada. -Bebé, daddy puede hacértelo mucho mejor. -Canturreó con sorna, TaeHyung bajo su cabeza en un completo estado de sumisión complacida y deseada por ambos. -Ponte de pie TaeHyung. -El nombrado obedeció colocándose frente al mayor al otro lado de la mesa de café, Nochu apagó el portátil simplemente cerrándolo y volviendo a acomodarse en el sofá recostándose en el respaldo de este con sus piernas abiertas y con sus brazos sobre el respaldo del mismo. -Desnúdate bebé. -Ordenó.
Kim comenzó a retirar su suéter completamente anticipando con ansia lo que vendría. Desde que habían tenido esa sesión loca en el estudio de baile del mayor en la universidad no habían vuelto a tener ese tipo de contacto y lo ansiaba tanto. Gguk había vuelto a sacar esa cena dominante que tanto amaba.
-Bebé. -Le llamó, TaeHyung detuvo sus manos temblorosas en el botón de sus vaqueros. -Quiero que me mires y me respondas cuando te ordene algo. -Demandó Jeongguk elevando una de sus cejas de forma sugerente.
-Sí daddy. -Volvió a obedecer siguiendo entonces con deshacerse de sus pantalones. Una vez Kim estuvo desnudo y en pie ante él no sabía que más hacer así que sonrió nervioso a su novio. -Daddy, ¿qué hago ahora?
Jeongguk tragó saliva sonoro pero sin romper ese aura tranquila y autoritaria que portaba. Extendió su mano derecha hacia Kim que se acercó a él hasta sujetar esa mano con la suya izquierda. Jeon llevó sus tres dedos centrales a su boca para lamerlos, impregnarlos en gran cantidad de saliva, todo aquello sin dejar de ver a los ojos oscuros del menor quién sentió que caería al temblar sus piernas.
-Ahora túmbate en el suelo y prepárate. -Dijo al sacar los dedos contrarios de su boca. -Daddy quiere ver. -Explicó dejando en claro que TaeHyung debía ponerse en cuatro delante de él y comenzar a trabajar en su dilatación anal.
El menor sonrojado cumplió con lo pedido, era tan excitante saber que tras su espalda estaba Gguk viendo cómo se metía dos dedos de golpe en su interior y salivados por él.
Jeongguk no dejaba de morder sus labios conteniéndose lo mejor que podía para no saltar esa mesa y penetrar de golpe a su novio. Su erección dolía y apretaba en sus pantalones. Comenzó a masajear sobre el pantalón el bulto en su centro viendo cómo TaeHyung arqueaba su espalda al introducir un tercer dedo.
-¿Has estado jugando solito últimamente bebé? -Preguntó siendo consciente de que ese apretado agujero estaba ligeramente abierto para no haber estado entrando nada en él días antes.
-Sí Daddy. -Susurró temblando cuando él mismo rozó su próstata con las yemas de sus dedos.
-No quiero que lo hagas más si no me pides permiso. -Demandó bajando sus pantalones y ropa interior hasta deshacerse de ellos y así poder comenzar a masturbarse. -Si lo haces tendré que castigarte. -Susurró soltando un grave gemido. TaeHyung no detuvo sus movimientos sino que los aumentó.
-Pues castigame Daddy, porque me he portado mal al tocarme pensando en ti. -La cordura que trataba de mantener se fue a la mierda al escuchar aquello finalizado con un gemido roto del menor.
La mesa de centro de café fue apartada de golpe, haciendo que rebotara en el suelo. El cuerpo sudado y sensible del menor fue cubierto por uno caliente y duro por su espalda. La gran polla de Jeongguk presionó entre las nalgas de TaeHyung quién gimió ansioso sacando sus dedos para sostenerse con sus dos manos al suelo.
-Muy mal bebé, no he dicho que pares. -Una fuerte nalgada fue dada en ese culo delicioso canela que quedó parcialmente rojo, una mordida fuerte fue dejada en esa zona roja con ganas por Jeon. -Date la vuelta y chupa. -TaeHyung obedeció siendo ayudado por el mayor.
Su boca se abrió lo máximo posible y ahuecó sus mejillas para apretar con sus labios el gran falo rosado y de venas marcadas. Su lengua pasando por cada pliegue y salivando todo a su lado. Jeongguk apretó su mandíbula cuadrada con su mano derecha produciéndole un dolor mágico y satisfactorio durante unos minutos hasta que sus ojos volvieron a conectar y no pudo más.
Las manos pálidas de Jeon yendo ahora a sus hombros para levantarlo hasta empujarlo contra el suelo de espaldas y colocarse entre sus piernas. La embestida fue dura, profunda y ruda sacándole un grito entre placer y dolor al menor que estiró sus brazos a ambos lados de su cuerpo buscando a donde anclarse.
Jeon gruñó y retiró su camiseta de manga corta para hacerla una bola deforme y llevarla a la boca del menor.
-Muerde, no quiero que nadie te escuche. -TaeHyung obedeció agarrándose a la misma tela con sus manos con fuerza cuando el mayor comenzó a moverse en su interior sin piedad ni pausa.
Las piernas de TaeHyung se estiraban y encogían a la par que su pene rebotaba contra su vientre bajo por el movimiento que tenía su cuerpo siendo ligeramente deslizado por su suelo. Gguk apretaba sus caderas dejando marcas de sus dedos que al día siguiente serían moradas y sonreía feliz de tener tan sometido y a la vez complacido a su bebé.
Las lágrimas no tardaron en salir de los ojos de Kim cuando Jeongguk encontró su próstata y comenzó a golpear solo en ese ángulo, las manos de Jeon bajaron a acunar ese blando y marcado trasero para elevarlo y llegar más profundo en su interior.
TaeHyung se retorció y tembló poniendo su cuerpo tenso en el momento que tuvo su orgasmo y se vino sobre su propio cuerpo con fuerza y haciendo que su semen llegara levemente al pecho y rostro de su novio. Jeongguk gruñó alto cuando llegó su turno de correrse fuerte, espeso y en cantidad en el interior de TaeHyung.
Tae sentía todo tu cuerpo adolorido, su espalda y trasero era insoportable y su mandíbula dolía de lo mucho que había mordido la camiseta de su novio. Gguk retiro dicha prensa de su boca y sintió lo mojada que estaba por su saliva sonriendo por ello. Ante la mirada del menor llevó su mano derecha a la unión de sus cuerpos que aún no había desecho, sacando su pene y haciendo que todo su semen cayera en su mano.
Aquella mano, que ahora llena de semen, llevó a la boca de su novio haciendo un pedido silencioso que el menor aceptó y comprendió.
Mientras TaeHyung lamía la mano de JungKook con su semen, el mayor retiraba el semen del menor que había llegado a su pecho y rostro con su otra mano y lo degustaba con su lengua; lamiéndolo como si fuera una dulce paleta.
-Te amo Daddy. -Susurró rendido TaeHyung, sonriendo sus ojos cerrarse por el cansancio.
-Te amo mi bebé. -Respondió en el mismo tono Jeongguk, a la par que rodeaba el cuerpo agotado del contrario y lo cargaba entre sus brazos para elevarlo del suelo y llevarlo en volandas hacia el cuarto del menor.
Una vez ambos en la cama, cubiertos por las sabanas que el mayor había abierto para los dos, TaeHyung cerró sus ojos y se pegó a su cuerpo buscando cariños y mimos que no tardaron en ser dados con amor.
-Mi Tete hoy se ha portado muy bien. -Canturreó besando su cabello azabache y dando caricias a su trasero rojizo.
-Mi conejito. -Fue su último susurro antes de quedar dormido.
