¿Estamos bien?

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La conversación que tuve el día de ayer con Lucy, me hizo volver a recordarte: Jason Caruso. No puedo sacarte de mi cabeza, Desde que te fuiste nadie volvió a saber de ti, ni de tu familia, no dejaste rastro de ti por ningún lado, solo preguntas, ¿Estarás bien?, ¿Cómo luces ahora?, ¿Acaso creciste?, Tengo mil trecientas dudas y menos de cero respuestas.

Tal vez se trate de otra persona y jamás vuelva a saber de ti. 

 La vida tiene que continuar.

Flashback

— Hoy Jason no fue a la escuela mamá — Dije un poco triste.

— Hoy había un camión de mudanza fuera de su casa, tal vez no fue porque se cambiaran de casa, No te preocupes mi niña, tal vez mañana sí se presente, ¿Te toco hacer travesuras sola?

— Jason y yo no hacemos travesuras, solo jugamos con lodo y ensuciamos un poco las paredes, pero no son travesuras, son accidentes que pasan, y no, no estuve sola, conocí a una niña nueva, su nombre es Lucy, ella es del salón de al lado, me compartió de sus dulces creo que seremos buenas amigas.

— Eso me da mucho gusto Julie, me alegro que hagas nuevos amigos. 

— Estoy segura que a Jason también le agradara, seremos como los tres mosqueteros. 

— De eso estoy segura — Contesto mamá dándome un cálido beso en la mejilla. 

5 días después 

— ¿Ya no volveré a ver a Jason? — Dije llorando.

— Claro que sí, cariño — Dijo mamá mientras me abrazaba — Solo que tal vez no en mucho tiempo, tal parece que se mudaron fuera de la ciudad, pero tranquila, puede que convenza a su madre a  venir en verano a visitarte, no estés triste, recuerda que la vida puede traerte muchas sorpresas, así como tu nueva amiga Lucy, ella me agrada mucho. Los motivos de la familia Caruso debieron de ser importantes para irse sin avisar, mientras tanto tu tienes que seguir con una actitud positiva, arriba esos ánimos, la vida tiene que continuar sé que Jason es tu mejor amigo, pero estoy segura que se volverán a ver.

Fin del Flashback

Hoy la biblioteca se encontraba más sola que un bikini en invierno, no había nadie más que el los dos gatos obesos de la señora Helena: Muchu y Tinky. Eran tan obesos que apenas podían caminar.

Mi favorito era Muchu, solo porque está mañana frotó su enorme barriga sobre mis pies y se durmió sobre ellos. Aún no tenía el placer de tener contacto con Tinky porque desde que llegue ha estado dormido, ¿Estará vivo?, ¿Si lo muevo se molestara?, Preferí dejarlo así. 

El silencio empezó a consumir el lugar lentamente.

Me gustaba el silencio y estar sola no me importaba mucho, no soy muy dependiente de las personas, pero eso no quiere decir que no me guste pasar tiempo con ellas, me encantaba, pero también pasar tiempo con uno mismo es reconfortante. 

Las horas se fueron tan lentas.

Dos horas.

Nada.

Tres horas.

Nadie, más que Muchu, Tinky y yo, con la misma energía de perezoso con 11 meses de embarazo.

Estaba a punto de dormir hasta que una voz me interrumpió.

— Estoy buscando un libro llamado "El Dircom del futuro y el futuro del Dircom", ¿Sabes si lo puedo encontrar aquí?, O ¿me puedes guiar a una sección con libros de comunicación?