Te amo, no sé por qué, quizás sea por lo dulce de esa mirada o
lo suave de tu piel, puede que por la pasión que provocan tus
besos, los cuales arrastran mi mente hacia otra dimensión. A
pesar de parecer el ser más frío, sé que intentas con cada una
de tus caricias decir
“Aquí estoy si me necesitas; sabes que te quiero y si no te lo
digo es porque me avergüenza”
Pero tranquila... entiendo tus caricias y las añoro más que
nunca. Ojalá supieras cuanto te extraño y el poder decir te
amo.