parte 2

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Luego de una cena incómoda junto a su  su padre. Eiji y shorter se veian desafiantes, cada uno fue a su labor. Shunichi mandó a sus hijos a lavar los platos mientras el veía  la televisión al salón,

Y en la cocina, los hermanos seguían tensos, mirándose de reojo mientras Eiiji  restregaba los platos con el ceño fruncido, y shorter los secaba en silencio.
El mayor no pudo aguantar más tiempo, por lo que dejó su tarea y enfrentó a su hermanito, con los ojos de cachorro que le caracterizan.

-no te enfades conmigo,-

El pelinegro miró de reojo a su hermano mientras remojaba unos vasos, buscando paciencia en su diminuto ser,

¿Cómo quieres que no me enfade contigo? No puedo creer que pienses mal de mi, solo quiero ser amigo de tu amigo...

- ¡Eiji! No pienso mal de ti, pienso mal de Ash.

El japones dejó caer el vaso sobre el resto de los trastes, creando un ruido sordo; su padre  pudo escucharle, regañando a ambos. Luego de disculparse a gritos, fijó sus ojos, mirándole aún con su boca abierta, sorprendido.

- Piensas mal de ash? ¿Por qué, te ha hablado de mi?-eijii casi no caia de la emoción con solo imaginar que ash -cosita rica bien hecha- Lynx haya hablado de él. shorter no tardó en matar sus ilusiones.

- Qué? Claro que no te conoció apenas hoy, gatito. Pienso mal de ash porque lo conozco, eso es todo.

Y asi, de un momento a otro, la emoción pasó a ser berrinche, otra vez. Eiji le dio otra simple mirada a shortery siguió lavando platos, tratando de pensar

shorter, sinceramente, ¿Por qué no dejaste que ash cenara con nosotros hoy? Tampoco es la primera vez que traes amigos...

- Ya, pero el resto de mis amigos no te ve como si fueras carne fresca.

Y la emoción regresa, claro está.

Eiji trató de no chillar. Puede que todo sea imaginación de su hermano sobre protector, mas no le da importancia; una parte de el, la más positiva, solo puede pensar "perra, eres estupenda y fabulosa, estás como quieres, obviamente Ash lynx te ve de esa forma" Por eso prefiere quedarse con su lado positivo. Aunque luego trató de serenarse, fijándose en la manera en que shorter le veia.. como su lindo hermanito.

- shorter.-En esos momentos es cuando eiji podía ocupar sus dotes de actuación y ser el gatito que su hermano mayor conocia, algo que se le daba fácil.- ¿Cómo puedes pensar que alguien me veria asi?

-Eijiiiiii, no te das cuenta de lo lindo que eres, hermanito.

Claro, por supuesto

Eiji le sonrió modesto, continuó con su trabajo mientras shorter cambiava de tema y comenzaba a hablar sobre chicos nuevos que llegaría a su clase de inglés. Shunichi llegó tiempo después a hacerles compañia mientras terminaban de limpiar.

Una vez tuvo todo listo en la cocina, pudo escabullirse a su habitación para ponerse pijama y cepillar sus dientes, bajando luego al salón para despedirse de sus padres; shorter besó su frente  y le deseaba buenas noches. Oni apenas y le maullo antes de volver a acomodarse junto a su madre, gata traicionera.

Sin más se fue a su cuarto, yendo antes a la habitación de shorter para desearle buenas noches. El mayor le dio un apretado abrazo antes de besar sus mejillas, eiji no pudo quejarse. Porque si, eiji Okamura un ángel. Con dieciséis años el japonés nunca habia tenido un novio o novia, solo iba a fiestas en casa de su mejor amiga Yut, tenia las mejores calificaciones y la mayoría del tiempo la pasaba en su cuarto -un desastre natural- junto a su gata.

Oh chico ven a miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora