Capítulo 34

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Capítulo 34: una conferencia de prensa repentina

Lo primero que me vino a la mente al conocer la noticia de la conferencia de prensa de Alexandro fue la esperanzadora idea de anunciar el divorcio.

Pero pronto abandoné la idea.

'No, todavía no es costumbre.  No es en una conferencia de prensa donde se tratan estos asuntos, sino según la ley debe ser en la corte real para anunciar el matrimonio o divorcio de la familia imperial.  Y no importa lo enojado que esté Alexandro, no creo que me lo diga y anuncie el divorcio …'

Cuando la esperanza desapareció, mí ira se filtró.

Entonces, ¿qué diablos quiere anunciar Alexandro?

Tendré que saber eso para poder responder a lo que está tratando de hacer ... no había información ni método en este momento.

'Oh, no lo sé.  Vamos a pensar en ello después.'

Pensando así, me preparé y me dirigí al lugar donde estaba programada la rueda de prensa.

La conferencia de prensa se llevó a cabo en el vestíbulo del palacio principal, donde se reunieron más de un centenar de personas, según se estima.

Y, por supuesto, había una cara familiar.

"¡Su Majestad! ¡Por favor diga algo antes de la entrevista!"

"Su Majestad, ¿cómo se siente?"

"Su Majestad, ¿tiene un divorcio en mente?"

Sin hacer caso de la avalancha de preguntas de la prensa, Alexandro susurraba con su secretario.

Alexandro, que estaba conversando con su secretario, sonrió.  Luego se sentó con su habitual sonrisa tranquila.

"Eh, cállate, cállate. La conferencia aún no ha comenzado, y estás frente al hombre más noble del Imperio".

El secretario ordenó con severidad, pero los reporteros pronto comenzaron a tararear en voz alta nuevamente, solo por un momento cuando se callaron.

"Su Majestad, ¿es cierto que presionó a los cinco diarios principales para que no lo informaran?"

"¿Cuáles son sus planes para el divorcio? Hay un rumor de que va a nombrar a su reina, ¿es cierto?"

"¡Oh, cállate! ¿Y quién es el reportero que hizo la pregunta? ¡Ten cuidado!"

A pesar del bautismo de preguntas que habrían sacudido la mente de la persona promedio, Alexandro no respondió.

Simplemente sonrió con un rostro atractivo y confiable y buscó los datos frente a él.

'Oh, eres un tipo duro'.

Chasqué mi lengua cuando lo vi así.

'Escuchando las preguntas de los periodistas, de alguna manera el divorcio entre Alexandro y yo resultó ser un hecho.'

No podría haber estado más feliz, pero de alguna manera me sentí incómoda.

Porque leí la siniestra señal del rostro relajado de Alexandro.

' Es cierto que fui a la calle Ramancha, y allí gasté mi dinero ... ¿qué puede hacer Alexandro con la opinión pública? A menos que envíe a todos los periodistas a la cárcel y reprima a la prensa'.

Por supuesto, no importa cuán poderoso sea Alexandro, la posibilidad de hacerlo era casi nula.

Cuanto mayor sea el poder, con más cuidado habrá que utilizarlo.  Hay casos de revolución en todas partes, sin justificación, quebrantando la ley y torturando al pueblo.

MDDM [PAUSADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora