Capítulo 5

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—Eso no lo esperaba, que feos gustos tiene Hinata. — Temari era una persona que no se guardaba su opinión jamás.

—Por que terminaron?

Sakura observaba a Sasuke y este simplemente negó. Colocó una mano en su barbilla y fingió pensar.

—Termine con Hinata cuando aún seguía en el hospital recuperándose de el disparo.

Neji lo miraba fijamente y es que aún recuerda como su hermana lloraba y gritaba por Sasuke. Gritaba de enojó, tristeza nunca supo bien el porque.  También recuerda ir por Sasuke y golpearlo frente a la mansión Uchiha.

—Que idiota.

Todos comenzaron a decir que realmente era un idiota. Naruto se preguntaba que egoísta era como para nunca enterarse de todo eso.

—Ahora que saben eso. Ya déjenme en paz.

La noche en el pub siguió, Naruto se topó con Samui y se perdieron un rato en el baño. Neji seguía en la mesa con TenTen en su regazo.  Los demás estaban en la pista de baile.

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Hinata estaba sentada en una banca cerca de la cafetería. Sasuke estaba ahí con todos los demás pero si lo había evitado todo este tiempo no iba a ceder porque ahora tenían amigos en común.

—Como es que dejaste que Sasuke saliera con ella?— Naruto preguntó cómo si nada.

—Recuerdas mi regla de no llevar a nadie a mi casa. Inicio por el, una vez lo lleve y eso le bastó para que Hinata le gustara.

Naruto buscaba a Hinata entre las mesas pero nada. Shino y Kiba solo tomaron su almuerzo y salieron disparados de ahí.

—podemos dejar de hablar de eso. Son una molestia por eso no les dije nada.

Sakura no sabía que sentir, Hinata llegó a ser la novia de Sasuke y al parecer fue amor a primera vista.

—Oh! Por eso Itachi-san es mejor amigo de Hinata. Si fue su cuñado…

Tenten miraba pícaramente a Sasuke este suspiro y le lanzó un pedazo de pan.

—por dos años.

Naruto conocía a su mejor amigo, el tuvo que estar  muy enamorado de Hinata para llevar ese tipo de relación.

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—Hinata-chan te encontré.

—Para encontrarme tendría que haberme escondido primero Naruto-san.  Que bueno verte, me gusta tu playera. — Hinata ni siquiera lo estaba viendo  seguía metiendo sus libros a su locker.

—Tienes cosas que hacer hoy?  — Hinata se giró a verlo. Sonrió ampliamente y tomó su mano.

—Ire al asilo de ancianos que administra la fundación Hyuga. Me quieres acompañar, solo tocaré unas piezas con el violín. Luego podemos ir a ver una película en tu departamento, incluso cocinare para ti.


Naruto noto un destello en su mirada, estaba pensando los pro y contra de ir con Hinata. Kiba y Shino aparecieron.

—Di que no, si te quiere llevar al asilo dile que no.

Hinata se giró y les dio un pequeño regaño. En serio que Hinata era una rarita. 

—Las ancianas te aprietan los cachetes. Huelen a jabón. —Kiba hacia una mueca fea.

—Ustedes son tan crueles. Kiba-kun no te abrazare nunca más si sigues diciendo esas cosas.

—No podría vivir sin tus abrazos, está bien linda. — Kiba sacudió el cabello de Hinata. Shino apartó a Kiba y acaricio su mejilla.

—No puede ser tan malo. — Naruto susurro más para si mismo que para informa que si la acompañaría.

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Naruto estaba sentado entre unos ancianos que le contaban que habían ido a la guerra. También le mostraban sus tatuajes eventualmente el mostró los suyos y se reían de el por los colores que tenían algunos.

—Me alegra que Hina-chan tenga novio de nuevo. Aunque no veo amor en tus ojos.

El señor Takeda lo miraba fijamente, Naruto lo vio de la misma forma. Ningún decrépito lo iba a intimidar.

—El otro me caí mejor. Cómo se llamaba susuki, Sasori, sasuki a no ese ya lo dije.

—Sasuke, este anciano ya olvida todo. Sasori fue el que lo intento hace unos meses y pues no. — otra señora se había metido a la conversación.

—Sasuke venía con ella, todo el tiempo. Se sentaba en ese rincón de allá y la miraba por horas. Hasta que era la hora de irse.

Naruto no dejaba de pensar que era muy egoísta y que solo pensaba en el. Nunca noto la ausencia de Sasuke durante ese tiempo.

—Ese joven miraba a Hinata como la joya más preciada.  Pero un día Hinata apareció sola.

—Ese bribón jugo con su corazón. Hinata sufrió en silencio como la damita que es.

Naruto comenzó a escuchar a los ancianos tenían muchas historias y la mayoría maldecía a Sasuke. Hinata se encontraba en  medio de el salón tocando y haciendo bailar a los ancianos. Ella parecía feliz, muy feliz.   Pasaron cerca de tres horas ahí.

—Naruto-san gracias por venir. Espero que no te tocaran mucho las ancianas.

—Que va, me sentí sexy.

La risita traviesa de Hinata era un dulce sonido para Naruto. Los ancianos llegaron a despedirse de ella y a darle dulces que tenían escondidos. Ella les sonreía y se dejaba abrazar, un flash distrajo a Naruto. Un fotógrafo profesional estaba sacando fotos a Hinata y los ancianos.

—Que molesto, odio que hagan eso.  Los ancianos no se molestan pero yo sí, sin embargo si quiero usar el dinero de el grupo Hyuga debo soportar esto

Naruto la abrió la puerta de su auto a Hinata y le dio una mala mirada al tipo con la cámara. 

—Sigue en pie lo de ver una película en mi casa?

—Veamos  Given…

—Veremos Given y la siguiente que sea IP Man 4.

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Naruto hizo una parada en un pequeño supermercado pero no espero que Hinata se bajará con el. 

—Sabe Naruto-san me agrada mucho, usualmente mis amigos me llevan a lugares  de alta clase y así. Pero usted me lleva a la intimidad de su hogar y eso lo aprecio mucho. 

Hinata si era rarita. Usar la palabra hogar para su departamento si que estaba mal.  No sabía cómo tomar lo de que sus amigos la llevan a lugares de alta clase.  Pero ella parecía feliz de  algo tan sencillo como invitarla a ver películas.

—Por cierto, puedo preparar  la cena?

—Tienes hora de llegada?

Hinata negó y sonrió, si ella le seguía sonriendo así la besaría. Hinata fue por un carrito, el lo tomo y le indico que ella guiará.  Mientras escogían los ingredientes ella le explicaba cómo escoger los vegetales y frutas frescas. Hinata aprovecho unas cuantas ofertas y al final el carrito termino lleno. Mientras hacían fila una señora les dijo que eran una linda pareja de recién casados. El se sonrojo, estaba seguro que Hinata sería una gran esposa.

—Hinata no tenías porque pagar todo.

—Mi dinero y hago con el lo que quiera.

Termino de colocar todos los comprados en la parte de atrás de el auto. Hinata estaba parada frente a la puerta de el copiloto, no vio venir a Naruto quien la empujó de espalda al auto y la besó. No hubo tiempo de gritarle que era un troglodita, el beso fue exigente y cuando ella intento conseguir oxígeno fue el momento perfecto para que Naruto invadiera con su lengua. El beso aumento de tono cuando una mano curiosa se posó sobre una de sus senos. Un gemido involuntario salió de ella, La entrepierna de Naruto dio un estirón llegando a ser un poco insoportable. 

—Hinata….

Naruto iba a disculparse con ella pero tuvo que tragar fuerte. Hinata tenía un poco hinchados los labios y tenían un rojo exquisito. Sus mejillas sonrojadas y su respiración un poco entrecortada.

—Eres un…..wow. me siento mareada, es normal que me sienta así?.

Hinata estaba confundida, no era correcto que se besaran. Pero no era algo que le desagradara, pero no estaba bien. Naruto está enamorado de Haruno-san.

—Hinata, vamos a mi casa?.

Hinata se sorprendió de el tono de voz que uso Naruto. Fue muy bajo casi un poco animal.

—Si.

Naruto no sabía si ella aún quería estar con él después de besarla de esa forma. Su mano derecha picaba, esa mano tocó el cielo. Hinata estaba bendecida con dos enormes y suaves pechos. El teléfono de Hinata sonó, el se limitó a mirar el camino. No quería parecer un fisgón.

—No, ya hablamos antes de ese tema. ¿Una amistad?, Eso sí que es nuevo en ti. Pero no la necesito y no quiero.

Hinata corto abruptamente la llamada. Parecía buscar algo y luego llevo a su oreja el teléfono.

—Kiba no creerás quién me llamo, el señor de las tinieblas. Ese quel maledetto maiale, con quale sfacciataggine mi chiama. Dovrei ucciderlo.

