𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑋𝐼𝐼𝐼

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Su cuerpo se encontraba estático, sentía sus delgadas y pálidas piernas flaquear debido a ver a esa mujer... que aunque no merecía ser llamada madre el no podía evitarlo. Ella lo trajo al mundo, lo cuidó y alimentó cuando nadie más lo hizo, se preocupó cuando su padre despareció de sus vidas, no podía odiarla era imposible que lo hiciera.

Despertando de ese trance en un movimiento rápido la abrazo siendo felizmente correspondido al instante. Sus ojos se cristalizaron por las emociones encontradas en ese cálido y necesitado abrazo.

Ella presionaba sutilmente con sus manos la espalda de Khun con la idea de que esto no podía ser Real. Al llegar aquí había imaginado el peor de los encuentros con su hijo, incluso que el se sentiría asqueado de tan solo verla pero jamás, de verdad jamás se le cruzó por la cabeza que la abrazaria.

- mamá...- volvió a repetir esas dulces palabras mientras que un par de gotas saladas se colaban entre sus labios.

- perdon hijo - se separó de él para sujetar su rostro y limpiar sus lágrimas, no le fue difícil ya que su pequeño Agüero era mucho más bajo que ella - no fui la madre que merecías - todo el dolor en esas palabras se reflejaba en las delicadas lágrimas sobre sus pómulos.

- no hables de eso, no es necesario - decía el peli celeste limpiando los lagrimales de su progenitora - el pasado es pasado - se acercó a esta y le abrazo de nuevo, ella solo pudo romper en llanto, ¿así de bien criaron a su hijo?, sin duda no se equivoco al dejarlo con ellos.

- tienes razón...- se separó de nuevo limpiando sus lágrimas - ahora vengo a recuperar lo que es mío por derecho - dijo seriamente.

- ¿a qué se refiere?, usted dijo que venía a visitar a Khun, quería explicarle lo sucedido para conseguir que la perdonara - dijo arlene

- si eso es verdad pero ya no es necesario, mi hijo no me odia y yo lo necesito a mi lado, el vendrá conmigo de regreso a España - ella le sonrío. Los cuerpos dnela pareja de esposos presente se tensó de tal manera que podrían ser cortados con una tijera de una solo rose.

- ¡no pueden hacer eso! - grito bam tomando la palabra por primera vez en la discusión.

Ella se giró hacia el detallando lo de arriba hacia abajo.

- no tienes el derecho de hablarme así jovencito. Tal vez hallas embarazado a mi hijo pero no es como para tratarme como uno de los tuyos. Por otro lado hablando de ese matrimonio- miro ahora al ojizarco - no es necesario que ustedes tengan que contraer votos - explicaba ella - las leyes de Europa no son iguales a las de Corea, solo basta que le des una indemnización mensual y listo - ella se encogió de hombros restándole importancia -... Además aunque quisieran casarlos a la fuerza no podrán lograr nada, yo registre a Agnis como español, el no pertenece aquí -

- pero... - las palabras de bam se quedaron en el aire por la extensa explicación de la joven mujer, procesando todo lo que había dicho no le quedaba nada con lo cual contraatacar.

- ahora... - se gira de nuevo hacia Khun - todo esta en tus manos mi pequeño... puedes quedarte aquí y casarte a la fuerza o puedes volver conmigo y entre los dos cuidaremos a tu hijo - le regalo una sonrisa sincera.

Todas las miradas se posaron sobre el peli celeste, este miro primero a sus "padres" y luego a su hermano..., ese que le hizo tanto daño, recordando la razón principal por la cual había venido a esta casa, y si, tal vez en estos momentos se este dejando llevar por sus sentimientos pero ¿quién podía culparlo? El era humano esto solo es un reflejo de sus emociones.

- yo...- estando a punto de confesar que quería acompañar a la mujer que lo vio nacer miro por última vez los ojos de su madre que le dedicó tantos años de enseñanza, amor, comprensión, paciencia y ternura, giro su vista hacia al hombre que se encargó de corregirlo y cuidarlo, al que con tanto amor y cariño llamo papá, al cual abrazo y sin fin de veces regalo ese adorable cartel de color rojo con las simples pero fuertes letras de "Te Amo Papá" no podía dejarlos, le dolería en lo más profundo de su ser - yo... quiero... quiero quedarme mamá - soltó acompañado de un bufido - ellos son mi familia y la familia se apoya y se perdona- al decir lo último sus ojos se clavaron como estacas hacia el castaño el cual no entendía porque peor esa era una charla que joven omega ya tenía planeada.

Arlen se abalanzó sobre el para abrazarlo en compañía de su esposo el cual solo lo apretaba contra su cuerpo en cambio la mujer que era muy sentimental repartía besos por todo su rostro, sin duda esto era lo que más apreciaba de su familia.

- esta bien - suspiró designada la mujer y bastante triste - si no vienes conmigo por cuanta propia no te puedo obligar - con una sonrisa se acercaba hasta este y le depositaba un beso en la frente, en respuesta recibiendo una sonrisa y un abrazo de su hijo del cual se separó al sentir como sobraba en el abrazo de esos cuatro seres.

Ella los miro por última vez, era un abrazo que reflejaba toda la calidez y amor de una famil... ¿amor?... ella odiaba el amor.

- o tal vez si - susurro para si misma saliendo de esa casa.


...

*Sale del sótano de Sangwoo*

Ya se que es corto pero ey es mejor esto que nada jeje.

Esperen que muy pronto subiré la segunda parte de este capitulo y me disculpo por andar desaparecida es que... no es fácil me faltan ganas de escribir pero si tengo inspiración y créanme que esta historia va pa largo.

Sin más que decir...

Yare Yare 💮💚💮💚💋

𝑆𝑎𝑜𝑟𝑖 [𝑲𝒉𝒖𝒏 𝑨. 𝑨.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora