| CAPITULO III | Pleasure and melancholy

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Wanda se había levantado de excelente humor, la noche anterior, después de llegar a su casa, había empujado los tacones y se había desnudado como acto reflejo, se sentía caliente, que habría pensado el, ¿Estaría molesto por que había tomado su saco para darse placer?...

Ese tipo de preguntas no dejaban dormir a Wanda, quien decidió sumergirse en más placer, para poder conciliar el sueño, su cuerpo tenía que cansarse, en esa ocasión recurrió a Sona Cruise o Vizhi(como ella le llamaba) su fiel acompañante en noches como esta, donde el calor en su entrepierna no disminuía ni con una ducha y no quería ducharse, en su ropa aún había un pequeño rastro del olor de Visión que se mezclaba con el olor a sexo y travesura que emanaba de ella, estaba decidida a dejar que su mente volara. Tomo su juguete y se quitó las bragas, tomo un poco de vino que guardaba en ocasiones especiales y se recostó en su cama....

La penumbra, las sabanas de algodón y una copia del retrato de Víctor eran testigos de los gemidos que emitía la boca de Wanda, cuando estaba a punto de correrse miro el cuadro de Visión y lo imagino entre sus piernas, casi podía sentir sus dedos o su lengua perderse en su centro, imagino sus manos apretando su carne, tocando cada parte de su ser y con un último movimiento, gimiendo su nombre " Vizh" se perdió en los sentimientos que este le provocaba sin ser consiente de tal honor... La preciosa castaña rojiza se dejó caer en los brazos de Morfeo que para ella tenían forma de un ardiente arquitecto.

Después de recordar el placer de la noche, Wanda se dirigió a la ducha para ahora si con mucho penar, quitarse el aura sexual.

No podía presentarse a clases de esa manera, donde habría quedado su decoro... Después de un relajante baño, noto que sus piernas ya habían recobrado cierta fuerza, bueno quien no recobraría la vida después de los colosales orgasmos que había tenido.... Imagino que, si esos eran grandiosos, los que tuviera en los brazos de Víctor serían aún mejores... tendría que inventar una nueva palabra para describirlos.

El oufitt del día era más sencillo, un pantalón de mezclilla con una blusa blanca formal que se ceñía al cuerpo, acompañada de una gabardina azul marino, una bufanda y una de sus preciadas boinas hechas a mano, hoy tocaba azul con un pequeño y tierno moño blanco en el centro.

Las escaleras del edificio eran testigos habituales del rítmico caminar de Wanda y el lobby del complejo ocultaba la vista libidinosa del hijo de la Dueña, Simón Williams. Había intentado acercarse a ella, pero solo lograba que lo alejara porque decía que no podía ofrecerle más que una amistad sincera, los puños de Simón se apretaron en torno al periódico del día, donde se anunciaba la nominación al Pritzker de cierto Arquitecto ardiente y brillante, Wanda se acercó a la recepción

-Hola hombre maravilla, ¿Cómo estas hoy? ¿Qué tal el trabajo? - Intentó sonar amable pero no podía evitar sentir un poco de culpa por haber rechazado múltiples veces a Simón, ella no lo veía como pareja, a lo mucho como un amigo...

- Bien, todo aburrido como siempre, y tú ¿Qué me cuentas preciosa? - dijo intentando sonar seductor lo que solo hizo que las entrañas de Wanda se revolvieran...

  - Excelente como siempre- dijo con una sonrisa más obligada que cualquier cosa - ¿Puedo ver el periódico- añadió tratando de voltear la atención a otra cosa

-Claro ten, aquí está el que trajeron para ti- Simón trató de rozar sus dedos contra los de ella, pero ella fue más rápida, tomó el periódico y se encaminó a la puerta...

-Gracias por el periódico Simón, que tengas un buen día, hasta luego- y apresuro sus pasos, antes era cómodo hablar con él, ahora era demasiado incomodo, después haber intentado una relación y fracasar, pero trataba de ser amable, no podía darse el lujo de que la echaran por motivos personales del edificio. Hoy había decidido ir e n autobús, cuando llegó a la parada, se sentó a esperar, abrió el periódico y se fijó que un guapo hombre estaba en la portada, era el Profesor Shade, anunciaban que estaba nominado a los premios Pritzker y era orgullo Nacional, había varios artículos sobre su importante carrera y los proyectos en los que había trabajado de la mano de los Foster's (Janne y Norman) así como los proyectos que había realizado con su padre y hermano, Howard y Anthony Stark.

Diséñame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora