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— Hyunjin, queda la nada misma pa que nos vayamos pa la casa, despierta po. - Seungmin literalmente samarreo a su compañero de puesto, que al levantarse dejo ver lo desaliñado y desarreglado de su uniforme.

— ya.. toi despierto. - el Hyunjin se empezo a arreglar el uniforme, cuando lo tenía listo el timbre sonó. — ¡wuju!, me viro. - agarró a Seungmin arrastrandolo con el por todo el Liceo.

Hyunjin y Seungmin asisten al Liceo A-19, un Liceo de la zona, publicó, sin alto estándar, pero tampoco tan bajo, no era ese tipo de Liceo donde las minas salen embarazadas al primer mes de clase, tampoco pa tanto.
Podría decirse; un liceo piolita.
Hyunjin es un falite a cagar, pero de los de verdad, vive en las zonas más bajas de la ciudad, más conocido cómo la pobla, y respetado por toda esta, el Hyunjin es de esos que no le da miedo caminar por ahí solito y con el celular en la mano, porqué ahí Hyunjin es uno de los que manda, también es abiertamente bisexual, y gracias al respeto que le tienen todos, ningúno nunca le a dicho alguna wea, porqué sabe que si lo hacen van a terminar mal, y no, Hyunjin no anda con amenazas, nunca a sido de andar amenazando solamente, siempre termina con lo que empieza.

Por otra parte Seungmin, vive en buena zona, no la mejor, pero vive cómodamente, considerandose clase media, con sus papás casados, trabajo estable, va a un buen liceo, realmente podría considerarse a simple vista que Seungmin no tiene ni un brillo, pero su cara, weon su cara es de esas que te obsesionai con ver, Seungmin es precioso y lo sabe y le saca provecho. Seungmin también es bisexual, de hecho, lo descubrio con Hyunjin, y es que aveces le gustaba reforzar la amistad con el y terminaban comiéndose o a veces hasta pasando a tercer grado, nunca hubo incomodidad entre ellos por tirar de vez en cuando, siempre habían tenido esa atracción y tensión sexual, fue un alivió poder juntar sus cuerpos luego de años con esa tensión acumulada.
Todo el liceo sabe que Seungmin es de esos que salta de flor en flor, es pelaó a morir, si vas al parque cerca del liceo, de seguro te encontrai al Seungmin pelandose con algún mino o alguna mina del liceo, y no es raro para nadie, sin embargo eso deja mucho que desear para las minas y minos que de verdad se enamoran del castaño. Y a Seungmin, le da lo mismo, el solo quiere divertirse un ratito, siempre deja claro que no hay que meter sentimientos porqué el, no se hará responsable.

Frente al Liceo A-19 se encontraba otra institución, completamente diferente que llevaba por nombre Liceo saint George, Liceo privado de hombres.
A los ojos de los de la institución publica, ahí asistían puros weones cuicos, hijitos de papá que seguro votan rechazo.
Los de ambas instituciones, con constancia se veían a la hora de la salida, ya que compartían de esta misma, a Seungmin y Hyunjin le desagradaban a morir todos los weonsitos de ese liceo, ni cruzaban la calle cuando salían pa' no toparse con ellos, eran realmente desagradables, hasta su forma de hablar les hacían sangrar los oídos.
Se notaba demasiado la diferencia entre ambos liceos, el uniforme del A-19 era azul y gris oscuro, apagado, la gran mayoría nisiquiera respetaban el mismo código de vestimenta implicado por el liceo, llevaban el pelo largo, teñido (como Hyunjin, que lo traía rubio y largo), pircings, polerones de colores, en conclusión; todos se pasaban por el pico el codigo de vestimenta.
Al contrario del Liceo Saint George, ahí el uniforme era rojo vino con negro, los lunes hasta llevaban terno, ya que debían hacer la oración, ningúno tenía el pelo pintado o largo, todos iban con el poleron que tenía la insignia del liceo, eran como mundos paralelos.
Bastante brigido estar separado por una pura calle y ser tan diferentes.

Hyunjin siguió arrastrando al Seungmin hasta que por fin llegaron al quiosco de la tía margarita, se compraron un juguito con papas fritas, lo mejor. Se terminaron toda la comida mientras hablaban en el comedor del liceo, cuándo estuvieron tiki taka, empezaron a arreglarse pa irse.

— ahora sí, pa la casita a hecharse un buen tuto. - sonrio Hyunjin colgandose su mochila en el hombro, Seungmin imitaba su acción empezando a caminar hasta la salida.

Cuándo pasaron por esta, los dos se vieron, estaba lleno de weones cuicos, eso pasa por salir más tarde de la hora estipulada.

Empezaron a avanzar hacía el paradero, en eso Hyunjin sintió como alguien chocaba contra el, golpeando su duro abdomen.
Hyunjin solo retrocedió unos pasos, en cambio el cabro chico cayó al suelo de poto.

— ¿acaso no teni ojo' pa ver por donde vai?, aweonao. - claro, Hyunjin se puso a la defensiva al ver al niño que se cayo con el uniforme rojo bien conocido pa' el.

— perdón, perdón, perdón, perdón. - el chico se empezaba a levantar repitiendo el "perdón" varías veces con lágrimas en sus ojos.

Seungmin vió con desaprobación a Hyunjin por haber tratado tan mal a un niño.
— ya, oye tranqui, no pasa nada. - Seungmin se acerco un poco, para limpiar el inexistente polvo de los hombros del niño.

— ¿te lastime? - el pequeño se dirigio a Hyunjin, con quien había chocado.

— pero si juiste vo el que te caíste de poto y me veni a preguntarme a mi. - Hyunjin rodó los ojos, todo choro. — ya weon, si no pasó nada, virate.

El niño asintio, estaba a punto de irse cuándo otros weones del liceo cuico aparecieron, dos weones Kilometricos, acorralaron al niñito, sacandole la mochila y tirandola lejos, estaban a punto de empezar a pegarle al pequeñito cuándo Hyunjin el justiciero se metio.

— ¿que le vai a hacer al cabro chico weon? - Hyunjin agarro las manos del grandote.

— ¿quién eres tú? - hablo el gigante, con el ceño fruncido. — ¿quién te conoce? - lo empujó.

— e que yo no conozco a mucho' sacoweas.. - Hyujin empujó de vuelta al loquito desconocido para el, y el otro se le vino encima.
Seungmin actuo a tiempo pegandole una patada en los huevos que lo termino dejándolo en el piso.
El otro gigante se dió cuenta de su amigo en el suelo y lo fue a ayudar.

— maricon de mierda, mañana a la entrada no te salvas, a nuestro liceo no entran afemanidos culiaos.

Los dos gigantes se fueron, uno sin poder caminar medio bien.
Hwang y Kim se acercaron al más chico levantandolo.

— hermano, ¿que wea fue eso? - hablo Hyunjin entregándole su mochila, la cual era rosada palida con varios pins de flores.

— ¿estai bien? - Seungmin se acerco al pequeño que aún seguía medio en schok. — mira, yo me llamo Seungmin y el es Hyunjin, ¿nos dices tu nombre?

— Jeongin..

petitⴰ༢ ( Hyunminin - 🇨🇱 ) ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora