Recuerda regar las plantas (IzukuxIbara)

Nueva amiga

El silencio estaba presente, aunque no era para nada incómodo o por lo menos así lo era para la peliverde la cual degustaba muy contenta su comida mientras que el pecoso estaba bastante nervioso, hoy había hecho más contacto con chicas que en toda su vida. Había terminado su comida y ya se iba a limpiar su boca con su manga pero antes fue detenido por la chica.

—No se ensucie de esa manera el uniforme Midoriya-san—dijo mientras le ofrecía una pañuelo.

—Oh, claro... muchas gracias Shiozaki-san—agradeció el peliverde mientras tomaba el pañuelo—pero hay algo que tengo que hablar con usted.

—¿Tiene que ver con el tema de que lo vi ayer flotando o con lo de Monoma-kun?—preguntó Shiozaki—si es por la primera, tranquilo, no le diré a nadie—dijo calmando al pecoso.

—Pa-pareciera que me hubiese leído la mente—dijo Izuku perplejo.

—No veo de que otro tema quieras hablarme para que tu el chico más tímido quiera hablar conmigo—concluyó la peliverde.

Izuku se quedo callado, ya tenia uno de los cuatro problemas solucionado, ahora solo tenia que hablar del porque estaba levitando en la noche, y que tan cierto era lo de los ocho quirks de los que le acusó el rubio de la clase B. Ahora la pregunta que rondaba por su mente era ¿Cómo rayos le va a explicar eso?.

—No falta mucho para que acabe el descanso, si tiene algo que decirme que sea ya—dijo la peliverde—llevas mirándome desde hace cinco minutos.

—¡Lo siento!—grito el pecoso—es solo que me imagino que quieres respuestas del porque estaba flotando ayer—se disculpó rápidamente.

—Con que era eso, no tienes de que preocuparte, solo procura no descontrolarte o que te hagas mucho daño—dijo mientras se levantaba—, claro que quiero respuestas, pero esas pueden esperara hasta que entrenemos.

—Gracias Shiozaki-san, de verdad tuve mucha suerte de que haya sido usted quien fue la que me miró, si no, ahora mismo estaría en muchos problemas.

—No te preocupes por eso, ¿para eso están los amigos no es así?—dijo dando una sonrisa.

—¿Somos amigos?—preguntó sorprendido el peliverde.

—Eso depende de ti supongo, ¿quieres ser mi amigo Midoriya-san?

—Cla-claro que sí Shiozaki-san—respondió sin bacilar el peliverde.

Ambos se levantaron justo a tiempo para que la campana que indicaba que el descanso había concluido sonó. Los dos simplemente se encaminaron hacia sus respectivos salones, pero al estar cerca ambos compartieron el recorrido mientras charlaban un poco, este detalle no paso por desapercibido de algunos estudiantes que los esperaban desde las aulas. Para la des fortuna del pecoso, el chico del quirk eléctrico y el más pervertido del salón lo miraron.

—Nos vemos luego Shiozaki-san—se despidió el peliverde mientras se alejaba de su amiga.

—Claro Midoriya-san—imito la acción de su ahora amigo.

Cuando entro al salón lo hizo con una sonrisa en su rostro, la mayoría de ellos pasaron eso por alto a excepción de siete personas, las cuales eran Mineta, Kaminari, Todoroki, Bakugo, Tsuyu, Mina y finalmente Uraraka, esta ultima apenas lo observó un gran sonrojo adorno su bello rostro, cosa que no pasó por alto la chica rosada.

—¡Midori! al fin se te fue esa cara de preocupación por lo de ayer—dijo mientras se acercaba al mencionado.

—Mina-chan cálmate un poco, Midoriya-chan esta muy nervioso—intervino la ranita—veo que ya estas más feliz ¿de casualidad tiene que ver con Ochako-chan?