El nuevo del curso- ArgChi

3. Le decían el sincero

Narra Manuel

El mes de marzo pasó volando, ya era la última semana y el frío se empezaba a hacer presente en la capital. La señora Tiki (señora porque me parece desubicao' tutearla, no porque se vea vieja) me empezó a pagar a diario, mi mamá sospecha de su esposo y el porque me viene a dejar a la casa, pero la intento calmar con que el pre universitario viene con transporte agregado, no me la creo ni yo, pero, de alguna forma funciona y se lo cree. Mi mamita a veces peca de inocencia.

Había ahorrado lo suficiente como para invertir ese dinero en dulces y empezar a vender en el colegio, dividí mi sueldo en dos, una mitad para comprar los productos y otra para el arriendo. Creo que esta funcionando, no es mucho, pero, de a poco podré lograr mi objetivo. Con el Rucio nos habíamos hecho un poco más cercanos...es que ese weón igual es raro, es demasiado sentimental y a mí me gusta demasiado el webeo. Lo enviaron a la inspectoría la semana pasada por quebrar una ventana de la sala por andar jugando a la pelota dentro, yo le dije, "te van a retar" no me hizo caso y ahí quedo el weoncito, suspendido por tres días y llamaron a su mamá. Bien buenamoza la señora no les voy a mentir tampoco, ¿tenía un parecido con la queen cecilia bolocco?, de joven eso sí. Tenia cabello rubio largo, ojitos claros y era bastante alta. El Martín se la echó conmigo por andar poniéndole ojo a su mamá, pero ya se le pasó. Si uno no se puede enojar por tener una mamá linda poh.

Los turnos de la florería me tenían cansado, tenia que andar tomando antialérgicos a diario porque o si no atendía a los clientes con todos los mocos colgando. Las flores son hermosas, pero por amor propio, prefiero no andar oliéndolas.

El Arthur andaba medio misterioso desde -eso- pero yo no quería decirle nada, si no es mi amigo tampoco, es mi profesor y si me ando poniendo tontito las cosas se van a volver extraña.

Eran las 5:30 am y aun la Tiare no me mandaba un mensaje para irnos juntos, ¿estará bien?

el suelo de mi pieza estaba lleno de calcetines y ropa interior... no la había ordenado por falta de tiempo hace semanas, en cualquier momento se me aparecía una araña. Pateé un cerro de ropa que no me dejaba abrir la puerta y salí al living

Estaba mi mamá y el Antonio tomando desayuno en completo silencio, tomé una taza de la cocina, abrí una bolsa de té lipton y la deposité en el agua hirviendo. Me senté a su lado.

- Mamá- me miró. – voy a salir un poco mas temprano porque la Tiare aun no me habla y me dejo preocupao'

- Tu novia, Manuel? - preguntó Antonio

- No. Sabí bien que no lo es porque preguntai leseras? – dije mientras me preparaba un pancito para el camino

- Manuel, tranquilízate, de seguro no lo decía en mala tu papá

- Que alterado – suspiró fingidamente- yo solamente quiero intentar acercarme a ti pero tú tampoco pones de tu parte Manu...

- Ya, dale. Si soy yo el problema. - me levanté y empecé a meter mis cosas en la mochila para salir rápido antes de empezar a llorar. Me cargaba que hiciera eso, porque siempre que lo hace yo le creo. Y creo que podríamos tener una buena relación, que le puedo volver a llamar papá y luego me decepciona. Lo extraño mucho, pero querer tanto a ese weón me daña. Creo que no hay hombre que me haya hecho mas mal en todos estos años que él, mi papá.

Mi mamá me quiso detener, no le gusta que me vaya enojado, pero, el Antonio le dijo que me dejara solo.

Tomé mis cosas y pegué un portazo antes de irme, no estoy ni ahí.

Cuando llegué a la casa de la Tiare me di cuenta que no había ni rastro de que estuviese, aun así toque la puerta. No había nadie, el único que salió de la casa fue su perro.