Inquieta

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Esa tarde, volví alegre de mi pequeña aventura, nunca pensé que me encontraría con alguien tan genial como él, que lograría divertirme tanto, con el tiempo pasara tan rápido, pero lo que más me dejaba pensando era el hecho de que cuando estaba a su lado, me sentía vulnerable, porque solo el lograba sacar una faceta distinta de mi, lograba escarbar un poco en mi interior y hacer relucir eso que yo creía que ya había muerto y que solo guardaría para mi misma.

En cuanto abrí mi caja, para volver y alimentarte, note que estabas inquieto como un gorrión, brincabas de alegría y suspirabas, y lo hiciste aún más cuando te alimente de tu dosis diaria de locura. Aún permaneces negro, pero me sorprende que estés tan inquieto y contento de nuevo, quizás este lindo joven guitarrista esté llamando tu atención, pero aún no estás listo para salir de tu caja, hay mucho por sanar todavía.

Historias De Una Loca Soñadora.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora