- Sara para ¡YA! - dijo Ayden con un tono de voz que jamás le había escuchado.
- ¡QUE ME SUELTES! SI NO QUIERE QUE LE SIGA DANDO DE HOSTIAS QUE SE VAYA DE AQUÍ.
-Que si zorrita que ya me voy, vete a que te folle tu novio que estás amargada - dijo mientras se levantaba del suelo con la nariz sangrando.
-Oye mira, que lo digas una vez vale, porque todos sabemos que lo haces porque no has conseguido lo que querías y porque darías lo que fuese con tal de ser su chico, pero ya te estás pasando así que si no quieres salir mal vete de aquí - dijo Ayden bastante irritado.
Eliot y Bella me sujetaban pero yo seguía lanzando puñetazos al aire.
- QUE TE PIRES IMBÉCIL, QUE TE VAYAS DE AQUÍ QUE NO QUIERO VOLVERTE A VER.
-Eres una zorra y lo sabes, por eso te enfadas tanto, porque darías lo que fuese para volver a estar conmigo, eres tú la que me necesita y la que me echa de menos - dijo tan seguro de sí mismo que daba arcadas.
En ese preciso instante vi que Álvaro recibía un puñetazo en la cara, no sabía de quién pero me alegraba de que ese puñetazo hubiese llegado justo ahora.
- Ahora coges y la vuelves a llamar zorra.
- ¡BEN! ¿Qué haces tú aquí? - dije con un hilo de voz.
Fui corriendo a abrazarle y él me cogió como si fuese un koala abrazándose al tronco de un árbol y me dijo:
- Todo está bien pequeña, no te preocupes por ese gilipollas que ya no te va a molestar más, de eso ya me encargo yo.
Y le besé con todas mis ganas, le besé como nunca había besado a nadie, era uno de esos besos en los que parecía decir "gracias, te quiero", ese era mi beso.
Me soltó en el suelo y siguió abrazándome tan fuerte que podía notar su pulso hacelerado y su respiración agitada.
