Seducción [KnY x Male! Reader/ CANCELADA]

9

Un aura oscura cubrió a Asagao cuando fue rechazado por décima vez en la semana por parte de Kanae y por parte de Shinobu igual, sin duda la menor era quién tenía una forma más extravagante de herir al pobre chico de cabellos rosados, insultando cada vez que le veía coquetear con su hermana o con ella

— ¡Por los desamores! —exclamó el chico de cabellos rosados con una botella blanca en sus manos, los 'pilares masculinos le miraron fijamente

— ¿No se supone que un niño no debería tomar alcohol? —preguntó confundido Uzui mirando fijamente al de cabellos rosados

— Los niños no deben tomar alcohol —habló tranquilamente el pilar de la roca y, justo en el momento en que iba a arrebatarle la botella al de cabellos rosados este se echó para atrás y bebió todo el contenido de golpe

— Oye, oye. Amigo, está bien que te haya rechazo un par de veces, pero no seas tan cruel con tu cuerpo —habló preocupado Uzui— ¿Por qué ustedes no le dicen algo? —preguntó el de cabellera albina

— Eso no es alcohol —Sabito se llevó la mano al puente de su nariz y frunció el ceño

— ¿No? —preguntaron ambos pilares que no conocían bien al chico

— ¿Entonces que es? —preguntó el azabache de cabellos cortos y tomó la botellita en las manos del joven llevándola a su rostro

— No aspires el aroma —advirtió Tomioka y el azabache alejó su rostro—. Es afrodisiaco

— ¡¿Qué?! —preguntaron ambos

— Ahora va a estar como gata en celo —frunció el ceño Sabito y miró las mejillas sonrojadas de su amigo el cual se arrastraba a él con una sonrisa en su rostro

— ¿No deberían controlarlo? ¡No es bueno que tome esas cosas! —habló el albino llamando la atención del chico sonrojado el cual se levantó y se lanzó a sus brazos

— Ten~gen~chan~ —habló coquetamente el de cabellos rosados— ¿No te gustaría~...? —Sabito noqueo a su amigo

— Fin de la historia, nos lo llevamos —habló el de cicatriz en la mejilla mientras que Giyu miraba fijamente a sus amigos

— ¿Qué acaba de suceder...? —preguntó algo incomodo Gyomei

— Ni yo lo sé —habló escéptico Uzui

Un día después, el de cabellos rosas estaba como si nada y reía por cualquier cosa, los pilares aceptaron que era un sujeto muy extraño

El de cabellos rosas iba tarareando una suave melodía de su anterior vida y caminaba con los brazos detrás de su cabeza, Gyomei estaba tranquilo a su lado, ambos habían realizado una misión en conjunto para que Asagao le mostrase como se debía actuar en situación de peligro y demás

El Himejima estaba sorprendido, si bien el joven a su lado era menor que él, poseía una habilidad innata con la espada y una fuerza abrumadora, contra ese demonio de complejo nivel ni siquiera tuvo que moverse un centímetro y ayudar al de cabellera verde antes de que él terminara con el demonio en sus narices, podría ser muy despreocupado el joven, pero solo era en situaciones que no eran complejas, Gyomei se dio cuenta que no había que subestimar al chico o sería un gran problema

Cuando terminaron la misión, el de cabelleras rosas se fue con el de hebras albinas para realizar esa misma experiencia que con el azabache, Uzui no podía estar más sorprendido que el pequeño niño endeble a su lado terminara con tal magnitud de demonio y fuera tan simple como el jugueteo de un niño, era impresionante como él podía ser así de fuerte, pero tan despreocupado

Asagao sonrió feliz cuando terminó de familiarizar este nuevo nivel de pelea con los demás pilares, si bien la Kocho le había vuelto a rechazar durante absolutamente todo el viaje, estaba feliz, al menos no había salido dañada de ningún ataque de ese demonio con una fuerza abrumadora

Los meses fueron pasando y los pilares ya estaban a la constante coquetería del de cabellos rosados, era extraño no verlo coquetear con cuanta persona se le pasase por delante

— Tengen-kun~ hoy te ves más guapo que de costumbre —guiñó un ojo

— Tu igualmente te ves bien, A~sa~ga~o~ —canturrió el de cabellos plata

— ¿Eh? —el nombrado parpadeó varias veces y sus mejillas se fueron sonrojado cada vez más y más— ¡S-sí! Y-yo siempre me veo bien, por favor —intentó hacer una pose egocéntrica, pero solo le salieron tartamudeos en su sonrojo, Sabito vio una oportunidad para vengarse de todas esas veces que él era el que estaba sonrojado y sonrió malvadamente

— Es cierto, tienes algo diferente el día de hoy —Sabito se acercó al de cabellos rosa y lo abrazó por la cintura—. ¿Será que tienes un nuevo perfume? —preguntó acercando su nariz al cuello de Asagao que tuvo un escalofrío y sus mejillas se sonrojaron aún más— ¿O quizás un nuevo acondicionador? —el de ojos grises llevó uno de sus mechones dispersos a su rostro con suavidad— ¿Tal vez una nueva crema humectante? ¿Un cambio en tus sales de mar? —el de cabellos rosas estaba hecho un tomate con patas, Sabito apretó un poco más su cintura

— ¡S-í! ¡L-lo n-notaste! —intentó hablar fluidamente— ¡M-mi p-perfu-rume l-lo cab-ie p-por uno d-du-ce —habló trancado saliva y pronunciando mal algunas palabras, intentó alejarse de Sabito el cual sonrió de lado y miró a Giyo el cual asintió y se acercó

— ... —con suavidad el azabache de coleta acarició la mejilla del de cabellos rosas y elevó el flequillo que tapaba la parte izquierda de su rostro, Asagao estaba completamente rojo y sus ojos abiertos de par en par, sus labios entre abiertos de un suave color rojizo llamaban la atención, pero lo que más hipnotizaban al azabache eran los ojos del hombre— Tus ojos son preciosos —murmuró suavemente—. Son como dos gemas de distintos colores, azul y verde, una perfecta combinación armoniosa con tu cabello —Asagao no pudo más y sus ojos se volvieron espirares mientras que humo salía por sus orejas

— ¿Crees que nos pasamos? —preguntó Sabito mirado como el pilar de la seducción estaba totalmente desmayado por las palabras de Giyu

— La venganza se sirve en un plato frio y es tan dulce como deliciosa —habló Giyu mirando al chico desmayado en sus brazos, lo dejó caer

— Amigos... creo que se pasaron un poco —Uzui miró como el de cabellos rosados estaba inconsciente, entonces le picó la mejilla— ¿No está muerto, verdad?