Capítulo 4

83 15 0
                                    

Capítulo 4

Pudiese parecer que al ser la clase de lo que sea que somos estamos acostumbrados a las despedidas, ¿Con cuánta gente no hemos convivido que ya no son más que cenizas de este mundo? Pero la verdad es que de entrada no es como que nos pudiésemos encariñar tan fácil con la comida y segunda, es que después de lo de Ian el mantenerme alejada de los seres humanos era algo que evitaba, no siempre era posible creo que ya lo he comentado, muchas de las cosas que hacen ellos me fascinan, pero al final solo terminan siendo como un simple pasatiempo, nada con lo que uno pueda generar cariño para no tener que pasar por eso...

Así que inevitablemente sabía que ese momento sucedería que el jueguito con Alexander "jueguito" entre comillas tenía que acabar, porque sé en el fondo que con Alexander simplemente no había manera que yo no comenzara a sentir cosas por él, sobre todo porque me recordaba de sobremanera a Ian, y aunque yo sabía que efectivamente no eran la misma persona, me mentía a mi misma diciéndome puedes tener esto, me mentía creyendo que tenía una vida "normal" que era un mortal, pero es que seamos sinceros, uno sabe que va a terminar con el corazón roto, lo que sucede es que te crees tan omnipotente que te mientes diciendo que esta vez será diferente

Así me pasó con Alexander... quizá en esta vida... si

Y odio, odio pasar por esto, y uno de los sentimientos menos favoritos de mi persona es extrañar, pero sé que de alguna manera, este es el momento porque si sigo permitiendo que entre a mi vida, o me quedo sin su amor, o lo asesinan, no hay manera que él pueda saber que clase de bestia soy

Esta tenía que ser la noche en que me despediría de él para siempre, y no, no porque quisiera, no porque no lo quisiera, simplemente sabía que era la manera de salvarlo, de mantenerlo vivo, y que al final, él pudiera hacer una vida que yo no le podía prometer.

—Alexander, necesito hablar contigo— traté de sonar indiferente, me observa atento, aclara su garganta y pone una linda sonrisa que hace que me quiera arrepentir
—Sí, yo también quiero decirte algo, no aguanto más. Pero dime tú primero de que necesitas hablar conmigo. —tomo el valor, no es que quiera, pero debo

—Creo que no debemos volver a vernos, me gusta estar contigo, pero soy sincera no quiero enamorarme de ti, no quiero herirte, yo, esto, no creo que pueda ser correspondido

—¿Por qué no puedes amarme? — me mira detenidamente, como si quisiera que le dijera que esto es solo una broma

—No te lo puedo decir, de verdad, discúlpame, en realidad siento algo muy lindo por ti, pero es algo que se sale de mis manos. — asiente, sé que no quiere, sé que no quiero que se vaya, pero... era lo mejor.

Sus ojos se rasgaron, sé que le dolía tanto como a mí, pero era mejor un dolor de unos cuantos meses, a un dolor para siempre. Me besó la frente y se dio la medua vuelta. Me dolía tanto que se hubiera ido, deseaba que regresara y me abrazara fuertemente. Pero él no sabía qué clase de monstruo era yo


Ya había pasado un mes desde aquella noche, lo extrañaba terriblemente, quería ir corriendo a estar junto a él pero sabía que no podía. Caminaba en aquel callejón donde lo encontré la primera vez, rogándole al universo que pudiera encontrármelo otra vez, recuerdo esa pequeña plática, ¿era el destino conocerlo para volverme a sentir viva?

— Juliette

Alguien me hablaba pero no reconocía la voz, voltee sutilmente y frente a mí un joven de tez morena y cabello negro venía hacia mi.

—¿Eres juliette? — pregunta

—Si, ¿Por qué? —

—Soy amigo de Alexander, me llamo Cristobal, Alexander tenía razón aquí te encontraría.

—Discúlpame me tengo que ir, buenas noches —tenía la necesidad de huir ante su nombre

—¡No!, espera, Alexander está en cama, lleva tres semanas que no va a clases ni a trabajar, la última vez que platicamos me comentó que aquí te había conocido y que a la mejor aquí te podría encontrar, también me dio la dirección de tu casa pero he ido por las tardes y nadie me ha abierto, ¿podrías ir a verlo?

Mi Amor Inmortal [Trilogía Amores Inmortales]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora