La serie original y los personajes no me pertenecen, sólo los he tomado prestados para esta historia.La imagen de portada tampoco me pertenece. Los créditos a su correspondiente autor/a.
Esta es una historia Draal x Jim, si no les gusta esta pareja tienen la libertad de parar aquí y dejar de leer.
No se permite copia, traducción ni adaptación de esta historia sin mi consentimiento.
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Abanicó con la mano el polvo que se esparcia por el aire luego de limpiar el libro que sostenía, era inevitable que sucediera pero no por eso dejaría que se acercara a su rostro si podía evitarlo. No muy lejos de él Tobí seguía contando sus estornudos y si no mal recordaba ya había llegado a las dos cifras.
Hace un par de horas Blinky le había pedido ayuda para organizar los libros que tenia en su biblioteca, y aunque lo intentó, no pudo negarse, no porque un cazatroles no pudiera negar "él llamado" sino porque la decepción en la voz de Blinky cuando intento crear alguna excusa que lo excusase de semejante trabajo había estrujado su corazón. En su interior sabía que no estaba siendo un buen chico, así que rápidamente aceptó pasar ese día ayudandolo.
No tardó mucho en pensar que si él iba a ayudar a Blinky por supuesto que sus amigos lo acompañarian; todos ellos podían considerarse cazatroles, ya que conformaban un equipo estaba bien que todos respondieran el llamado y trabajaran unidos.
En cuando entró en la habitación pudo ver el desorden y la desorganización que reinaba en el lugar, también pudo notar para su completa desgracia que la cantidad de libros que había visto desde la última vez que había visitado ese sitio había aumentado. No podía mentirse, por un berve momento casi se arrepintió de haber aceptado, pero ya era demasiado tarde para hacer cualquier cosa, había dado su palabra y no podía echarse atrás.
Antes de comenzar se dio cuenta de que la manera que tenia Blinky para organizar las cosas les resultaba un poco confusas tanto a Tobí como a él mismo, trabajar por su cuenta sólo harian que las cosas se volvieran más caóticas y no serian de gran ayuda, por suerte ellos tenían a Clara que no sólo era más lista sino que se adaptaba rápido al sistema de organización de Blinky. Así bajo el mando del troll y la humana el resto sólo debía encargarse de sacar el polvo y mover las cosas según su comando.
Esa era la principal razón por la que intentaba alejar el polvo de sí mismo.
Al mismo tiempo que desempolvaba los libros los miraba por encima, sólo veía las formas de las portadas, de que color eran o si tenían algún dibujo en ellas porque hace bastante tiempo que se había rendido en intentar entender de que se trataban. A diferencia de Clara que tenia una comprensión del idioma o al menos que sacara el amuleto para traducirlo él no podía leerlo, porqué iba a esforzarse por algo innecesario. Además no había venido para eso está vez, verlos por encima ya era lo bastante bueno y lo fue hasta que uno de los libros de entre el montón hizo que se detuviera y le prestara su completa atención.
Lo llamativo de la portada del libro no era porque fuera algo que nunca hubiera visto, era llamativo porque le resultaba familiar. ¿Porque cuál era la probabilidad de haber encontrado algo humano dentro de esa marea de material troll y que dicha portada mostrara nada menos que la imagen de una princesa dentro de una torre siendo custodiada por un feroz dragón?. ¿Porque Blinky tendria este tipo de libros de entre todas las variables?.
Quería preguntarle al respecto pero al levantar la mirada para buscarlo lo encontró hablando con Draal. No tenía idea de cuando era que había llegado pero si el troll no actuaba con cuidado terminaría atrapado allí junto con ellos, rió en voz baja de sólo imaginar la excusa con la que intentaría largarse. De todas formas ya que no podría preguntarle a Blinki sobre lo que quería saber volvió la mirada al libro y lo abrió, para su fortuna el texto estaba en su idioma y podría leerlo.
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Cuento de hadas.
RandomUn simple favor a Blinky se convirtió en una situación inesperada.