Volver a Empezar

capítulo 31

Pasaron aproximadamente 3 meses y una fecha importante estaba por acercarse, el complejo estaba en total silencio, todo estaba demasiado tranquilo. Adrien estaba en su habitación jugando con sus muñecos de acción, mientras que Tony y Pepper estaban en la sala pasando tiempo juntos, antes de que el nuevo bebé les quitará tiempo.

-sentiste eso?—pregunto Tony concentrado

-dejalo en paz, está descansando—respondió Pepper un poco estresada

-si se está moviendo—agregó el castaño dejando su mano sobre el vientre de 4 meses que tenía la pelirroja.

-lo vas a fastidiar Tony—lo miró mal intentando hacer que su pareja dejará de insistir.

-Ahhhh—grito moviendo su mano y teniendo la vista de nueva cuenta hacia el vientre.

-ahora que—pregunto la pelirroja mirando el televisor

-si se movió—respondió Tony feliz

-Tony entiende, en estos momentos aún no se mueve, las patadas y movimientos comenzarán cuando tenga 5 o 6 meses, con Adrien fue a si—Pepper lo miro intentando con toda la calma del mundo, explicarle que su bebé aún no se movería como el quería tanto, mientras tomaba con sus manos la cara del contrario para tener su atención.

-entonces que fue lo que sentí?—la miró confuso, dejando que sus suaves manos siguieran agarrando su rostro

-quisa solo fue tu subconsciente que te hizo pensar eso, el cerebro es muy peligroso cariño, sobre todo con lo emocional—sonrió mirándolo fijamente, soltando su rostro creando un ambiente raro.

-esa fue una indirecta?—cuestionó el genio alzando una ceja sin dejar de mirarla

-tomalo como quieras—Pepper alzo sus hombros y sonrió mirando al frente, jugando con la mente del castaño en esos momentos.

-eres malvada Potts—Se acercó a ella peligrosamente dejando que su cara estuviera lo suficientemente cerca de ella.

-eres un genio no?—lo miró con un poco de nervio al mirarlo tan cerca—deberias saberlo—sonrió dejando que el se acercará lo que quisiera, su mano dejo el control cerca de donde estaba.

-por eso te tengo a ti—su cara dejaba claras las intenciones de ese momento, y Pepper lo sabía—para que me ayudes cuando lo necesitó—fue lo último que dijo.

Su cuerpo se enderezó, se acercó a ella de forma amenazante que la obligó a que se sentará de lado en el sofá, para que ambos estuvieran cómodos.
Ella solo lo miraba en silencio, esa mirada decía todo, el lo sabía y solo seguía en su juego.

Se acercó y lentamente su mano rodeo la nuca de ella, obligándola a acercarse, justo cuando estaban a milímetros, la respiración chocando contra la de el, le hizo sentir cosas extrañas en su estómago, y se odiaba por eso, sabía que era el efecto que le causaba tenerla tan de cerca.
Por su parte Pepper lo miró por segundos, aprovechando ese momento en que ambos estaban a segundos de sentirse, sus manos se apoyaban en su vientre, pero momentos después cambiaron de lugar, y ahora estaban en el cuello de Tony.
El se percató de esto, y sonrió antes de continuar, la miró por segundos, y cuando sintió que era el tiempo necesario, acercó por fin sus labios y ambos lo hicieron, conectaron en un beso inesperado y tierno.
Ella seguía aferrada a su cuello y el busco la cintura ajena, para poder acercarse con cuidado, ambos llevaban un ritmo lento, lo estaban disfrutando tanto, esa suavidad y lentitud para poder estar en otro momento, dónde solo ellos eran los protagonistas del momento.
No duró mucho hasta que se escuchó la puerta del elevador abrirse, dejando ver a Clint, Natasha, Bruce y Steve sorprendidos por lo que veían.