Poco a poco comenzó abrir los ojos acostumbrándose a la luz de la habitación.
—¿Estás despierto ahora, pequeño imbécil?. - Hablo Roberto a su lado mirándole con indiferencia mientras que Diego murmuraba.
—¿Roberto? ¿Dónde estoy?. - Pregunto sentándose en la camilla sintiendo un mareo fuerte haciendo que este llevara por precaución su mano hasta su boca para evitar un accidente. —Estoy tan mareado.
—Apuesto a que lo estas.- Exclamo molesto dejando caer en sus pies una bolsa pequeña con muchas pastillas, Diego abrió sus ojos mirando fijamente lo que yacía a unos cuantos centímetros de sus manos. —Nunca creí que eras así de estúpido. - Hablo Roberto.
—Inhibidores de feromonas. - Logro murmurar en alto Diego sin apartar su vista de aquellas pastillas.
—No solo has estado tomando estas peligrosas pastillas, si no que has estado tomando más de lo que te prescribieron, ¿estás malditamente descerebrado?. - Hablo Roberto sin apartar su mirada en el para después hablar nuevamente; —¿Sabes cuáles son los efectos secundarios de estos?. - Tan pronto finalizo la pregunta rápidamente Diego respondió.
—Sí lo sé.
Aquella respuesta hizo enfurecer a Roberto para girar su cuerpo un poco y hablar enojado.
—¡Entonces por qué mierda!. - Grito furioso.
Diego sonrió un poco levantando su mirada hacia el. —Son perfectas para mí. - Tras decir aquello Roberto le miro sin entender del todo hasta que Diego volvió hablar. —Después de todo estoy renunciando a mi Omega.
Hubo un silencio bastante tenso entre ambos, Roberto aun procesaba sus palabras.
—Cuando tenga 18 voy hacerme una cirugía de esterilización. - Hablo fijando su vista en una parte de la habitación para no verle a los ojos.
—¿Qué?. - Hablo incrédulo Roberto sin creerlo. —¿Cirugía...De esterilización?
—Así es, así como las mascotas...Seré castrado. Finalizo con una leve sonrisa en su rostro.
—¿De qué mierda estas hablando?. - Pregunto Roberto hacia el.
Diego suspiro pesado para luego responder. —Entrando en celo, perdiendo el control de mí mismo, tener sexo y quedar embarazado...Ser castrado es la apuesta más segura...Técnicamente aún ahora sigo en celo...Así que probablemente apesto ¿Huh?. -
Roberto aun seguía mirandole con los ojos abiertos procesando sus palabras.
—Yo tomo Inhibidores de feromonas y supresores...Pero aparentemente eres increíblemente sensible a los aromas. - Comento Diego mirando por fin a Roberto quien no dejaba de verle, su rostro cambio a uno de molestia leve. —Tener a un Alfa alrededor me está tensando...¿Podrías irte ahora?. - Pregunto mirandole.
Roberto trago duro apartando un poco la mirada seguido de bajarla levemente y hablar; —Yo tomé supresores de Alfa, no habrá ningún problema.
Diego rio levemente llamando su atención. —¿Por qué?, los Alfas odian tomarlos...Ellos odian la idea de tener que alzar un dedo para la comodidad de cualquier Omega...Es raro viniendo de ti. - Finalizo.
—No es extraño, era la condición de estar aquí. - Murmuro mirando hacia el suelo.
—Así que tomaste supresores solo para sentarte ahí e insultarme...¡HAHA! ¡¿CUÁNTO ME ODIAS?! ¡SOLO VETE! . - Grito molesto Diego tomando las sabanas de la camilla para seguido tapar su cuerpo dejando un poco ver su cabello castaño.
Roberto se levanto de la silla para acercarse hasta la camilla donde apoyo un poco su cuerpo para después inclinar un poco su torso hasta que su rostro estaba cerca de la del castaño y hablar.
—Diego, acuéstate conmigo.
—¿Perdón?. - Pregunto girando su rostro para toparse con los ojos de Roberto.
—Ten a mis hijos.
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「O M E G A」
FanfictionMuchas veces el destino puede estar contigo o en tu contra, Diego pensaba que estaba en su contra al saber su género designado. HISTORIA COMPLETAMENTE MÍA. NO COPIAS NI ADAPTACIONES SIN MI PERMISO. LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN, SIMPLEMENTE LOS U...