Cap: 3 ~ Temp 3: Con otros ojos.

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Anteriormente ~

(Tú): Mucho gusto.

Natsuki: Natsuki, Primer Año e integrante del club de literatura del actual año.

Monika: Dime, ¿Encontraste a la chica? – Inclina la cabeza mientras te sigue. – Tú sabes, pequeña, ojos únicos, cabello corto.

Natsuki: ¿Por qué no me puedo ir? ¿Qué me detiene? ¿Qué es lo que me falta antes de hacerlo?

(Tú): Te prometo que encontraremos una salida.

Natsuki: Estoy oculta, no quiero que me golpee más.

(Tú): Siempre te he visto como... Una amiga...

Natsuki: E-eres... Eres.... ¡¡ERES UN MALDITO IDIOTAAAA!! – Exclama saltando de la cama hacia el suelo y corriendo hacia afuera.

Natsuki: Vas a regresar con ella, ¿cierto...? ¿Me dejarás... Sola...?

(Tú): ¡Natsuki! ¿Estás ahí? – Exclamas gateando por las escaleras hacia arriba pero, nadie vino.

Pero nadie estaba.

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Todas las historias son importantes y todos son los protagonistas de sus propias vidas pero, mientras que la historia del crew de rescate de Natsuki se pone en marcha, hay otra historia igual de importante de lado contrario, esperando a ser contada en este capítulo.

La joven que hizo que todo esto se encuentra encerrada en un cuarto pequeño en donde todo está vacío, sentada y abrazando sus piernas en esa intensa oscuridad, probablemente sintiendo y soportando el dolor de los moretones que posee en todo su cuerpo y que son tapados levemente por su vieja ropa que está rota por partes. Sin mencionar el miedo aterrador que posee cada vez que siente pasos cerca de donde está y cuando alguien entra al cuarto.

¿?: ¡Oye! ¡La cena está servida! – Dice una voz grave que entra al cuarto con una bandeja.

La comida no se ve para nada caliente y parecen sobras de lo que alguien comió, no hay mucha cantidad pero, ella acepta comer eso antes que morir de hambre aún con el miedo que poseía así que se apresura al ver que colocan la comida en el suelo para empezar a comerla con las manos.

¿?: Que asco que das. No te pareces en nada a él. – Se gira para irse del cuarto cerrando la puerta con llave en el proceso.

Generalmente hay dos guardias que le dan la comida a la chica, uno que es el que siempre entra y el otro solo está de apoyo en caso de que quiera escapar una vez más, aunque a veces se turnan o hacen cambio de guardia en otros lugares.

¿?: Mocosa, gracias a ella nos bajaron los ingresos de dinero, ¿No te enoja eso? – El hombre con voz grave definitivamente le molesta que la chica se encuentre ahí.

¿?: ¿Dices que si pudiéramos regresar el tiempo no la atraparíamos? – Dice su acompañante que extrañamente suena con una voz más suave y segura.

¿?: Creí que cuando la entregaramos íbamos a ser la mano derecha del señor o algo así, ¡Terminamos con el mismo puesto cerca de la niña que arruinó nuestro salario! – Golpea la puerta de madera con fuerza para liberar su coraje.

¿?: Romperás la puerta si sigues haciendo eso, Goro. – Dice manteniendo su mano en la funda de su arma.

Goro: ¿¡Prefieres que la golpee a ella, Yuudai!? Vamos, dame las llave y te lo muestro.

El Bucle | [DDLC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora