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Me encontraba caminando por el bosque como otro día cualquiera no sabía que hacía pero la curiosidad me ganaba, e incluso pensé que estaba loca por estar a tales horas de la noche en un bosque donde se han hallado cadáveres de jóvenes de mi edad, pero en fin mi curiosidad era mayor a mi temor.
Todo empezó cuando me dirigía mi casa por el viejo atajo por el bosque ya que se me había hecho tarde por quedarme platicando con una amiga de cosas realmente irrelevantes sin embargo eso no me trajo aquí si no un ruido o pisadas tal vez que me seguían y obligaron a cambiar de ruta corriendo hacia el bosque.
Aunque los libros de asesinos en serie son mis favoritos no quería ser parte de uno, pero aqui me tienes caminando por un bosque a mitad de la noche porque me perdí siguiendo a un lindo venado que cruzó mi camino ayudándome a olvidar a mi acosador.
—cuidado—dijo un chico de mi edad que no alcanzaba a ver tan bien como quisiera pero lo que pude notar es que era alto con piel demasiado blanca, sus ojos azules como el cielo pero lucían oscuros en la noche, su cabello era castaño oscuro, tenía una sus labios color carmesí manchados con una sustancia roja pero aunque se veía como un chico normal su aura me decía lo contrario
—lo siento—dije tímida bajando mi cabeza esperando su respuesta
—¿qué haces aquí?—lo miré asombrada por su voz tan gruesa
—me perdí—admití con tanta vergüenza que sentí mis mejillas tornarse rojas
—¿en dónde vives?—dijo serio agarrando mi mano para comenzar a caminar provocando en mí unos toques que erizan mi piel
"corre" pensé por un minuto"¿y si él es el que te perseguía?"cuando intente razón me encontraba en su auto
—Leípei, en la casa de al lado de los Williams—dije avergonzada por alguna razón ya que en mi pueblo la familia Williams era todo un misterio debido a sus hijos adoptivos
—me sorprende que tú estés en este bosque tan peligroso—dijo y arrancó el auto me sorprendí al notar que me conocía
—¿tu me conoces?—pregunto y lo miré quedando más sorprendida era él, Jaeden Martell, uno de los hijos adoptivos de los Williams
—tal vez—por alguna extraña razón mis ojos empezaron a cerrarse poco a poco quedando la oscuridad como mi visón
[...]
Desperté en mi cama con la misma ropa de la noche anterior pero aún recuerdo sus últimas palabras antes de perder la noción del tiempo
escucha con atención Atena
Tenía en mi mente demasiadas preguntas no entendía porque me había escogido o si tan solo era especial o solo eran mis conjeturas pero no había nadie que me conteste mis preguntas.
Me vestí para ir a la preparatoria con un vestido color azul celeste que llegaba a mis rodillas, este era de mangas largas pero el pecho lo tenía ajustado pero no demasiado, la parte de abajo solo era suelta como la mayoría de mis vestidos, mis zapatos eran una zapatillas blancas con un pequeño tacón, mi cara iba libre de maquillaje a excepción de mi labios que tenían brillo labial y el corrector que tapaba mis ojeras por el desvelo, mi pelo iba amarrado con un listón color azul cielo, a diferencia de mi primer día hoy no llevaba ningún otro accesorio.
—hola madre—besé su mejilla tomando una manzana—hoy me irá a dejar Millie—me dirigí a la salida pero mi madre sujetó mi brazo justo como los hermanos Williams la noche de la iglesia
—cariño—dijo de una forma dulce pero diabólica—nuestros vecinos rumorean que andas sin nuestro consentimientos con un chico llamado Luke Jones—me sorprendí por tal pregunta
—es una total falacia madre—dije nerviosa—solo somos bueno amigos—lo último lo solté con voz triste
—eso espero—me soltó—por cierto—me entregó una bolsa café—entregaselo a nuestro vecino—la miré extrañada—al jóven que te encontró desmayada en el bosque—asentí lentamente dirigiéndome a la salida
"¿desmayada?"yo no recordaba que me había desmayado pero en mi mente aparecía ese recuerdo aunque también aparecía en donde Jaeden me llevaba a su auto.
—hola Millie—salude todavía pensativa por lo de anoche
[...]
Había pasado la mayor parte del día y no había seña de ninguno de los hermanos Williams, en toda las asignaturas los maestros preguntaban por ellos pero nadie sabía.
Al término de el día escolar salimos por unos helados Millie y yo a una vieja cafetería llamada "Old memories", esa cafetería era muy famosa por tener fotografías de nuestros antepasados y por ello el nombre.
—buenos días mi nombre es Jeremy y hoy seré su mesero—dijo un chico de cabello castaño y un poco regordete llegando a nuestra mesa con su delantal con el logo de la cafetería que era un café con humo saliendo—¿saben que quieren pedir o le ofrezco el menú?—sacó una libreta junto con un lápiz
—a mi me puede dar una malteada de fresa con crema batida—sonrió Millie sacando su celular
—de acuerdo y tú...—me miró—dejame adivinar—asentí con curiosidad—un helado de vainilla con un poco de helado de fresa sin chocolate pero con chispas de chocolate con una galleta de complemento—asentí sorprendida
—vaya—solté sorprendida—¿cómo memorizaste todo eso?—pregunté con admiración
—solo lo recordé—se fue a preparar los pedidos perdiendose de mi vista
—creo que tu encanto va mejorando—la mire extrañada—creo que eres la única que no se da cuenta que eres perfecta—negué ruborizandome
—no soy perfecta y ni siquiera quiero serlo—escondí mi cabeza entre mi pelo—prefiero ser alguien que sea perfecta a su mirar no al mirar de los demás—sonreí
—lo ves eres perfecta—dijo Millie pero después dejó de verme para mirar detrás de mí
—necesitamos hablar—dijo una voz detrás de mí, era él de nuevo
—cl-claro—dije nerviosa cosa que hizo que mis mejillas se tiñeran más de rojos
—maldita sea—escupió con enojo Jaeden y miró a Millie quien se paró para marcharse sin decir una palabra
—ten—extendí la bolsa que mi madre me dió para él—te lo manda mi madre—el me miró dudoso y la tomó pasandosela a Asher, el cual negó con la mirada
—sabemos lo que eres—dijo Jack molesto conmigo pero yo no entendía nada
"¿qué está pasando?" pensé mientras ellos me rodeaban enojados con los puños cerrados
—Jack—dijo Jaeden molestó, miré a Jack y sus ojos se tornaron naranja con un poco de brillo sorprendiendome
—¿cómo hiciste eso?—pregunté asombrada pero ninguno me prestó atención
—Jaeden ella dice la verdad, ella no lo sabe aún—dijo Jack intenté pararme pero Jaeden me acento contre el piso de pronto sentí un gran dolor en mi cabeza, toque está con mi mano sintiendo mi sangre salir por el gran impacto.
No pude gritar, no pude sentir nada ya que sentí una paz en mi interior y así nublando mi vista.
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คl๓αร ℓเ๒єгα๔αร➳נαє๔єภ мαгtєll
Random❛En las afueras del bosque "Dark", se encuentra un pueblo llamado Leípei, famoso por sus distintivas historias de terror que pasaban de generación en generación durante siglos, en donde contaban sobre viejos mitos sobre vampiros y demonios quien ten...