The Demonic King Chases His Wife [Parte 5] [Trad. al español]

Capítulo 894: Feliz sorpresa inesperada (1)

Capítulo 894: Feliz sorpresa inesperada (1)

Muy rápidamente, la temperatura dentro del caldero medicinal aumentó repentinamente y siguió subiendo más y más.

En este momento, el corazón de Su Luo estaba muy enredado.

Claramente tenía la piedra pequeña y podía evitar las llamas, pero como estaba preocupada por su rostro, no podía sacarla.

El jugo medicinal similar a la tinta negra comenzó a burbujear, hirviendo continuamente.

La frente de Su Luo estaba llena de gotas de sudor que seguían cayendo.

Su rostro entero parecía estar empapado de agua.

Las gotas de sudor del tamaño de un frijol convergieron y fluyeron hacia abajo.

A pesar de que su conciencia se volvió borrosa gradualmente, Su Luo todavía apretó los dientes y se obligó a soportarlo.

Justo en este momento, Su Luo de repente sintió un cambio extraño.

Un leve aire cálido se elevó lentamente desde su región púbica.

Posteriormente, un hilo delgado fluyó por todos los meridianos de su cuerpo.

Su Luo de repente se quedó mirando en blanco, luego, se quedó perpleja por las palabras, extasiada.

Si no adivinaba mal, ¡este era el ritmo de ascenso!

Antes, fue ascendida a la cima del quinto rango en el Bosque Negro, sin embargo, no pudo encontrar una buena oportunidad para ascender al siguiente rango. Ahora, ¿finalmente iba a ser promovida?

Los ojos de Su Luo cambiaron a una línea curva de emoción.

En el siguiente momento, sus ojos estaban cerrados con fuerza. Vació su mente de pensamientos que la pudieran distraer. Recitó suavemente el canto que su maestro le enseñó y rápidamente entró en el estado de cultivo profundo.

El jugo medicinal similar a la tinta negra circundante burbujeó y subió.

El calor abrasador le perforaba continuamente los nervios de dolor.

Sin embargo, en este momento, Su Luo estaba completamente inmersa en la emoción de abrirse paso. De modo que casi había olvidado todo el dolor en su cuerpo.

Sin embargo, querer ser promovida era más fácil de decir que de hacer.

De repente, el rostro de Su Luo mostró una expresión dolorosa.

El aire que se movía lentamente alrededor de su cuerpo de repente pareció convertirse en una inundación y era muy feroz.

Las cuatro extremidades de Su luo, con cientos de huesos, convulsionaban continuamente.

Tenía las manos y los pies rígidos como trozos de hierro.

La temperatura de su cuerpo descendía continuamente mientras que la temperatura exterior seguía aumentando incontrolablemente.

Volviéndose caliente, luego frío, su cuerpo estaba extremadamente desequilibrado, lo que era una señal del estado de Retroceso a la locura.

En este momento, Su Luo solo sentía que toda su cabeza estaba mareada, la sentía tan dolorosa como si estuviera a punto de explotar.

Sabía que si permitía que este estado continuara, muy probablemente entraría en el Retroceso a la locura.

¡Ella no quería volverse loca!

¡Su Luo apretó los dientes y se recordó continuamente a sí misma que debía soportar!

¡Soportar!

¡La oportunidad solo llamaba una vez!

Y mucho menos decir que si no se abría paso, moriría quemada ahí dentro.

Su Luo apretó los puños y usó su energía espiritual para apaciguar el aire que fluía a través de sus cuatro extremidades y cientos de huesos como un toro feroz y furioso.

Solo que, por el cuerpo violentamente tembloroso de Su Luo y la expresión dolorosa en su rostro, claramente, hubo poco efecto.

¿Qué hacer?

Dentro del espacio, el pequeño dragón divino sintió el dolor de Su Luo. ¡Apretó las patas con fuerza!

Ese par de ojos siempre inocentes, limpios, transparentes, limpios como el cristal, enormes y límpidos ahora eran rojos escarlata.

Quería salir a ayudar a Su Luo, pero...

Pero ahora, estaba sellado en una bola de luz, no importaba cómo lo intentara, no podía salir.

El pequeño dragón divino usaba continuamente su cabeza para golpear las paredes de la bola, pero esa pared era como goma, muy elástica. No importaba qué, no podía salir.

"Awoo awoo awoo—" El pequeño dragón divino estaba extremadamente enojado.

"¡Tan ruidoso!" Un tono impaciente vino del interior de la pequeña piedra.

La atención del pequeño dragón divino se sintió atraída de inmediato.

Levantó la cabeza.

Sus ojos se volvieron extremadamente brillantes al encontrarse con su enemigo.

Sin embargo, estaba claro que ahora no era el momento de las luchas internas.

Uno podía ver que el Pequeño Cielo lanzó una mirada perezosa al pequeño dragón divino y dijo débilmente: "¿Qué estás mirando fijamente? Rápidamente ven a golpearme".

El pequeño dragón divino en este momento no tenía tiempo para prestarle atención y continuó rascando frenéticamente la pared de la bola de luz.