𝐇𝐚𝐩𝐩𝐢𝐧𝐞𝐬𝐬 | ❝ 𝗜 𝘄𝗮𝘀 𝘀𝗰𝗮𝗿𝗲𝗱 𝘁𝗼 𝗮𝗱𝗺𝗶𝘁 𝘁𝗵𝗶𝘀, 𝗯𝘂𝘁 𝗻𝗲𝘅𝘁 𝘁𝗼 𝘆𝗼𝘂 𝘄𝗵𝗮𝘁 𝗰𝗼𝘂𝗹𝗱 𝗴𝗼 𝘄𝗿𝗼𝗻𝗴?❞
𝖤𝖭 𝖣𝖮𝖭𝖣𝖤 | Luego de ser separada de su madre el mismo día de su nacimiento, Hope Natalia, cae en manos...
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ACTO UNO| CAPÍTULO 12 ❝Sokovia❞
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DE REPENTE LA la tierra comenzó a moverse, las piedras saltaban de arriba a abajo y los edificios parecían estar a punto de desplomarse en sus lugares, como si en el momento justo un terremoto amenazara con terminar con toda la vida sokoviana.. Cuando menos se lo esperaban, del centro de la tierra, del agua y del aire comenzaron a salir ultrones que los atacaban sin pensarlo.
Hope Natalia observó la imagen horrorizada, cientos de androides volaban por toda la ciudad, haciendo estallar todo a su paso. -Por Helga Hufflepuff, ¿ustedes ven a los hijos de Ultrón cierto?
Oyó a la lejanía el potente rugido de Freya en su forma animal, por lo que lo tomó como un si. Algo pasó a su lado a toda velocidad, dándole un pequeño casi infarto, pues el ultrón de color gris volteó rápidamente hacia ella para atacarla, sin embargo la pelirroja reaccionó juntando sus manos en una energía violácea y enviándosela, derribándolo al instante.
-¿Alguien más cree que no estamos dando abasto? -Inquirió Pietro Maximoff, corriendo a toda velocidad entre las personas, golpeando a los androides reduciéndolos a pedazos de metal que caían al suelo en silencio.
-Yup -se limitó a contestar Hope, observando aterrada como las personas corrían sin dirección desesperadamente buscando un lugar en donde ocultarse de los constantes destrozos.
Los edificios comenzaban a derrumbarse, los enormes pedazos de escombros caían bruscamente sobre la acera. Más de una vez Hope formó grandes campos de energía, mucho más intensos de los que alguna vez había necesitado formar, para proteger a los civiles que se hayan en el lugar y momento incorrecto, para luego escoltarlos hacia un lugar seguro, aunque verdaderamente ningún lugar lo era.
No había notado en que momento Wanda había desaparecido de su lado, nuevamente, pero su mente no podía pensar en algo más que no fuera proteger a los desamparados. Corrió hacia el medio de la calle y desde allí fue enviando esferas de energía a cualquier máquina voladora que se cruzara por su camino, siendo precavida de no darle a Iron Man.
