You're my destiny ↬[Langa X Reki]↫

Capítulo uno.

Se suponía que encontrar a tu alma gemela te daría felicidad, no solo porque fueran el uno para el otro, sino por el simple hecho de saber que no importaba el tiempo que pasase, siempre estarían destinados a encontrarse. Y en verdad le hubiese gustado decir que estaba terriblemente feliz, que su alma desprendía energía y calidez.

Pero no. En realidad era todo lo contrario, estaba infeliz, su alma (todo él en realidad) era oscura y desagradable (según sus amigos).

Incluso le dolía la cabeza de solo escuchar la voz de Hinata. Y no es como si él hablara muy bajo. Hinata tenía esa costumbre de gritar cuando se emocionaba.

—¡¿Lo viste?! Se veía súper inexpresivo y encima como se presentó, fue gracioso.

—S-si, si —Hitoka también le seguía el juego al colorado, ambos hablando fuerte y sonrojados hasta las orejas de la emoción—. Realmente quiero hablarle, pero temo que no me entienda algo o simplemente no quiera hablar...

—Yo creo que debe hablar y escribir bien japonés —murmuró Reki con desinterés—. Sino, no estaría en este colegio. Imagínatelo, sería un desastre total. ¿Y cómo es eso de que se emocionen tanto por un chico nuevo? No es la gran cosa.

Hitoka y Hinata miraron al más alto con burla y con un claro gesto de obviedad, como si lo que acababa de decir fuera una absurda mentira.

—No bromees. Es extranjero, incluso físicamente llama la atención.

—Y no solo es muy atractivo, sino que ya muchos le pusieron el ojo encima por su actitud indiferente.

Reki los vio con sorpresa, en especial a Hinata. ¿El chico nuevo atractivo?
Bueno, no iba a negar que tenía un rostro lindo y su cabello daba una sensación de suavidad que hasta querrías hundir tus dedos en el. Era alto y parecía bastante desinteresado por todo en general. Reki consideraba que podría ser esa clase de chico que es popular solo porque sí, aunque en realidad ni siquiera hablara.

Pero tampoco era como ellos describían. Era extranjero, sí, ¿y qué con eso? No era el único extranjero en la escuela. Y sí, era atractivo, pero no llegaba a un nivel como para suspirar por él con tan solo saber su nombre.

—¿Quién es atractivo? 

Una voz de más hizo a todos saltar del susto. Hinata inmediatamente golpeó el brazo de Kageyama (su novio) con el puño cerrado mientras Yachi soltaba un suspiro y Reki sonreía.

Secretamente el pelirrojo admiraba la clase de relación  que tenían esos dos. Si bien Kageyama y Hinata eran raros por naturaleza, sus hilos estaban completamente unidos y firmes. Siempre los veías discutir o darse empujones, pero solo sus amigos más cercanos notaban las clases de miradas que se daban cuando estaban solos o cuando tomaban sus manos con naturalidad fuera del colegio. Reki no quería admitir que aquello lo asustaba en demasía. Nunca se le cruzó por la cabeza que su hilo se uniría al de otro hombre; Langa no le desagradaba, ni siquiera lo conocía para iniciar, pero no se veía como un mal sujeto y para colmo era totalmente grato a la vista. Sin embargo no se creía para nada preparado, no en una situación así. Él no era como Hinata y Kageyama que mostraban tan libremente como se apreciaban el uno al otro. 

Yachi también era extremadamente tímida con estas cosas (como él), se sonrojaba con cualquier persona que le dirigiera la palabra, o malinterpretaba a la gente solo por escuchar mal o por sus formas de vestir. Ella desprendía un aura tan inocente y amable que Reki estaba bastante seguro de que su hilo estaba equivocado. No era posible que algún día le gustara ese tipo, Yachi era tierna, encantadora y todo lo que estaba bien en su simple vida.

Soltó un suspiro cuando Kageyama y Hinata se despidieron de ellos y se marcharon con tranquilidad. 

—Seguro fueron a darse besos o esas cosas de novios que hacen siempre —sonrió con picardía y miró a Yachi con complicidad.