Secretos Del Pasado

Capítulo 16

Edelyn

"El mundo que hemos creado es un proceso de nuestro pensamiento. No se puede cambiar sin cambiar nuestra forma de pensar"
Albert Einstein

Entre a la cafetería cruzando mi mirada con Leví quien la desvío de inmediato para alejarse. Podía notar su incomodidad y estaría mintiendo si dijera que yo no lo estaba, la verdad es que tampoco quería estar del todo aquí pero debí arreglar mis problemas con Leví, no quería seguir estancada en este lugar.

—Edelyn, ¿como estas? Escuche que enfermaste, ¿todo esta bien? —pregunto Tina mientras me examinaba de pies a cabeza yo le mire para asentir.

—Si, necesito hablar con Leví.

—Claro, pero, ¿por qué? ¿acaso te hizo algo?

—Bien ya basta, deja a los tortolitos resolver sus problemas —Candy empujó a su hermana en dirección a la cocina mientras me señalaba hacia la puerta de emergencia.

Me dirigí un tanto nerviosa hacia la puerta de emergencia para ver a Leví sentado sobre la banqueta, me acerque a él para sentarme a su lado.

—Ese día, no hiciste nada malo... Leví, yo e pasado por muchas cosas que aun influyen en mi. En verdad quisiera contártelo pero aún no estoy lista, no sé si pueda explicarlo pero...

—Lo comprendo—me interrumpió sin mirarme, podía notar en su mirada un gran arrepentimiento del cual estaba segura que aún no podía conocer pero tampoco pensaba exigir pues nos encontrábamos en la misma situación —Te entiendo perfectamente, la verdad es que tampoco e sido del todo honesto contigo, también hice muchas de las cuales aun me arrepiento.

Dijo mirándome con una media sonrisa, me acerque un poco a él para  colocar mi mano sobre la suya.

—Hay muchas cosas de las cuales podemos arrepentirnos juntos para superarlas uno al lado del otro, ¿te parece bien?

—Creo que habrá un problema.

—¿Cual? —pregunté un tanto asustada.

—Es que no me arrepiento del todo por haberte besado.

Mencionó tomando mi mano, sentí como mi rostro ardía debido a la vergüenza de tan solo recordar ese beso.

—Si, yo tampoco me arrepiento del todo.

Mencioné totalmente avergonzada, lo escuché reír mientras me miraba.

—¿Puedo besarte?

—No lo sé, ¿puedes hacerlo? —lo escuche reír provocando en mi una sonrisa involuntaria, ¿por qué dije algo así?

—Quiero hacerlo pero no lo haré si tú no quieres hacerlo.

—Quiero.

Sentí sus labios sobre los míos en cuanto pronuncie aquellas palabras, era una sensación tan cálida, me besaba con dulzura mientras acariciaba mi mejilla con cuidado. Lo vi alejarse lentamente mientras me miraba a los ojos, se acercó nuevamente para besar mi frente.

—¿Con esto pasamos al siguiente nivel?

—¿Que? —pregunté confundida a lo cual él sonrió.