Que Hinata intentará disimular su enojo hablando en italiano se le hacia algo interesante. Si su italiano no estaba mal ella dijo “ese maldio cerdo, con que descaro me llama. deberia matarlo” .

Todo el camino a su departamento Hinata parloteo en italiano. Quien sea que fuera el rey de las tinieblas sí que era odiado por Hinata.

Estaban bajando de el ascensor, cuando Naruto  identificó a dos figuras frente a su departamento. Sakura y Sasuke,  no recordaba que tuvieran una salida o algo por el estilo.

—Me voy, Naruto-san lamento tener que dejarte así. Me iré en taxi.

—Quedate, estás aquí por mi. No por el Hinata.

Hinata estaba parada frente a frente con Naruto. Este había querido tomar su mano pero estaban  llenas de bolsas de super.

—Lo sabes….

—No por tus bellos labios, créeme que tenía planes para ellos.  Hablaremos de esto luego ojos de luna.

Sakura observaba la escena con ojos de amor, ella quiere que Naruto sea feliz con alguien. Que siente cabeza, Hinata es digna de su promiscuo amigo. Se encargaría de que estén juntos.

—Buenas noches, Uchiha-san, Haruno-san. 

Naruto abrió la puerta y entraron. Hinata casi corrió a la cocina.  Naruto dejo las bolsa en la cocina y arrinconó a Hinata, de nuevo. 

—No se qué pasó, la verdad no me importa. Pero por favor quédate tranquila nada malo va a pasar.

—Naruto, yo lamento no poder decirte que es lo que paso. — Naruto tomo el rostro de Hinata y le dio un pequeño beso en la nariz.

Hinata despertaba algo en el. Algo que no estaba listo para sentir y que no quería sentir por nadie más que Sakura. Se alejó abruptamente de ella casi como si le quemará estar cerca.

—Hinata, basta de juegos con Naruto. Sabes que este hijo de puta no sentirá nada por ti nunca. A él le encanta estar liado con cuenta zorra le abra las piernas, quieres pasar a las filas.

Sasuke estaba apoyado en el marco de la puerta de la cocina. Ella se giró y lo encaro, la diferencia de tamaño no la iba a intimidar.

—Sasuke crees que me importa lo que tengas que decirme a estas alturas. Eres tan hijo de puta como el. Que tu madre me perdone pero es la verdad. De que me hablas si eres igual, igual. Hablarme de algo que ya se es estúpido y no entremos que se supone que el es tu mejor amigo.  Incluso si quisiera algo con el, cosa que para tu maldita idea no es así. No es tu maldito asunto mi queridísimo amigo. 

Naruto y Sakura se habían juntado para observar todo. Naruto estaba acostumbrado a escuchar a Sasuke solía despotricar contra el y ya luego le dará un puñetazo a Sasuke.

—Hinata eres tan sexy cuando te exaltas.

Hinata sonrió y se acercó a Sasuke, lo tomo de el rostro y  acercó su rostro al de el. Sakura frunció el ceño y apretó el brazo de Naruto. Lo que los sorprendió fue el impulso que Hinata tomo para darle un cabezazo a Sasuke.

—dannato idiota (Maldito imbécil)

Hinata pronuncio eso luego de el cabezazo. Miro a Naruto y Sakura hizo una pequeña reverencia. Tomó su bolso y salió de el departamento.

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Un silencio reinaba en su sala, Sasuke tenía una marca roja en la frente. Sakura colocaba hielo en la marca, Naruto estaba intentando no matarlo.

—Naruto, no es culpa de Sasuke.

—Cállate, solo cállate. Ella apenas está siendo mi amiga y ustedes par de idiotas arruinaron mi cena y noche de películas. Ahora está el hecho que se fue sola y Neji me matará.

—Hinata, debió llamar a Itachi. Ya me envió un mensaje para decirme que soy un imbécil.

—Tienes algún problemilla con que ella sea mi amiga?

Sasuke lo vio, esos ojos color onix lo miraban tan gelidamente que si fuera otra persona cedería pero era Namikaze Uzumaki Naruto el no cede ante nadie.

—Uno muy grande, no quiero que te metas en sus faldas. Si solo fuera amistad no me metería pero te conozco y no solo quieres una amistad como la tienes con Sakura.

Naruto vio a Sakura quien tenía una mirada triste. No entendía que miraban al idiota de Sasuke.






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