Off Cam || Michaeng

Stick Together.

Chaeyoung tomó un mechón del cabello de Mina, jugando con el en sus manos. Mina estaba hipnotizada viéndola, su corazón comenzó a calmarse al estar acostumbrándose a la cercanía de la menor. Se escuchaban únicamente las respiraciones mezcladas de las demás, los ruidos del paso de los vehículos filtrándose, y la lluvia desquitándose con la noche, chocando con el techo y costados del vehículo.

Mina sentía el movimiento de su cabello gracias a las manos de la menor, que estaba concentrada apreciando cada cabello, un tanto extraño; pero algo que se convertiría en un hábito para la más baja.

Los ojos de la japonesa estaban perdidos en la menor, estaba absorta en su rostro. Casi contando las respiraciones de la menor y haciendo de las suyas bailar al mismo ritmo.

Solamente ellas dos estaban despiertas, pero casi ausentes del lugar.

— Luces cansada. — Aportó Mina, susurrando aún más si era posible, no quería cortar el aire con su voz.

— Tengo un poco de sueño, dormiré al llegar. — Respondió. Sus ojos se estaban cerrando y sus manos se movían cada vez menos.

— ¿Cuánto falta para llegar?

— Solo unos minutos. — Su voz se escuchaba como la de una niña pequeña al disculparse por comer dulces sin permiso.

— Jihyo me contó que ayer durmieron hasta tarde... — Dijo Mina, sin mencionar que ella también cayó dormida hasta tarde por estar pensando en la chica que estaba a su lado.

— Oh, sí. Dahyun se está atrasando por estar yendo a la agencia y no podemos pasar de largo al verla hasta tarde terminando sus trabajos.

— Entiendo... ¿Hoy deberán hacer más? — Cuestionó.

— Síp. Ya casi vienen sus vacaciones por lo que podrá descansar más. — Respondió, arrastrando sus palabras.

— Tú deberás unirte el año que viene, ¿cierto? — Chaeyoung asintió.

— Seré un desastre. — Rió la menor, recibiendo la mirada confundida de Mina. — No puedo despertar fácilmente, terminaré retrasándome siempre. — Explicó.

— Ohhh — Alargó Mina, pensando en eso. Probablemente tenía razón, ella ya había notado que Chaeyoung despertaba muy difícilmente y si despertaba mal estaría de mal humor.

Mina pensó en que quizá podría volver a hacerles chocolate caliente al día siguiente, a ella le gustaría despertar con chocolate caliente, ¿por qué a las menores no les gustaría?

El silencio volvió a reinar y Mina dejó de sentir el toque en su cabello, dándose cuenta que ahora los ojos de Chaeyoung estaban cerrados, pero se abrieron al siguiente segundo. Mina se rió un poco al verla desorientada.

— Estoy entre dormida y despierta... — Vaciló Chaeyoung.

— Eso veo — Rió.

En unos minutos el vehículo estaba deteniéndose en su casa, Mina levantándose, a su pesar. Era la conversación más larga que tuvo con la menor y no quería que terminara, casi deseó que hubieran más retrasos en el camino pero también quería que la menor descansara; y entre más rápido llegaran a su casa, más rápido terminarían sus deberes y más rápido irían a dormir.

Las demás se despertaron al escuchar la puerta ser abierta por la menor, quizá debieron despertarlas antes.

La noche estaba silenciosa, todas cansadas y sin ganas de mantener una conversación. ¿Quién creería que ser idol era así de cansado? Y eso que apenas estaban comenzando.

Todas entraron con rostros cansados pero con una energía relajada, se sentía bien saber que estaban logrando su sueño.

Mina se dirigió a su habitación, encontrándose a Sana, Jihyo y Nayeon, con quiénes compartía dormitorio. Jihyo decidió ser la única en tomar una ducha antes de dormir, las tres menores se encerraron en su habitación a seguramente hacer trabajos, mientras que las demás cayeron rendidas en un sueño profundo.

Al día siguiente despertó con energías renovadas, esperó a que fuera el momento y preparó chocolate para las menores. Siguió la misma rutina del día anterior y los dejó cuidadosamente en su dormitorio.

Una vez en la agencia siguieron las mismas actividades del día anterior, agregando que las hicieron hacer ejercicio por la mañana. Salieron antes y para mala suerte de Mina, el camino a su casa fue corto y no estaba sentada al lado de la menor.

No estaba lloviendo, y aprovecharon para comer en su casa. Siguiendo instrucciones de sus managers.

— Siento que esta semana está siendo la peor. — Habló Momo.

— Nunca tan same — Siguió Dahyun.

— Y solamente vamos por el segundo día. — Lloriqueó Sana.

Las tres uniéndose en su drama, pero las demás concordando con lo dicho.

Siguieron su plática mientras comían, Dahyun las abandonó primero para ir a su habitación a terminar más trabajos.

Estaba siendo difícil, pensó Mina, especialmente para las que estudian. Pero según tenía entendido pronto su agenda se acomodaría mejor y ya podrían asistir a clases periódicamente.

El día terminó y no pudo charlar con la menor, no hubo un avance ese día en la pequeña meta de Mina. Así que pensó en que las veces que ha hablado con Chaeyoung habían sido casualidades de la vida, ella realmente no se había acercado a la menor.

Pero de igual forma se apremió por dejarse llevar y no quedarse callada cuando estaba con la menor. A pasitos avanzaría.

Ya era viernes, la semana estaba por terminar, y Mina siguió la misma rutina de las mañanas, las menores salían de su dormitorio cada mañana con la bebida en sus manos. Iban de camino a la agencia cuando Jihyo decidió acercarse a Mina y hablar con ella.

— Eres tú, ¿cierto? — Preguntó en voz baja la líder.

— ¿Eh? — Mina no entendió.

— Dahyun me agradeció por dejarles chocolate, lleva haciéndolo desde que comenzó la semana. — Explicó. Mina sonrió, sintiéndose atrapada por cometer un crimen, aunque no lo era.

— Tal vez... — Rió.

— Eso es muy dulce, pero las chicas creen que soy yo.

— ¿Eso que tendría de malo?

— Es tu mérito. — Obvió Jihyo.

— No lo hago para que me agradezcan. — Mina terminó la conversación, centrándose en sus manos.

— Lo haces por Chae... — Susurró Jihyo. Mina volteó a verla horrorizada, notando que Jihyo veía hacia otra parte, totalmente ajena.

Mina pensó que quizá lo había imaginado, ya estaba escuchando cosas que no debía. Sacudió un poco su cabeza y apartó su vista.

No logró ver a Jihyo intentando ocultar una sonrisa.