Suerte que te perdí

Capitulo 10

(Buen domingo para todos, acá les dejo el capitulo 10, espero les guste)

- Mamá me voy a casa de Kyomi a hacer un par de trabajos- y así se despidió de su madre antes de salir disparado.

Llego a la esquina y se encontró con Shima, se saludaron con algo de pesades y comenzaron el rumbo juntos, hasta llegar a la casa de jovencita rubia que los estaba esperando con Takanori.

- Tengamos en cuenta el motivo de cada intervención norteamericana en América Latina- les explicaba Kyomi.

- Shima, ¿me acompañas a comprar cigarros? Me quedé sin - con un gesto algo preocupado se dirigió Takanori al chico alto, este ascintio con la cabeza y se fueron dejando a los dos jovencitos solos.

Yutaka se puso a observar los marcos con fotos que había en la habitación, y puedo observar uno en dónde se encontraba la chica rubia con ellos cinco.
-Kyomi ¿todavía tienes esa fotos?- la toma con algo de nostalgia - éramos todos unos niños -¿13 o 14 cuánto teníamos?-

-Ese día Akira cumplió 14 años, a la foto la saco mí madre- comenzó a reírse -te acuerdas que quisimos meterle la cabeza en la torta y terminamos tirando la torta sobre la mesa-

- Si, lo recuerdo... Esos eran buenos tiempos, prácticamente vivíamos tirados en el parque escuchando Led Zeppelin- la miro con algo de ternura -todavia tengo la remera de Led Zeppelin que me regalaste aquella vez-

-yo tengo la mía de Pink Floid- volvió a mirarlo.

Flash back...

-feliz primer mes mí amor- la chica le entrega un paquete, mientras le deja un beso en los labios.

El se sienta en la cama y saca de abajo de la almohada otro paquete y se lo entrega.

-Feliz primer mes Kyomi- mientras vuelve a besarla con amor.

Fin del flash back....

Se encontrában los dos en esa habitación, recordando los viejos tiempos.

Yutaka apoya su mano dejando una caricia cálida en la palida mejilla de Kyomi -yo verdaderamente te ame kyomi-  mientras la observa con una mirada penetrante logrando que ella se pierda en sus ojos.
La situación comienza a tornarse un poco intensa , ella solo se pone de pie ligeramente y a pasos lentos dispone a irse antes de que ocurra lo que no tiene que ocurrir.

Siente como aquellas manos temblorosas las sujetan de los brazos impidiendo que se marche.

La toma por la espalda pegandola a la pared, con una de sus manos levanta la barbilla de ella haciendo reposar su cabeza en el hombro de el y comienza a dejar suaves besos en el cuello, mientras es embriagado por el suave perfume de esta. Kyomi comienza a responder a los estímulos del chico, acariciando sus manos.
Al parecer el deseo decidió aparecer, porque aunque se lo negaran el uno al otro, era obvio que en el fondo se deseaban como la primera vez.

Suavemente fue bajando sus manos hasta llegar a las marcadas caderas de ella, y la pegó más a el haciendo sentir su duro bulto, era necesario que sintiera todo lo que ella le producía.

Siguió bajando una de sus manos hasta llegar a la falda, y con la otra mano tomo una de las manos de ella y la dirigió hasta su miembro. Kyomi comenzó a jugar con este haciendo movimientos suaves, de arriba hacia abajo generandole bastante placer al chico.

Yutaka levanto la falda de ella y comenzó a bajar las finas bragas lentamente, una vez que lo logro comenzó a estimular con suavidad el clítoris con unos de sus dedos. La chica arqueaba su columna por el placer pegando su trasero más a el, el siguio jugando con su intimidad hasta notar como rápidamente comenzaba a ponerse húmeda, metió dos de sus dedos mientras era deleitado por los pequeños gemiditos  que se escapaban de la boca de la rubia.

Bajo lentamente sus pantalones sin dejar de la masajear la vulva de ella, con su pie abrió las piernas de Kyomi y comenzó a penetrarla.

- ¿Te gusta?- le susurró al oído mientras la envestia de manera fuerte.

Ella solo gemia para el, toma una las manos de Yutaka indicándole que siga estimulando su intimidad, entre jadeos se pega más a el logrando que las embestidas sean más fuertes.

Sus movimientos coordinados generaban un arte creado por sus cuerpo, sus respiraciones agitadas creaban un coro verdaderamente encantador.

Frena de golpe al entrar en razón, sale de ella y acomoda sus pantalones, mientras lograba acomodar su respiración.

- Lo siento Kyomi... Me deje llevar... Esto no debió pasar- la culpa lo consumió totalmente, había engañado a Nanami.

Ella solo se acerca a él y acaricia su mejilla y le deja un beso suave en los labios.

- Tranquilo Yutaka, no volverá a pasar... Tu secreto queda a salvo conmigo - la tristeza se apoderó de su rostro, y antes de irse le vuelve a dejar otro beso en los labios.