Noche eterna

6. June

Espere, y espere, y espere y espere hasta que llegara June. Era la personas mas bonita del mundo. Tenía la tez muy blanca y un largo cabello castaño Sus ojos eran de un azul tan claro que tan sólo verlos me vuelvo a enamora de ellos. Si llegamos a estar casados no se como podrían salir nuestros hijos. ¿Cabello rubio o castaño?, ¿Ojos azules o verdes?, ¿Altos o bajitos?. La verdad no se, pero espero que salgan igual de bellos que ella. La conocí en la escuela hace un año, los dos éramos chicos nuevos, así que fue fácil hacernos amigos. Después de unos cinco meses siendo best friends le pedí. Fue una suerte que a mi me dijera que si, supongo que se debió a que llevábamos tanto tiempo siendo amigos. El próximo mes cumplimos un año juntos. Tengo pensado hacer algo bonito. Llego justo a tiempo para la comida. Traía una blusa verde que se le veía muy bien y un pantalón de mesclilla. Llevaba unos tenis azules que se veían igual que sus ojos. Se veía tan bella como siempre y me daban ganas de besarla ahí mismo sin importar que mi familia me viera.
-Buenas tardes señora- dijo saludando a mi mamá.
Eso interrumpió mi pensamiento.
-Buenas tardes June- le respondió mi mama
Después llego mi hermana a saludarla
-¡Cuñada!- le grito mi hermana
Mire de reojo a June y vi que tenía la cara roja como un tomate
-Hola Sarah- le respondió
-Me gusta cuando vienes a visitarnos- le dijo mi hermana
-Gracias chiquita, a mi también me gusta venir a visitarlos
Mi hermana le enseño una sonrisa gigante tipo colgate
-June, ¿te puedo hacer una pregunta?- le dijo mi hermana después de un rato
-Claro que si chiquita- le respondió June
-¿Cuando te vas a casar con mi hermano?- le pregunto
Escupí toda el agua que tenía en mi boca
-¡Sarah!- le grito mi mamá- ¡Eso no se hace!
-¿Pero que hice?- le pregunto mi hermana
-No se preocupe señora- le dijo June a mi mamá antes de que regañara a mi hermana- ya sabe como son los niños.
-Perdon cuñada- le dijo mi hermana a punto de echarse a llorar
-No te preocupes... cuñadita- le dijo June- no llores. Sabes, después de comer vamos por un helado, ¿okey?
-Si- le dijo mi hermana
Esa es otra de las cosas que me gusta de ella, el cariño que le tiene a los niños. Si llegamos a casarnos y tener hijos, será la mejor mamá del mundo, obviamente después de mi mamá.