Espuma de mar || Omegaverse

Prologo

Un día, escuche un cuento, no recuerdo quien me la conto, pero si como inicio, yo le hablaba sobre el cuento de La sirenita, un pequeño libro infantil que había encontrado en mi casa entre las cosas que me había dejado mi abuelo, recuerdo una desgastada pero firme voz que me hablaba con gran elocuencia.

"Esa historia tiene otro final al que te muestran en ese cuento para niños, la sirenita te habla de un amor imposible que se vuelve posible entre una criatura de mar y un humano, que claro es terrestre, pero uno no siempre logra romper lo imposible, ella no consigue que la ame, mucho menos casarse con el"

Recuerdo haber preguntado [¿Por qué? Ella lo amaba mucho y el amor puede contra todo]

"El amor no siempre vence a las diferencias y mucho menos los prejuicios"

[Pero ambos eran de la realeza el era un príncipe y ella la princesa del mar]

"Hay muchas diferencias más, la sirenita no podía vivir en la tierra y el príncipe no puede respirar bajo el agua, ella lo amaba mucho tanto que eso fue lo que la destruyo, su amor se convirtió en llanto al ver a su ser amado continuar con su vida y casarse con alguien más, fue su llanto lo que termino convirtiéndola en espuma de mar porque ella siempre perteneció al océano cosa que nunca podría cambiar"

Yo como un niño ingenuo mire el mar, observando como sus olas estaban llenas de esa espuma blanca que ondeaban hasta llegar a orilla y desvanecerse como si no pudiera cruzar esa gran barrera de arena [¿Entonces lo que hay en el mar son lágrimas de sirena?]

"Lágrimas de un amor no correspondido... Mikael, no hay nada más doloroso que un amor no correspondido"

Esa platica que olía a tabaco y perfume barato, pero aun así me marco tanto, como si fuera una ley absoluta, es graciosos como no recuerdo el rostro de la persona que me lo dijo, pero si con exactitud la situación, para un niño como yo, en el que las palabras de un adulo afectan tanto, casi parecía como si intentara reparar esa fallida historia amor, el cuento para niños a acumulado mucho polvo en mi armario, por que prometí no abrirlo hasta encontrar a mi sirena, por eso cada día que voy al mar a mirar las olas y dejar que me acaricien los pies le sonrió y susurro [Si te hubieras enamorado de mí, yo si te habría correspondido]

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