CAPÍTULO 8. EQUILIBRIO

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Jennie metió la cuchara con helado entre sus labios y trató de buscar el sabor en algún punto de la crema derritiéndose sobre su lengua, pero no tuvo éxito. Odiaba los dulces dietéticos. De hecho, aún sentía remordimiento de pensar que amaba todo lo que tenía calorías y sabía bien.

Ryujin cruzó los brazos "Jen, entonces ¿qué has pensado?"

La joven de cabellos oscuros salió del trance e introdujo un poco más de helado en su boca. Pasó sin saborear, suspiró y negó con la cabeza. "Obviamente: No tomarlo."

"¿Has pensado que tal vez no sea tan malo después de todo?"

"No estudié para ser la asistenta de alguien, Ryujin."

"El mantenerte ocupada te haría sentir menos aburrida. Y ganarías dinero." Yuna intervino, para luego hundir su cuchara en el helado de Jennie. Al probarlo, arrugó su rostro y pasó el contenido asqueada. "Por dios, qué clase de basura es esta..."


"Helado dietético." Dijo Jennie.

"El helado no puede ser dietético. Si es de dieta, no es helado."

Jennie se hundió en hombros. Ryujin tomó un sorbo de su té de jazmín y tomó la muñeca de la mayor dándole ánimo. "Jen, deberías ir a la entrevista y probar si te gusta."

"Solo por probar." Asintió Yuna.

"Muy tarde. La entrevista fue hace una o dos horas, no lo recuerdo." Reunió el poco helado que le quedaba en el vaso de vidrio y lo colocó en la cuchara.

"¿Entonces lo hablaste con Jeonghan?"

"Oh, no. Eso significaba discutir inútilmente una vez más."

"Bueno, es probable que le hayan informado cuando declinaste la oferta."

"No decliné, solo... La ignoré y vine a comer helado con ustedes." Sonrió.

"Tu novio va a molestarse cuando se entere." Dijo Yuna finalmente interviniendo. "Mucho."

"Lo sé. Como igual iba a molestarse, decidí ganar tiempo buscando la forma de reconciliarnos desde ayer." Buscó en su celular. "Y es por eso por lo que necesito su ayuda, para armar esto..." Las imágenes de una cena romántica empezaron a correr en la pantalla.

"Odio decorar." Dijo Yuna.

"No hay que decorar, lo que necesito es que me recomienden un delicioso plato, un buen restaurante, dónde comprar velas y esas cosas." Jennie sonaba emocionada.

"Deberías prepararle algo tú misma." Yuna enfatizó.

"No. No soy buena en la cocina. Él apreciará más algo que no esté crudo o quemado."

"Apreciará cualquier cosa hecha por ti." Ryujin sorbió un poco más de té.

"No si le causa indigestión, Ryuging."

"Jisoo puede ayudarte." Dijo Yuna. "Dices que ella cocina bien, ¿No?"

"No creo que pueda pedirle un favor a Jisoo."

"¿Por qué? Pensé que todo iba mejor entre ustedes."

"De hecho, increíblemente, sí." Jennie asintió. "Pero me avergüenza pedirle algo. No es como si tuviésemos toda la confianza del mundo. Desde hace pocos días dejamos de discutir por las noches sobre cualquier cosa."

"¿En las noches? ¿Cualquier cosa?"


"Era el único tiempo que teníamos para discutir... Y vernos la cara, básicamente." Se hundió en hombros. "Es lo que mejor se nos da y sin mala intención."

El apartamento [Adap. Jensoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora