El camino a encontrar

268 25 2
                                    

- Ana debiste llamarme apenas sentiste peligro - exclama preocupada al verme en ese estado.
- Perdóname, Victoria - le respondo aún muy conmocionada - pensé que podría llegar - me caían las lágrimas- no confíe 100% en mi instinto y pensé que estas cosas no pasaban en Europa.
- En todos lados pasan - respondió con amargura -, solo que acá es más peligroso ¡Dios gracias que apareció ese ángel y te ayudó!
-Sí, necesito agradecerle,- digo mientras empiezo a revisar mis bolsillos buscando la tarjeta que me dejó con su número de teléfono-  ¿Dónde quedó la tarjeta?
- La tenías en el bolsillo de tu pantalón - me dice mientras me prepara un té para calmarme.
- La tengo que haber tirado sin querer -  Al buscarla me di cuenta que la boté junto a otros papeles con los nervios -  no podré agradecerle en persona.
Quedamos en qué no le diríamos a nadie, ni a mis padres, porque sino viajarían en el primero vuelo y me llevarían de vuelta a Santiago, lo último que quiero es un fracaso como este.

Los días posteriores a este incidente salíamos juntas con Victoria, compré un electroshock y gas pimienta, me aprendí el camino a casa y lugares más seguros para salir a trotar.

Comenzaron las clases y la diversidad de culturas era increíble, cada vez me gustaba más la idea y más aplicaba en cada ramo que se me iba presentando, logré conseguir trabajo en un Starbucks del centro, medio día y fines de semana completo para tener dinero para gastos varios. Hacía videollamadas cada dos días con mis padres para contarles como iba todo, ni padre me examinaba casi con un scanner por la cámara buscando algún motivo para venir a buscarme. Mi mamá orgullosa me contaba que en su trabajo todos sabían de mi, que estaba en Londres, mis hermanos con sus gestos "especiales" me demostraban que me extrañaban pero no tanto...típico de hombres.

Todo iba tranquilo, ya habían pasado seis  meses desde que llegué, estaba entre las primeras de las clases y comencé a buscar información respecto a otras carreras que estudiar, me quería asentar en Londres y buscar un trabajo estable. Victoria también pensaba quedarse conmigo cuando termine la beca, estamos juntando dinero para arrendar en alguna parte después y quedarnos acá.

Muchas veces pasé por aquel callejón, los primeros días me daba pánico y tiritaba, sudaba frío pero a medida que pasó el tiempo lo superé, nunca más encontré información de aquel hombre que me ayudó esa noche pero estaré eternamente agradecida que haya aparecido y me salvará de lo peor.

Debido a mi excelente desempeño escolar, me ofrecieron extender la beca y estudiar otra carrera, tenía pocas opciones pero al final me decidí por Literatura inglesa, así tendría muchas opciones para ejercer en alguna universidad o algo parecido.
-Mamá, me ofrecieron otra beca para estudiar otra carrera - le anuncié con alegría
-Te felicitó hija, sabía que lograrás mucho - me dice mientras sus ojos irradiaba orgullo pero también nostalgia de tenerme tan lejos - eres la mejor
-Estoy feliz, estudiaré Literatura - le comento con felicidad y seguridad por la desicion que tome - es una gran oportunidad.
- Me imaginé algo con lectura, siempre te gustó mucho leer.
- Si mamá, pero eso implica quedarme más tiempo acá en Londres - la miro esperando su reacción - no volveré pronto.
-¿Cómo es eso?-  preguntó, se escuchaba algo molesto-  ¿No volverás para navidad?
- Papito, trataré de viajar - le digo algo preocupada, sabía que esperaba verme para la fiestas de fin de año -, pero no es seguro, quiero aprovechar esta oportunidad de estudiar.
- Te extraño, mi niña -  admitió algo triste, su miraba estaba un poco apagada -,me enorgullece todo lo que has logrado.
-Te amo, papá. Espero verlos pronto-  me corrían las lágrimas -, los extraño mucho, pero está oportunidad es única y no puedo dejarla pasar, se que entenderán.

A medida que pasaba el tiempo, se terminaban las clases y comencé a tener menos carga estudiantil por lo mismo pedí más tiempo en el trabajo, tenía poco tiempo libre y casi ni salía de la casa, a veces con Victoria salíamos de fiesta hasta que se enamoró de un inglés muy guapo y comenzaron una relación muy linda.

Yo nunca me quise fijar en alguien, estaba bastante traumada después de mi incidente aunque hayan pasado varios  años, eso seguía vivo en mi vida y no confiaba en nadie. Y con la diversidad de gente, tenía más amigos gay que nada y mi círculo cercano era de confianza, en mis ratos libres en fiestas pude viajar por parte de Europa, conocí varios países y me empapé de cultura y paisajes soñados que solo veía en libros, cada vez amaba más lo que estaba haciendo.

Llegó el 2017 y yo cada vez estaba más entusiasmada con el inicio de clases, comencé a prepárame y como era algo nuevo pedí rebaja de horas en mi trabajo para dedicarme a estudiar más.
Victoria cada vez más enamorada también comenzó las clases pero se fue a vivir con su pareja así que quedé sola, un día mientras corría me pareció ver a ese hombre que una vez me salvó la vida pero no logré alcanzarlo, corría demasiado rápido y no pude seguirle el ritmo solo que ahora corría junto a su mascota, hasta que un día lo ví en mi trabajo...

mi alma gemelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora