La protegida de Slender - Proxys y Tu -

Cap. 6

Comenzamos a caminar rápidamente por un largo camino, ya se estaba haciendo de noche, así que cuando llegamos a una pequeña ciudad comenzamos a ir con calma, ya que no había tanta gente en la calle, seguimos caminando hasta que comencé a reconocer las calles y sin darme cuenta estaba acelerando el paso y caminando más rápido que Tobby y Masky, cuando de repente.

- Aquí es...- dije frente a mi casa, que tenía las luces del interior encendidas mi cuerpo comenzó a temblar.

-Vamos ___ tú puedes, nosotros estaremos contigo si es que algo sale mal- dijo Tobby colocando su mano en mi hombro como forma de darme más confianza.

-En el momento en que te toque entraremos, así que no te preocupes - dijo Masky con tono serio, como siempre.

Decidida me adentré por el jardín de la casa y cuando llegué a la puerta principal me di cuenta de que no estaba cerrada, así que la empujé despacio hasta entrar y apenas entré vi a mi padre, el imbécil estaba durmiendo en la mesa junto con diez botellas de ron, rodeándole. Camine hacia donde estaba y golpeé la puerta lo más fuerte que pude para que despertara, y en el momento que lo hice el levantó la cabeza.

- Hija... que gusto verte... ¿en dónde estabas? - dijo asquerosamente balbuceando con voz ronca.

- ¡Yo, maldito miserable no soy tu puta hija! - dije alzando la voz para escucharme más firme.

- Oh... ya veo... la pequeña perra se va de la casa... para cogerse a cualquiera... y luego volver acá para arruinar mi vida... de nuevo... eres igual a tu madre ___ ... una gran zorra... ¡UNA PUTA ZORRA! - dijo acercándose a mi para luego alzar su mano listo para golpearme.

De mi corsé saque el afilado y limpio cuchillo de Masky, me acerque a el e hice presión en su costado, observé su cara cambiar de una sonrisa malvada a una sorprendida y con miedo al sentir la punta del filo en su cuerpo.

- No vuelvas... a nombrar a mi madre con tu sucia boca - dije apretando mis dientes y haciendo más presión.

- ____ por favor, lo lamento, hija escúchame por favor perdóname... - dijo con voz alterada y temblorosa.

- ¡QUE NO SOY TU PUTA HIJA, MIERDA! - la ira se estaba apoderando de mi mientras el grito desgarrador de mi padre me hizo darme cuenta de que el cuchillo ya se estaba introduciendo en su costado y por lo tanto comenzando a brotar sangre de este. - Eres un hijo de puta... jamás sabrás lo que me arrebataste... pero ya que estamos en estas circunstancias voy a hacerte saber un poco del dolor que estoy sintiendo en este momento... -

Dije sin poder controlar la furia ya apoderándose por completo de mi cuerpo, saqué el cuchillo que ya estaba la mitad enterrada en él, y volví a introducirlo, pero ahora en su brazo, él con un grito de absoluto dolor cayó al suelo y yo me senté arriba de el para sacar el cuchillo de nuevo y enterrarlo nuevamente en su pecho... Sus gritos... su cara del inmenso dolor que le provocaba cada acuchillada... su sangre brotar y luego saltar en mi cara y en mi ropa... todo era lo que más quería desde que era pequeña... darle a mi padre un poco de todo el daño que nos había provocado a mí y a mi pobre madre.

- Mi madre jamás... JAMAS va a ser digna de ser nombrada en la boca de nadie, y tu pedazo de mierda morirás sabiendo que tu hija a quien dañaste durante toda su vida, ahora te esta asesinando y luego humillara tu asqueroso cuerpo frente todo el pueblo - dije apuñalándolo aún más fuerte con cada palabra que decía.

El cuerpo de mi padre ya no mostraba señales de vida, y de repente sentí la puerta abrirse, eran Tobby y Masky, sorprendidos con tal escena... el cuerpo de mi padre lleno de agujeros y yo arriba de él, llena de sangre.

- Te... estabas tardando así que pensamos que... - dijo Masky aun mirando la escena.

- Pensamos que te había pasado algo, pero parece que supiste llevarlo de maravilla - dijo Tobby con una sonrisa y también sorprendido por todo lo que estaba observando.

Mire a Tobby y le sonreí, luego me puse de pie, agarre de un brazo a mí ya muerto padre para comenzarlo a arrastrar fuera de la casa dejando un rastro de sangre, Tobby y Masky me seguían, deje a mi padre a mitad de la calle y con su sangre escribí en el suelo "Mataré al que lo toque, dejen que se pudra".

-Bien... ya terminé, podemos irnos - sin mirar atrás comencé a caminar de nuevo adentrándome en el bosque mientras ambos chicos me seguían el paso.

Cuando llegamos me fui a bañar y luego me encerré en mi pieza, necesitaba descansar de todo lo que paso hoy, poco a poco fui cerrando mis ojos hasta dormirme por completo.

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Los llantos de la pequeña ___ se hacían cada vez más fuertes, se encontraba en el comienzo del bosque, recargada en un árbol, cuando de repente escucha el crujir de unas ramas a unos cuantos arboles más lejos de donde ella se encontraba, ___ intrigada por averiguar qué era lo que había escuchado comenzó a acercarse al lugar de donde provenía el sonido.

-Hola... ¿Como te llamas pequeña? - dijo una voz grave detrás de ella.

___ se dio vuelta para ver quien era y cuando lo hizo, un hombre, muy alto, de traje y rostro blanco, ___ sin ninguna expresión de miedo le sonrío al hombre.

-Hola, soy ____ - dijo la hermosa niña. - ¿Y tú? ¿Cuál es tu nombre? -

-Todos me conocen como Slenderman, pero tú puedes llamarme Slender, ¿Dónde...están tus padres? - la sonrisa de ___ desapareció.

-Mi padre le está haciendo daño a mi madre, ella me dijo que saliera un rato a pasear... ¿Y tus padres? - dijo inocente la pequeña, se escuchó como Slender soltó una pequeña risa de ternura.

-Yo no tengo... pero si quieres me puedes hacer compañía un rato - ___ asintió contenta y Slender de la mano la llevó a pasear por el bosque.
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