Seducción [KnY x Male! Reader/ CANCELADA]

11

El de cabellos rosados inhaló y se desconectó del mundo; no podía seguir escuchando la evangelización del albino mientras el honorable Oyakata-sama se despreciaba a sí mismo; dejándose entre peor que el polvo que pisas inconscientemente. Realmente no podía seguir escuchando como aquel hombre de corazón tan puro podía auto despreciarse de forma tan hiriente, pero a la vez realmente tener un odio tan grande por Muzan Kibutsuji, no podía creerlo, le costaba asimilar que él en realidad estaba totalmente lleno de odio.

—Él quería que sobrevivieras —habló por último el azabache dejando que Sanemi llorara por la carta de su amigo.

Minutos después, el de cabellos rosados se tranquilizó completamente e hizo como si no hubiera sucedido nada con Sanemi, cuando la reunión terminó él fue donde el albino que miraba perdido la carta en sus manos, se sentía tan desorientado.

—Debes calmar tu corazón —habló suavemente Asagao—. Todos hemos sufrido pérdidas, sé que no es fácil asimilar un crimen tan grande como el arrebato de una vida, pero es por eso que nosotros luchamos para que no se sigan arrebatando, para que se salven la vida de los que no se pudieron defender —habló suavemente y tocó su hombro con ternura—. Aunque duela, debemos seguir adelante una y otra vez, no importa las veces que hemos de caer.

—... —Sanemi con lágrimas en su inexpresivo rostro le miró.

—No te puedo decir que los olvides, sino, que recuerdes los momentos más importantes con ellos y así no morirán, seguirán vivos en tu corazón, en tu mente y recuerdos —Asagao se puso enfrente del albino y tocó su mejilla con tanta ternura y amor que Sanemi sintió ganas de llorar nuevamente—. Sigue adelante pisando lo malo y apóyate e impúlsate en los buenos que has vivido, no llenes de tanto rencor tu bello corazón. Cuida de quienes amas como si los fueses a perder el día de mañana —Asagao limpió las húmedas mejillas del cicatrizado—. Vive en el presente y piensa en el futuro, no dejes que los que te aman y amas sufran por culpa de tus actos, aprecia cada momento, vívelo y ríe con fuerza en cada momento de felicidad, luego verás el pasado y reirás por lo que sufriste, no te quedes atrás.

Asagao se fue del lugar dejando a Sanemi parado sin saber que hacer, pero pensando profundamente en las palabras de quien se había osado a pararse enfrente de él y decirle cosas tan dulces aun cuando él había insultado de manera atroz a alguien que parecía ser muy importante para el de cabellos rosas.

—Giyu... —Sabito miró al nombrado el cual asintió y ambos pasaron de largo por el albino y fueron donde su amigo coqueto, estaba actuando demasiado raro, está bien que se enfadara porque insultaron a Oyakata-sama, ellos se sentían igual, pero ese no era el amigo a quién ellos conocían, era diferente.

«¡Maldición! Mejor me voy a visitar a Nii-san.» pensó el de cabellos rosas y salió del lugar, escapando a toda velocidad hasta que minutos u horas llegó a una casa promedio en donde se encontraba un azabache mirando con suavidad como las hojas de los árboles se movían con suavidad.

—Nii-san, eh llegado —habló suavemente Asagao haciendo una pequeña reverencia.

—¡Dios santo niño! ¡Casi me matas del susto! —habló con el corazón en el pecho.

—Lo siento —sonrió apenado.

—¿Qué sucede ahora? —levó una de sus cejas.

—Nada —apartó su mirada.

—Podré no utilizar más la espada, pero no estoy ciego —regañó suavemente y acarició los cabellos del -según él- niño.

—¿Por qué tus huesos no sanaron si tus heridas eran leves? —habló sin mirarlo, el azabache suspiró y decidió dejar el tema

—¿Sabes Asagao? Yo era un hombre fuerte, capaz de convertirse en pilar cuando quisiera, incluso a tan corta edad como la tuya. Pero a pesar de que mis técnicas eran fuertes y casi invencibles, nací con una enfermedad a los huesos que me debilitan cada vez más y más, cada año mi cuerpo se vuelve un poco más débil —una sonrisa surcó en sus labios y una mirada triste miró el cielo—. Tengo una extraña enfermedad llamada enfermedad de Paget en el hueso. La enfermedad de Paget en el hueso hace que mis huesos crezcan demasiado grandes y débiles, también pueden fracturarse con demasiada facilidad, también puede traer enfermedades como la artritis y pérdida de audición, como la vida de me ama, también se están presentando esos síntomas. La enfermedad de Paget afecta principalmente a la columna, la pelvis, el cráneo y las piernas, pero a mi me afecta en los brazos y la pelvis, esta enfermedad puede afectar a uno o dos huesos, pero no todo el sistema óseo.

—... —el de ojos bicolor le miró asombrado.

—Je, creo que este joven hermano mayor en realidad salió con una muy mala fortuna —negó suavemente con una sonrisa sarcástica—. A pesar de que no debería afectarme tanto, la mía está extremadamente avanzada y es impresionantemente lo rápido que avanza, no ah existido nadie más que esta enfermedad se presente tan rápido y consuma tanto tus huesos, más en un trabajo tan pesado como lo es ser un cazador de demonios. Soy patético.

—... —Asagao abrió sus labios sorprendido y le miró con incredulidad, entonces sonrió cariñosamente y fue a donde el mayor y se sentó a su lado abrazándolo y apoyando su cabeza en el hombro del azabache— Yo no creo que nii-san sea patético, yo creo que él es genial —sonrió Asagao—. Hideo-niisan a pesar de que tenía una enfermedad tan complicada decidió salvar la vida de las personas aún si le costaba la suya, realmente nii-san es sorprendente.

—Asagao... —habló sorprendido, entonces cerró sus ojos y sonrió de lado— Ni creas que alagándome conseguirás una porción extra de dangos.

—¡¿Eeh?! —se quejó el de cabello rosa, entonces ambos se miraron y estallaron en risas.