Capítulo 41

84 20 5
                                    

Keyson

Ella desvío su mirada con incomodidad cuando la mire fijamente, voy a admitirlo es una chica bastante linda, su piel blanca estaba bien cuidada, sus ojos eran grandes, cabello castaño con un lacio elegante, su cuerpo no era muy esbelto pero tenía una figura que la hacía ver bastante tierna incluso aunque su maquillaje era sencillo ella se veía tan adorable, era como tener a una pequeña muñeca de porcelana frente a mis ojos.

—¿Por qué me mandaste a llamar? —preguntó por fin tras un largo silencio, podía notar que era de una personalidad débil.

—Pudiste haberte negado.

—Tu padre es aterrador —confesó a lo cual reí.

—Si, la verdad es que lo es bastante.

Y es que no sólo la mirada de aquel hombre era tan profunda su simple altura ya era intimidante para alguien tan pequeña como ella. Aunque fue interesante ver a ese hombre tan intimidante cumpliendo mis caprichos, quien diría que hacerme pasar por Elijah tendría tantos privilegios.

—Solo estoy algo curioso. No todos los días despiertas debido a un coma por los gritos insoportables de la ex-novia de tu gemelo.

—¿Acaso quieres que me disculpe por ello? —interrogó con cierta ironía, aquello me hizo sonreír, creo que si tiene algo de coraje aunque muy en el fondo pues notaba como su cuerpo temblaba debido al miedo.

—No, digamos que fue gracias a ti que desperté así que estoy agradecido.

—Si realmente lo estás déjame volver a casa.

—No te tengo atada en esta habitación del hospital conmigo.

—Utilizaste un chantaje  con tus padres para hacerme venir hasta aquí, dijeron que no harías ningún ejercicio de recuperación sin mi presencia, ellos en verdad están preocupados por ti así que deja de utilizarme como excusa para tu recuperación.

—Vaya si que sabes molestarte.

—Solo no quiero involucrarme.

—Eso dices pero tus acciones dicen otra cosa, para empezar, ¿por qué entraste en mi habitación cuando estaba en coma? ¿Que respuesta querías encontrar?

—Ninguna en particular, solo fue una simple curiosidad.

—Si bueno, la curiosidad mató al gato así que, aquí estamos. Dime muñeca, ¿que es lo que te causa tanta curiosidad?

—Mi nombre es Edelyn, por favor evita el decirme muñeca.

—Digo sin el afán de ofender, es que en verdad pareces una muñeca de porcelana, te queda bastante bien.

Ella me miro por un par de segundos antes de desviar nuevamente su mirada pero está vez con algo de molestia, un silencio volvió a reinar entre nosotros pero cuando ella me miro con cierta decisión expresó por fin su curiosidad.

—¿Por qué Leví —guardo silencio me miró y negó —Elijah, por qué finge ser tú?

—Supongo que todo tiene que ver con el principio de nuestro cambio.

Secretos Del PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora