~☆Capítulo once☆~

292 18 88
                                    


¿Y ahora qué haremos? -miraste a Joseph preocupada-

Iremos en carroza -respondió Joseph-

A ninguno del equipo le agradó la idea, sin embargo no había muchas cosas más por hacer.

┊ ┊ ┊ ┊

┊ ┊ ┊ ✯

┊ ┊ ★

┊ ✯

¡¿En carroza?! -Polnareff estaba haciendo otro escándalo- ¡Me haré viejo antes de llegar!

Supongo que es mejor que ir caminando... -tu voz era vaga, estabas reflexionando-

Lamentablemente tendremos que hacer ambas cosas -Joseph se sentía algo apenado por las noticias- En este lugar baldío no encontraremos nada, debemos ir hasta la próxima ciudad.

Te querías matar, no pudiste dormir, acabas de desbloquear un nuevo trauma y ahora tendrían que caminar por horas indefinidas.

Señor, Joestar -habló Kakyoin- Creo que la ciudad más cercana estará a una hora caminando, aproximadamente.

Ay, menos mal que me dices eso, Kakyoin -suspiraste con una sonrisa en la cara, tus oídos se endulzaron-

¿Es en serio? -Polnareff seguía quejumbroso-

Puffle, se más agradecido -frunciste el ceño- Podría ser peor, podría llegar a ser cuatro horas caminando o algo así.

Lo regañaste, Joseph tenía una pequeña mueca por tu comportamiento con él.

El viaje volvió a continuar. Iban lentos pero seguros, al frente estabas tú, Kakyoin y Jotaro, estaban conversando sobre la vida misma y demás. Lamentablemente a Polnareff le tocó cargar a Enyaba hasta poder conseguir un vehículo.

¿Hace cuánto tienen su Stand? -diste unos pasos para poder estar a delante y mirarlos-

Pues, Jotaro y yo obtuvimos el Stand con el despertar de Dio -Joseph rascó su barbilla- Por eso Holly también despertó uno.

¡Oh! Idiota -tapaste tu cara con tus manos- Había olvidado ese detalle, perdón.

Estabas un poco avergonzada, pero Joseph no lo tomó con malas intenciones, ni importancia le dio.

¡Yo desde que nací! -Polnareff parecía orgulloso-

¡¿De verdad?! -te habías emocionado un poco-

Yo igual -se unió Kakyoin- Desde que era pequeño llevo a Hierophant Green a mi lado.

Tus ojos parecieron iluminarse.

¡Pensaba que era la única! -dijiste suspirando-

¿También tienes a tu Stand desde que naciste? -Kakyoin se acercó a ti-

Bueno, no tan así -miraste el cielo- Habrá sido un año después de llegar a Japón... -empezaste a hacer algunos cálculos con tus dedos- A los seis años manifesté por primera vez a mi Stand.

¿Desde tan pequeña y nunca te acercaste para ser mi amiga? -Kakyoin puso su mano sobre su pecho, simulando estar ofendido- Podríamos haber sido amigos desde tan chicos...

¡¿Y yo qué iba a saberlo?! -tus manos estaban sobre tus caderas y tu tono de voz se elevaba- Me hubieras hablado tú, ¡me da mucha vergüenza hablar con gente mayor!

Kakyoin te miró confuso- Espera, ¿no tenías diecisiete?

Tu corazón se achicharró, no esperabas que Kakyoin se olvidará de tu edad- Me ofendes, Kakyoin Noriaki -tu mano se posó sobre tu frente, simulando de forma muy dramática un desmayo- Voy a un grado menor que el de ustedes dos -miraste tanto a Kakyoin como a Jotaro- Con más motivos tendrías que haber sido tú quien me hablara.

☆𝐷𝑒𝑠𝑑𝑒 𝐸𝑙 𝐷𝑖𝑎 𝑄𝑢𝑒 𝑇𝑒 𝐶𝑜𝑛𝑜𝑐𝑖☆ 𝐽𝑜𝑡𝑎𝑟𝑜 𝑥 𝐿𝑒𝑐𝑡𝑜𝑟𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora