C A P Í T U L O 24

37 3 0
                                    

╬━━━━❪ ❦ ❫━━━━╬

╬━━━━❪ ❦ ❫━━━━╬

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

╬━━━━❪ ❦ ❫━━━━╬

El frío de invierno invadía los hogares del pueblo y como de costumbre teníamos que ir a la iglesia a realizar el estúpido baile que nos comprometía sin que nosotras pudiéramos objetar. Ajuste el listón en mi cabeza y alise mi vestido refunfuñando.

─hola Dea─ salude al llegar a la plaza y causar controversias por nuestra similitud casi idéntica

─luces igual a mi─ aleja un mechón de pelo de mi cara sonriendo sínicamente ─ me pregunto si ese hombre tan horrendo te proponga bailar─ giré mis ojos ─ oh es cierto siempre te salva ese lobito, ¿Cómo se llama?

─Luke─ respondo seca buscándolo entre la gente con la mirada

─lastima que hoy no pudo venir─ abro los ojos girando a ver que ella ya no esta

El anciano de la otra ocasión procedió avanzar hacia mi con una sonrisa maliciosa hui pero el padre de la iglesia vio las intenciones del anciano y me aviso que se dirigía a mi cosa que por supuesto ya sabía.

─hija, ¿a dónde se dirige? ─ me obstruye mi huida del anciano

─iré a tomar agua, padre─ el niega cuando el anciano ya esta al lado de mi con una sonrisa y toma mi brazo

─¿me concede esta pieza hermosa dama?─ el padre me obligo a decir que si usando el pretexto de Sotirían, me queje marchando a la pista de baile con el señor y su copa en mano─ eres muy hermosa─ tomo mi mano apretándola─ de seguro tienes muchos pretendientes─ su vista delineo mi cuerpo y lamio sus labios ─ será una lastima─ su mano se alzaba poco a poco

─lo interrumpo─ la voz de Jaeden serio me tranquilizo e inmediatamente me lance a sus brazos ─ la dama es mía ─ nos retiramos lejos del señor que no tardo mucho en mostrar su molestia

─soy Atena─ dije al comenzar a danzar entre la gente

─lo sé─ seguimos bailando hasta oír las campanadas y ver el hecho que ninguna persona había salido comprometida

─gracias─ digo al finalizar el baile apenada y con las mejillas rosadas

─si no importa─ fue con Dea que miraba con admiración e incredulidad la escena sonriendo y recibiendo con los brazos abiertos a Jaeden después de susurrarle algunas cosas

─admirable─ Salen el lobo que me cuidaba esta noche llego riendo ─ es una perra─ lo miró confusa y me hace volver a mirar y verlos besándose

─serían una lastima si me siguiera gustando─ se que me podía escuchar por la forma de detener tan brusco el beso causando una sonrisa por dentro le provocaba algo saber esa información

─¿es Noah?─ llama mi atención haciéndome prestar al chico castaño con una sonrisa adornada cuando me vio

─tal vez─ muerdo mi labio al ver a Dea sonreí al finalizar el segundo beso aunque no vi venir el que se acercara a mi

─hola─ me saludo sonriendo ─¿feliz?─ asiento cruzando mis brazos burlesca─ eres muy predecible cariño ─ bufo negando─ sin embargo me agrada saber todos tus movimientos─ arrugo mi ceño

─¿por qué lo dices?

─le aposte a Jaeden que dirías algo como eso ─ miré a Salen y Dea trono los dedos, y este reaccionó de inmediato, había sido hipnotizado ─recuerda, siempre obtengo lo que quiero─ me abrazo susurrando eso en el oído ─ me pregunto, ¿Cómo es posible que dejes a una niña a cargo de unos lobos tan estúpidos y tan fácil de hipnotizar?─ la alejo de un fuerte empujón

─te juro que si le haces algo a Eriza, te mataré ─ella rio cosa que más odiaba considerando que Erizo podría estar en problemas

─recordatorio,─ golpeo mi cabeza con su dedo índice─ yo jamás amenazo, solo actuó─ su sonrisa se amplió ─ gran diferencia ─corrí directo al bosque con Salen detrás de mi transformado en lobo

Cuando llegue a la reserva Eriza no se veía por ninguna parte donde la había dejado, el corazón amenazaba con salir por la boca y no importo cuan cansada estaba simplemente quería encontrarla.

Me detuve viendo a la niña llorar desconsoladamente aunque no sabía que era lo que lo provocaba solo la veía por atrás oyendo sus sollozos, me acerque y la abrace por detrás.

─¿Atena?─ preguntó en un hilo de voz limpiando sus mejillas─ dijiste que no me querías─ negué apartando su pelo pegado con lágrimas

─no era yo muñeca─ la cargo escondiendo su cabeza en mis brazos aprovechando que ningún lobo me seguía le hice mimos tan ridículos para que riera

─¿Quién eres?─ Dea apareció con el ceño fruncido─ Eriza, por favor Dea déjala en paz─ la niña en mis brazos la miró sorprendida

─¿Atena?─ la escondí de nuevo en mi cuello para que no la viera

─suéltala, por favor ─ imploró acercándose poco a poco con una sonrisa sínica ─ es una niña, Eriza ven─ la niña se movió incómoda en mis brazos─ si no vienes te hará daño, ella es la persona que te dije

─¿eres la gemela mala?─ negué al ver sus ojitos rojos por tanto llorar

─soy Atena creme yo....

─mentira─ me interrumpió, la niña se zafo de mis manos y corrió justo en medio de las dos decidiendo a quien apoyar ─ Eriza, yo soy la verdadera─ los ojos de Dea se iluminaron con un dorado en las pupilas ─¿me crees?─ asintió caminando a ella

─Dea,─ insistí viendo a la niña hipnotizada estar en sus brazos

─mátame─ la sonrisa de Dea era incluso más grande que las anteriores ─si la mató, ¿lo harás?─ asentí apretando mis puños ─mientes─ el tronido del cuello de Eriza resonó por todo el bosque espantando a los pocos animales que había cerca─¡ups!─ el cuerpo sin vida de la niña que trate de cuidar cayo al suelo

─eres peor que el diablo─ me derrumbe hacia el cuerpo

─sigo esperando a que me mates─ ella miraba sus uñas con superioridad

─te atreviste a matar a una niña pequeña,─ estiro mi mano liberando el humo rojo y rodee su cuello apretando lo suficiente para quitarle el aire

─suficiente─ murmura estirando su mano sacando un humo morado que me lanzo por los aires chocando con un árbol─ no fue tan difícil hacerlo─ se acerco a mí mientras yo todavía estaba en el suelo ─nadie antes me había retado, tienes mis respetos ─ levanto la mano liberando ese humo morado ─ aprenderás que es dolor─ la cerro prendiendo fuego al cuerpo de Eriza─ y hasta que te rindas y me des tu poder verás a toda la gente que te importa morir─ suspiró sin quitar la sonrisa en su rostro─ incluso si tengo que matar a Jaeden para lograrlo─ toca mi cara absorbiendo una vez más mi poder

─¡no!─ mis dos manos juntaron la suficiente energía como para aventarla lejos de mí

─¡basta!─ Jaeden y los demás Pénter llegaron observando el cuerpo de Eriza pulverizado por el fuego

Me sostuvo en sus brazos viendo mi cabeza sangrar debido al golpe contra el árbol, mi mano brillaba y sacaba el humo amarillo que cubrió el cuerpo de la niña con hermosas flores y de estas salían luciérnagas. Vi como una se paro en mi nariz y salió volando hacia el cielo sin estrellas.

คl๓αร  ℓเ๒єгα๔αร➳נαє๔єภ мαгtєllDonde viven las historias. Descúbrelo ahora