Astrid: vaya, vaya que sorpresa..., Dónde están Paola y Alondra por qué no las veo contigo Anabella
No sabía que hacer mi respiración se comenzó a celerag y mi boca estaba totalmente seca, mis manos temblaban y no podía bajarme de la moto ella se acercó y solo senti un golpe en mi cara haciendo que mis ojos se cerrarán, me gire lentamente para observarla su mirada era de infierno y ya mi muerte se estaba aproximando
Astrid: súbela a la camioneta y tú llévate su moto
Se subio a la camioneta y unos dos hombres me bajaron y me montaron en ella, mis lágrimas no dejaban de salir yo aún estaba en shock, no quería ni mirarla, el auto comenzó andar mientras yo miraba hacia bajo jugando con mis manos, en todo el trayecto hubo un silencio rotundo hasta llegar al edificio, nos bajamos y subimos al departamento, abrió la puerta y me tomo del brazo hasta empujarme hacia la cama cerrando la puerta
Astrid: Maldita sea Anabella crees que no me doy cuenta? Crees que soy estúpida? O que?
Mi silencio le molestaba sintiendo otra bofetón en mi cara...
Astrid: responde maldita sea responde por qué te quedas callada siempre!!, Sigues viéndote con esa mujer sigues follandotela como siempre, sigues diciéndole que la amas, por qué haces esto Anabella a a qué estás jugando, siempre he Sido sincera contigo en todo momento!!
Anabella: en todo momento? O se te olvidó cuando me ocultaste que eres casada!! Felizmente casada!!, Y si estaba en casa de ella pero no hice nada, Susan es mi amiga también así quedamos hoy como amigas!! Y nada más ella sabe lo mucho que te amo y estoy enamorada de ti, ya deja de pegarme por dios no soy tu pera de boxeo, escúchame primero por favor
Astrid: como amigas folladoras?
Anabella: ya basta Astrid por favor!!
Astrid: No!! Anabella, no voy a parar por qué eres y sigues siendo una maldita mentirosa de mierda, dime de una buena vez que pasará con esto
Anabella: no me trates así, no me faltes el respeto así
Astrid: y tú si puedes faltar el mío cuanto te plazca? Si puedes?, Bravo Anabella ahora hazte la víctima como siempre
Anabella: ya basta Astrid te lo pido hablemos con calma mira mi labio está hinchado me lo rompiste estás completamente loca!!
Astrid: loca de amor por ti quien me mandó a fijarme de una niñita como tú quien por dios!! No debí hacerte caso no debía seguirte el juego y ahora no se cómo salir de aquí por qué TU me metiste y no podré salir jamás
Anabella: si tanto te arrepientes de estar conmigo pues me iré de tu vida por qué de la empresa también lo haré para que lo sientas mi presencia en ella ni en ningún otro lugar
Astrid: tu de aquí no sales Anabella, yo no te he dicho que te muevas de allí
Me volvió a empujar de la cama se monto encima de mi me beso desesperada yo trataba de quitarme la encima, pero sujeto mis brazos colocándolos arriba, mientras me besaba, moví mis piernas pero ella me las apretó con las suyas, saco de sus bolsillos unas esposas y me amarro de la cama, me comencé a sustar se quitó la ropa quedando en ropa interior, colocándose de nuevo encima de mi
Astrid: te voy hacer mía Anabella, tu eres mía y de nadie más, por qué no estando Francesco a su lado dejaría que tocaría sin mi consentimiento, entendido?
Anabella: estás loca Astrid, muy loca
Astrid: tu me hiciste así tú provocaste todos estos celos ardidos, ahora necesito de ti a cada momento de tus labios, tus ojos, tu cabello, tus piernas...
Comenzó a besar cada parte de mi cuerpo que era nombrada por ella, quitándome la ropa después y con su látigo negro pegándome en las partes sensibles, comencé a sentirme muy exitada quería que me penetrara lo más rápido posible pero ella se negaba quería su venganza y allí me tenía en una cama esposada desnuda moriendo cada parte de mi ser haciendo que mi cuerpo se arquearse cada vez que ella hacía algún tacto en el, mis pies también fueron amarrados, pero esta vez ella abrió esa mágicas esposa que hizo que me quejara de dolor al abrir las piernas...
Astrid: hoy te enseñaré a respetar s tus mayores señorita Aponte
Anabella: s-se q-que esto es u-una venganza
Astrid: quizás... Verte sufrir y suplicar por sexo me encanta, aunque podría dejarte aquí e irme a la sala a tomarme un café, pero antes de eso meterte este hermoso vibrador que lo compre para ti el día de hoy
Lo introdujo en mi haciendo que yo soltará un gemido, tomo su celular y comenzó a presionar desde su celular, yo no lo podía creer pero así lo era, mis caderas bailaban al ritmo de la vibración, ella se levantó quitándose su bikini se monto encima de mi comencé hacerle sexo oral mientras ella con su teléfono jugaba con el vibrador, ella también gemia de placer luego se levantó para darme respiración se salió de la habitación aún con el celular en la mano, este juguete comenzó a tener una vibración un poco más fuerte a lo que yo no podía quitarme las esposas genia muy fuerte gritando su nombre una y otra vez, ella se colocó en la puerta del cuarto y comenzó a reírse de manera diabólica
Astrid: vente para mí, llega al climax para mí y di mi nombre las veces que sea necesario
Y así fue dije su nombre gemi duro y antes de terminar me saco el aparatico. Fue ahí donde toda la cama se empapó haciendo que ella lamiera el juguete y mi parte íntima también, mientras todo mi cuerpo temblaba, me quito las esposa de los pies y luego las de las manos, haciendo que yo me colocará en posición fetal se levantó y salió de la habitación, luego regreso con un vaso de agua
Astrid: toma y levántate para que te bañes, y poder curarte la herida
Anabella: abrázame por favor
Se acostó a mi lado y me abrazo cerré mis ojos y ella se pegó más a mi abrazándome un poco más fuertes, dándome un beso detrás de mi oreja
Astrid: te amo y no sabes cuánto...

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Mr. & Mrs Grimaldi
RandomNo debí convertir esto en triángulo... Jamás me lo perdonaré