🍎Capítulo 3🍎

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Preserved Flower

Cuando me enteré de mi triste destino, del porque mi padre quería grabar mi nombre por todo el mundo y porque siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás era mi cumpleaños número 22.

Durante la celebración mi padre solicito hablar conmigo a solas después de cantar en la feliz cumpleaños para mi. Me llevó al despacho y solo estaba una lámpara prendida emitiendo una luz tenue; me sentó y él comenzó a caminar de a lado a otro. Un dolor en mi estómago me indico que algo andaba mal y mis manos comenzaron a sudar, papá no podía no pronunciar ni una sola palabra, sus labios temblaban, también sudaba frío y su mirada hacia mi era de pena, tristeza y mucho arrepentimiento.

- Papá ¿Que pasa?-

- Yo... Yo tengo que decirte algo- Pronunció nervioso

Escuche un bufido de molestía que no provenía de mi padre así que me puse en alerta.

- Dile de una buena vez Kano, el retrasarlo no cambiará el final solo me haces perder mi tiempo. Tengo más almas que recoger- Mostrando una peculiar y siniestra sonrisa

Esa voz yo la conocía muy bien pero no sabía de dónde provenía, mire por toda el despacho hasta dar a la oscura esquina detrás de mi padre. Ahí estaba él con sus ojos amarillos y en su rostro estaba la sonrisa más tétrica que yo hubiera visto dejándome así totalmente helada y desconcertada.

- Perdón ¿Más que?- Dije tratando de procesar la información

- Es uno de mis tantos trabajos cariño ¿No sabías?-

- Okey- Aún pasmada - Entonces... ¿Ofreciste tu alma? ¿Que pasará con nosotros? Mamá se volverá loca-

Soltó una risa burlesca - ¡Oh no! No no no cariño, tu padre es un cobarde, mira te explicaré-

- ¡Cállate! Se lo diré yo-

- ¿Que está pasando?- Dije con temor mientras me levantaba de mi asiento - No importa quién me lo diga ¿¡Que está pasando!?- Retrocediendo unos pasos

- Vuelve al asiento cariño, por favor- Tomándome de los hombros para sentarme de nueva cuenta y entregarme un ramo de flores compuesto por Peonías Rosas y Dalias violetas - Feliz cumpleaños mi pequeño botón de flor- Besándome la mejilla

Recibí el ramo aún sin comprender que es lo que estaba pasando cuando sentí sus labios en mi piel logrando acelerar mi corazón - Son las más bellas que me haz dado pero...-

Interrumpió mi voz con un pequeño shh - El significado es aún más bello. No temas, no a mi porque solo debes recordar quién te ayudo, quién te comprendió, quién te ofreció y te ofrece lo mejor por el resto de tu vida y tu otra vida... Lo cual me lleva a decir que ya no falta mucho para que llegue tu final- Soltó de manera hostil

Me giré a verlo perpleja - ¿Que? ¿De que estás hablando?- Pero él veía a mi padre que nos observaba confundido ante tal confianza que nos teníamos - ¡Respondan! ¿De que está hablando?-

- ¡Hey Kano! No me mires así, tú me obligaste a venir- Chasqueando los dedos para llamar la atención de mi papá - TU estabas maltratando mi mercancía, le estabas haciendo daño y eso sí que no lo iba a permitir, no señor-

Oír esas palabras me quebró el corazón - ¿Tú qué?- Dije con espanto y decepción pero parecía ser invisible para los dos hombres que estaban enfrente mío

- ¡Ese no era el trato! Rompiste el acuerdo-

Tomo a mi padre del cuello con tal fuerza que parecía que se lo iba a romper - No te atrevas a decir que rompí el acuerdo, cobarde- Estrellando a mi padre en la pared aún sin dejarlo respirar - Porque tampoco era parte del trato drogarla y ofrecerla a los cerdos de tus conocidos-

- ¡Papá! Basta, sueltalo-

- Después de lo que te hizo ¿Aún lo llamas papá?- Aventando lo hasta el otro lado de la habitación - Tu mi pequeña escoria me entregarias algo en buen estado no un cuerpo cuya alma lo abandono antes de que ¡Yo viniera!- Golpeando el piso justo a lado del rostro de mi padre

SWEET SACRIFICEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora