I: Cómo todo empezo

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Desde que recuerdo, y tengo uso de razón, jamás conocí a mis padres. He sido huérfano toda mi vida, y jamás tuve la calidez y comodidad de una familia.

Mi infancia no es una que se pueda catalogar normal. Sufrí de Bullying y también de rechazado social, pese a todo eso, jamás quise cobrar venganza, porqué eso solo generaría más venganza, formando con ello un ciclo de violencia que jamás terminaría. Un ciclo que se repetiría una, y otra, y otra, y otra vez, creando más y más dolor. Creo que ya tengo suficientes problemas como para lidiar con más.

Soy de origen Ameromexicano, crecí y nací en la República de la América Mexicana, una nación poderosa y de renombre a nivel mundial, catalogada como la tercera economía más importante del mundo y la segunda de América continental. ¹

En los últimos años, la gente evita relacionarse con un chico marginado. Desde que soy pequeño, llegaron a llamarme demonio por mis ojos opacos y carentes de brillo. Jamás nadie se acercó a querer conocerme o hablarme. Jamás nadie me miró como una persona normal, como un humano de carne y hueso.

Excepto ella.

Hace no mucho termine mi segundo semestre de preparatoria. Pero debido a mis conocimientos prematuros, pude ganar un lugar en un curso de intercambio con una escuela de origen japonés. No recuerdo el nombre, pero se ubica en Nagoya.

No soy el más grande fan de los asiáticos, pero creo que su historia y cultura es bastante interesante, además, su nivel educativo y académico tiene un mejor calidad. Está puede ser una buena oportunidad para encontrarme con gente que pueda representar un buen desafío.

Y ahora estoy aquí, en el gran aeropuerto internacional de Tokio en Japón. Moriría por poder apreciar los paisajes de la gran belleza urbana, aunque eso será imposible.

Escuché que los edificios aquí son rectangulares como en la mayoría de países. Sería genial verlos. Estoy cansado de oír sobre las grandes pirámides de hierro y cristal.

Decidí tomar el tren, el cual me llevará a Nagoya, cuando sea la hora creo que bajaré. Afortunadamente nombran las estaciones a las que llegan. Estos tipos si que saben cómo ayudar a los ciegos como yo.

No tengo mucho dinero que díganos, pero ganó los fondos suficientes para haber comprado un cómodo departamento, bueno, al menos es lo que dicen. Un Yen japonés es una miseria alado de un Kuautil mexicano. ²

🇲🇽—Veamos... —Di un paso leve, pude sentir una lisura total en la tierra bajo mis pies, supuse casi al instante que era concreto. Por lo que comenze a caminar.

Los pasos a mi alrededor eran tranquilos y constantes, lo que indicaba que me encontraba en la zona peatonal. Continué con mi andar hasta que un sonido agudo y pitante me detuvo, supuse que se trataba de un oficial de policía, ví mi oportunidad y la aproveche.

🇯🇵—Disculpe, Oficial. —El hombre se acercó cuando escuche sus pasos. —¿Podría indicarme la localización de este edificio residencial? —Extendí el papel al hombre. Tardo unos segundos hasta antes de indicarme la ubicación, hice una reverencia antes de querer jugarle una broma. 🇲🇽—De acuerdo, gracias por tu puto servició

Pude sentir su mirada llena de desconcierto en cuanto di media vuelta, intente no cagarme de la risa, al menos el tiempo suficiente como para alejarme de él.

Pasaron unos cuántos minutos hasta que finalmente llegué a mi paradero. Podía escuchar el viento chocar contra el concreto de la enorme estructura, si era el edificio después de todo, vaya, en América latina le das una ubicación a alguien y quién sabe a dónde los mandas a parar.

Camine hasta sentir que mi mano choco con un cristal, supuse que era la puerta, comencé a pasar mis manos alrededor del mismo, tratando de buscar un deslizador, pero mi atención se lo ganó una aguda voz que me llamo justo detras de mi.

Invisible ® {Go-Tōbun no Hanayome} [Quintillizas x Male OC] 〖ULCRRR〗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora