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Aven Brooks

Siempre he tenido miedo de lo que no conozco.

Las nauseas era el único sentimiento que entendía en mi cuerpo en este momento. Mi mente estaba en blanco de pensamientos, mis extremidades no sentían nada. Estaba totalmente indiferente, pero lo único que pude descifrar fue la sensación de náuseas en mi estómago. Fue como una experiencia del cuerpo exterior, sentirme así. Mi alma se sentía como si estuviera de vacaciones y mi mente se quedó con una bolsa de huesos llamada mi cuerpo. Me sentí muerta, tal vez lo estaba. Tal vez en realidad no estaba conduciendo por una carretera larga y desierta con la radio sonando y el viento volando por mi cabello.

Quizás en realidad me mataron a tiros en esa gasolinera.

Lentamente giré la cabeza y miré a Harry en el asiento del conductor. El viento agitó su cabello en diferentes direcciones, sus ojos disfrazados con lentes de sol y en la carretera. Conducía con su única muñeca apoyada en la parte superior del volante, sentado quieto en su asiento.

No hemos dicho una palabra desde que salimos de la gasolinera hace media hora.

La radio que tocaba canciones interminables era la única distracción entre mi estado de ánimo vacío, pero incluso con eso no estaba escuchando.

Se veía pálido, su piel estaba un poco sonrojada.

Mis brazos estaban cruzados sobre mi estómago, mis ojos volvían a mirarme a los pies porque estaba demasiado nerviosa para mirar a otra parte del mundo. El mundo se sentía muy inseguro en este momento, era demasiado surrealista para que mi cerebro funcionara.

"Probablemente deberías intentar dormir, dejar de pensar en lo que pasó". Habló con calma por primera vez desde la escapada.

Mantuve mis ojos en mi regazo, mis brazos apretando mi estómago aún más fuerte. Me sentí tan mal que apenas podía pensar en otra cosa. No podía pensar en hablar, pero sé que dormir no era una opción.

Me quedé en silencio, mi cabello ondeaba suavemente con el viento.

"Necesitamos aclarar las cosas sobre lo que sucedió". Añadió, dado que estaba en silencio. "No planeé nada de eso".

Mi cabeza permaneció gacha, mis ojos se cerraron detrás de mis lentes. Sé que si estuviera en un estado mental diferente, tendría un sinfín de preguntas. Pero no podía sentir nada en mí en este momento además de náuseas, ni siquiera podía pensar en formar una oración.

"Aven". Dice de forma más asertiva. "Dime algo."

Vuelvo a girar la cabeza y lo miro, viendo cómo seguía mirando la carretera. Me quedé en silencio, mirándolo. Me di cuenta por el tono de voz que se estaba frustrando, simplemente no lo entendía. En realidad, estaba muy sonrojado, ¿iba a enfermarse?

"Vi a un hombre recibir un disparo y morir hoy". Hablé, mi voz se quebró mientras lo hacía. Casi olvido cómo sonaba después de todo este tiempo.

Se quedó en silencio en una pausa. De repente, vuelve la cabeza para mirarme, con los ojos ocultos detrás de las gafas de sol negras. No pude leer su expresión, las cortinas no ayudaban. Sus pómulos eran muy prominentes desde este ángulo, el viento agitaba su cabello rizado.

Se vuelve y vuelve a mirar la carretera.

"Estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado". Dice, girando a la derecha adelante. No parecía estar de luto por eso, pero supongo que no esperaba que lo estuviera.

"Era una vida humana". Susurro en defensa.

"Y ahora está libre de este infierno que llamamos tierra". Habló con frialdad. "Estaba trabajando en una gasolinera en medio de la nada, esos tipos probablemente le hicieron un favor de todos modos".

duplicity [h.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora