Entre tu y mil mares

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Me desperte y estaba en la habitación con Francesco y Astrid me levante con cuidado directo a la cocina tenia mucha sed abri la nevera y tome agua me quede un rato en la nebulosa mirando a la nada con el vaso en la mano, de rrepente senti la presencia de alguien observandome, me gire y era Francesco me asuste y solte el vaso por userte el lo sujeto antes de que callera al piso, quedo muy cerca de mi pasando mi mechon atras de mi oreja, se acerco lentamente hasta darme un beso en mis labios, coloco el vaso en el meson y sus manos dos manos tomaron mi rostro para volverme a besar con suavidad separandose para darme un beso en la frente y envolverme en sus brazos 

Francesco: Esto debe parar yo no se que esta pasando entre ustedes dos, pero necesito que me cuentes para asi poder ayudarlas 

Anabella: Lo que menos quiero es meterte en problemas Francesco, nuestra relación esta muy bonita dejemoslo asi mejor, esta bien?

Francesco: segura?, puedes confiar en mi 100% no se lo dire Astrid te lo prometo

Anabella: No, estoy segurisima, tienes hambre por que yo si 

Francesco: dejame limpiarte ese labio primero si no, se te infectara, ven vamos

me sente en el sillon mientras el buscaba las osas para limpiarme el labio yo seguia viendo a ala nada y de nuevo me asustaron pero esta vez no fue Francesco si no, Astrid se me sento al lado, salte cuando la vi y me levante enseguida

Astrid: sientate te voy a curar 

Anabella: pense que lo iba a hacer Francesco

Astrid: si, pero yo le dije que fuera a comprar comida o no quieres que te lo limpie yo?

Anabella: Da igual, no me importa

Me sente de frente para que me empezara a limpiar lo que ella habia ocasionado me dolia de vez en cuando me quejaba del dolor ella solo decia que lo sentia mientras me curaba la herida, luego me beso con cuidado una lagrima salio de sus hermosos ojos, yo se la limpie me miro y tomo mi mano bajo su mirada y comenzo a llorar desconsoladamente yo levante su rostro y la volvi a besar

Me miró a los ojos pidiendome disculpa de nuevo, no dije nada solo la mire y cerré mis ojos apretando mis dientes para no llorar me levanté y me fui directo al baño sentí sus talones detrás de mi, mientras llenaba la tina me fui desvistiendo ella estaba detrás de mi con los brazos cruzados al quedar desnuda me abrazo colocando sus manos en mi pecho abrazándolos

Anabella: Debo ducharme Astrid me puedes soltar?

Astrid: me meteré contigo

Se desnudo mientras yo me metis en la tina ella luego se metió colocándose detrás de mi abrió sus piernas, me abrazo y luego me sumergí al salir ella me volvió a besar sus labios todavía siguen siendo mi mayor consuelo, su piel su tacto todo de ella sigue siendo para mí algo más allá del sexo es un amor que no me deja huir de ella, no sé si soy su prisionera enredada en sus caricias que me llevan directamente al infierno para subirme lentamente al cielo, y dejarme posar en sus brazos que son como una nube suave y relajante para mí, nos quedamos en silencio solo ella acariciandome y su respiración suave detras de mi, no habiamos sentido de que Francesco habia regresado, estaba parado en la puerta con un vaso de whisky.

Francesco: Quisiera meterme con ustedes pero me tengo que ir a una reunión de trabajo, la comida esta en la mesa yo ya comi las amo__se acerco para darnos un beso a las dos y luego se fue 

Anabella: Tienes hambre?, por que yo si

Astrid: jajajajaja anabella!! tu siempre tienes hambre a toda hora, vamos!!

Nos colocamos la bata de baño luego salimos del cuarto hacia la mesa del comedor, habia pizza y helados, los coloque en la nevera la pizza se veia realmente rica asi que comenzamos a comer, ella me robaba un beso a cada segundo, despues de comer recogimos todos nos arreglamos y nos fuimos a pasear un rato las dos agarradas de mano, luego nos montamos en el auto y salimos de la ciudad llegamos a una playa estaba sola, ella me abrazaba por detrás mientras yo observaba el mar

Astrid: En qué piensas?

Anabella: en lo hermoso y tranquilo que es el mar

Astrid: también es peligroso si le haces algún daño

Anabella: cómo a las personas verdad?__Me gire para verla y su silencio mirándome a los ojos volteó hacia el otro lado mientras la brisa levantaba algunos de sus mechones de cabello... Te amo Astrid y a ti siempre te voy a elegir entre tu y mil mares, siempre serás tú, tu eres mi océano y no precisamente pacífico, eres un océano lleno de cosas sorprendentes y maravillosas, pero también te puedes convertir en una tormenta y destrozar a todo lo que se te atraviese, sin importar nada ni nadie, pero luego estoy yo, que soy una simple playa pequeña tranquila pero con mucha paz y sobre todo alegría, dónde los huracanes y tormenta le aterran, pero tambien es parte de ella

Astrid: Que hermosa descripción me acabas de hacer amor, pero yo no quiero destruirte me importas y mucho y quiero que estemos bien siempre

Anabella: Solo amame Astrid y no destruyas cada pedacito de mi cuerpo que te entregado con toda mi alma

La abrace y unas cuantas lagrimas salieron de mi el suspiro que salio con todo mi ser hizo que ella me pegara mas a su cuerpo, quedando totalmente en silencio solo escuchando las olas del mar, mientras acariaba mi cabello, se solto de mi limpiando mis lagrimas me dio corto beso tomo mi mano y nos metimos al mar en ropa interior estabamos abrazadas nos sumergimos juntas las olas no estaban tan fuerte, eran suaves sentia que estaba en un baile dentro del mar donde las olas y su sonidos eran una balada romantica

Astrid: Te amo mi niña y yo nunca te voy a dejar...

Solo la mire dandole una sonrisa no se cuanto durara esto pero tampoco quiero que se acabe y me deje rota...

Mr. & Mrs  GrimaldiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora